Capítulo 59

77 4 1
                                    

-Tengo que ir con ella, debe estar conmocionada, lleva más de un dia dormida, tengo que hablar con ella- le súplicaba a Simon para que me dejara ir a ver a Brenda.

-Lo sé, pero ahora mismo puede reaccionar mal a cualquier cambio, y si se pone agresiva...

-Me sé defender, y realmente es necesario que le cuente lo que ha pasado, y tengo que ser yo. ¿Lo comprendes?

-De acuerdo Thomas, por favor Éric, acompañalo. Y no os vayáis muy lejos por si pasa alguna cosa- le ordenó al curandero que nos había dicho lo de Brenda.

El chico asintió, y me pidió que lo acompañara.

-Gracias Simon.

-Vete tranquilo, ya le diré yo a Minho lo que ha pasado, seguro que lo entiende.

Me despedí y seguí a Éric, aunque yo ya sabía en que campaña se encontraba Brenda. Cuando llegamos a la puerta, él se quedó fuera, y me dejó pasar. Me dijo que estaría por aquí cerca por si me necesitaba. Se lo agradecí y entré rápidamente.

Al encontrarme a Brenda en la cama, con los ojos abiertos, sentí un profundo alivio en mi interior. Pero al ver su mirada perdida, deduje que estaba desorientada. Ella intentó incorporarse, pero el dolor se lo impedía. Así que me acerqué yo. Y de golpe se dio cuenta de que yo estaba ahí.

-¡Thomas! Por fin, una cara conocida. No he hecho más que ver a curanderos haciéndome mil preguntas sobre cómo me encontraba. Y no paraban de susurrar cosas, pero yo no entendía nada. ¿Qué me ha pasado?

-¿No lo recuerdas? Te desmayaste, te habían herido en la pierna, perdiste mucha sangre. ¿De verdad que no lo acuerdas?- estaba algo sorprendido.

-Bueno, recuerdo que me llevaste a la enfermería, pero luego... no sé, todo está distorsionado.

Llegó el momento, debo contárselo.

-Verás Brenda, resultó ser más grave de lo que parecía en un primer momento. Perdías mucha sangre, y...

Antes de poder seguir hablando Brenda retiró la manta que tenía encima y prometo que jamás había oído un grito tan espantoso como el que ella hizo al verse la pierna amputada.

- Tranquila Brenda, respira conmigo, déjame que te explique.

- M-mi pierna Thomas... ¡No tengo pierna! - gritó ella asustada.

- Lo sé, tú herida era muy grave, tuvieron que hacerte un torniquete para frenar la hemorragia, pero el precio por salvarte la vida fue... - no pude seguir hablando, me costaba decir en voz alta que le habían cortado la pierna.

Y Brenda de golpe se desmayó. Llamé a los curanderos que estaban por las tiendas y volvió Éric con nosotros. Le tomó el pulso. Le abrió los ojos y pasó una linterna para ver si había respuesta. Vi como llamaba a una compañera y le pedía que trajera alguna cosa.

- ¿Está bien? - pregunté un poco asustado.

- Vamos a ponerle más morfina para el dolor. Se ha desmayado pero está bien, es el shock de la noticia, pero se repondrá.

- De acuerdo - dije no dejándome tranquilo sus palabras.

- Thomas, esto va a ser muy duro para ella, tardará en recomponerse a nivel mental muchos años. Quizás nunca llegue a acostumbrarse a su cuerpo. No sé cómo podrá volver a su vida con este cambió físico. Pero sí sé que no podrá superar esto sin ayuda ni apoyo.

- Lo entiendo - dije algo triste por las palabras de Éric.

- Cuando despierte, intenta calmarla, no la atosigues con información sobre la batalla, ni muertes ni cosas acerca de su operación. Simplemente intenta acompañarla en su duelo, porque perder una extremidad lleva su tiempo de aceptación.

- Lo haré. ¿Puedo quedarme con ella hasta que despierte de nuevo?

Éric asintió y volvió a irse. Al poco, su compañera llegó con la morfina de Brenda. Yo me quedé sentado a su lado, agarrándole la mano mientras seguía dormida. Miré de vez en cuando el muñón de la pierna para intentar acostumbrarme a la nueva realidad. Era muy fuerte todo lo que había pasado. No sabía cuándo podría contarle a Brenda la muerte de Jorge, o lo que había hablado con Ava Paige. Pero sabía que ante todo, debía ayudarla a superar esto. No la abandonaría.

Pasaron los minutos. Ya debían haberse ido hace un rato la expedición en busca de los otros inmunes, pero en lo único que podía pensar era en Brenda y que diría cuando despertara. Solo esperaba que Minho y su grupo tuvieran suerte en la misión porque ya no podía soportar más malas noticias.

Al cabo de unas horas, Brenda empezó a mover los ojos. Yo me incorporé de inmediato para mirarla a la cara mientras le daba la mano.

- ¿Thomas? - dijo ella con la voz que aún se le notaba mareada.

- Si, estoy aquí. No tengas prisa, ve a tu ritmo. Intenta recomponerte, puede que aún te haga efecto la morfina.

- Morfina... Me han puesto morfina... - decía con la voz aún un poco débil pero intentando abrir los ojos del todo.

- Así es. Brenda, quiero decirte algo, algo que llevo pensado mucho tiempo. No sé si es el mejor momento para decírtelo pero dadas las circunstancias, ahora mismo es lo que siento.

- ¿Qué es Thomas? - dijo un poco más serena.

- Es que necesito que sepas que... te quiero. Te quiero Brenda, y sé que tú también me quieres. Y por eso sé que podremos con todo lo que nos venga por delante. De verdad espero que el amor pueda ser la solución a la miseria y el miedo. Que pueda ayudarnos a sobrellevar lo que pase en el futuro. Solo espero que confíes en mí, y que mientras estemos juntos podremos con todo. Yo nunca te dejaré - dije emocionado.

Llevaba tiempo con estos sentimientos guardados y no podía seguir dejándolos dentro, tenían que salir. Me había costado mucho verbalizar como me sentía en muchas ocasiones, pero después de todo lo vivido, ya no podía seguir haciendo lo mismo.

Brenda me miró, con ojos tiernos aunque aún un poco confusa por los analgésicos. Dibujó una ligera sonrisa en su cara y me apretó la mano con fuerza.

- Ojalá el amor nos ayude. Lo deseo de verdad.

N/A

Hola de nuevo. Se me ha hecho rarísimo escribir este capítulo después de tanto tiempo sin hacerlo. No sé si os gustará o no, pero estoy intentando darle un final a la historia.

Ya queda menos, seguramente uno o dos capítulos más y  ya podré dar por terminada esta novela que empecé a escribir cuando tenía 16 años, y mirame ahora, con 23.

Espero que estéis todxs bien y sigáis ahí para ver el final.

Chao!

LOS MUNESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora