Amor Loco

Capítulo 14

Levy

—¡¿Qué?! —Mire a Juvia con el vestido que habíamos escogido para Lucy.

—¿Qué pasa Levy? —Le hice una seña con la mano que guardara silencio. Lo cual hizo.

—Lucy saldrá esta noche. —Sentenció Gajeel por teléfono. No podía dar crédito a lo que oía, si apenas hace dos días que Lucy acababa de despertar, y ahora a menos de 4 horas, saldría del hospital completamente recuperada.

—¡Pero aún no tenemos nada listo! ¡No se sabe si Erza hizo reservación para Dios sabe cuándo y si ustedes ya vieron el traje de Natsu! ¡Gajeel por favor dime que ya vieron eso! —el silencio de mi novio me hizo enloquecer—. Gajeel... mi amor... —comenzare tranquila— ¡SI NATSU NO ESTA LISTO PARA LA CENA TE JURO QUE TE VOY A COLGAR DE LOS PIERCINGS DE LA NARIZ DEL TECHO!

Y colgué.

—Demonios, Levy. Te pusiste intensa. —Mire a Juvia quien se estaba riendo.

—Lucy saldrá en menos de 4 horas y los chicos aun no tienen absolutamente nada listo. Deja le marco a Erza para que haga la reservación a la de ya. —Volví a teclear, pero esta vez el número de Erza. Juvia tecleó en su celular algo también.

Un timbre, dos timbres, tres, cuatro... CINCO. MALDICIÓN ERZA.

Cuando estuve a punto de colgar contesto.

—Levy, ¿qué pasa? —suspiré de alivio.

—Qué bueno que contestas, Erza. Necesito que hagas la reservación en el restaurante que tienes en mente. En menos de 4 horas Lucy será dada de alta y tenemos que ir a arreglarla aún.

—Va, te veo a las 6 en el hospital en la habitación de Lucy. Te mandaré el nombre del restaurante por mensaje.

—Va. —Colgué la llamada dándome cuenta qué Juvia estaba casi gritándole a Gray por teléfono.

Caminé a la caja con el vestido y los zapatos en mano, saque la tarjeta de crédito de papá y pague. Bendito dios que ellos jamás revisaban cuanto gastaba, si no, me hubieran colgado, pero es una ocasión especial.

Cuando firme el papel de que yo usaba la tarjeta, Juvia vino a mi encuentro con una sonrisa en su rostro.

—Lo de los chicos está arreglado, están viendo ahora mismo la vestimenta de Natsu. —Mire a Juvia sonriendo tomando las bolsas que me tendía la muchacha.

—Que les vaya bien, vuelvan pronto. —Dijo cortésmente con una sonrisa natural y simpática.

—Gracias —pronunciamos Juvia y yo al mismo tiempo. Al salir de la tienda subimos a mi Corolla 2017 gris, estaba aparcado justo en la entrada de la tienda. Al voltear al reloj del auto vi que eran las seis menos quince.

Coloqué el cambio y aceleré, tenía poco tiempo para llegar al hospital. Mi teléfono vibró.

—Juvia, ¿puedes ver qué es? —Venía manejando y prefería prevenir cualquiera accidente en estos momentos, no se necesitaban más desgracias.

—Claro Levy —Juvia tomo mi teléfono y deslizo el dedo por la pantalla—. Es de Erza, la dirección y el nombre del restaurante, se la enviaré a Gray.

—Perfecto, gracias Juv. —Sonreí y encendí la radio. Todo estaba saliendo perfecto.

Gray

—Entonces, ¿quién lo va a levantar? —Gajeel y Jellal me mataron con la mirada.

—Tú lo conoces desde la infancia, creo que tu deberías hacerlo —dijo Jellal.