¡¡HEY!!
Como no actualicé la semana pasada. Les traigo un capítulo de 4,000 palabras. Siéntense con algo de beber y de comer, porque esto se pondrá bueno.
Sentados ya en la mesa nos estábamos riendo más de lo que creí. Gray me había lanzado papas fritas a lo que yo le respondí de la misma manera, pero con los totopos. Lucy se estaba riendo como el querubín que era mientras hablaba con Levy a su lado, mientras mis padres se reían entre ellos al vernos pelear, Gajeel estaba atascándose un gran pedazo de carne cuando Jellal le lanzo un poco de guacamole.
Todos nos quedamos serios de momento esperando a ver la reacción del moreno, el cual solo agarro un totopo y lo embarro del guacamole de su cara para después ingerirlo.
-Esta bueno -instintivamente todos comenzamos a reír con más ganas.
-¡Oigan! -exclamo mi madre- ¿Qué tal si después se van a divertir a la piscina?
-Estaría genial -mire a Lucy y deposite un beso en su cabello inhalando una vez más su delicioso aroma.
Justo en eso Wendy entro corriendo al comedor con un vestido blanco, desmangado y con fajín rojo, su cabello estaba atado en dos coletas y en sus pies traía medias a medio muslo blancas al igual que sus zapatos. Mi hermana ya tenía 17 años.
-¿A dónde vas? -la cuestioné inmediatamente ganándome una mirada de burla de todos los presentes.
-A jugar videojuegos con Romeo a PlayLand. -Arqueé una ceja.
-¿Vestida así? Por supuesto que no. Subes y te cambias de ropa inmediatamente pulga. -Sus ojos cafés me miraron divertidos.
-No. -Y salió corriendo mientras reía como loca, los sonidos siguientes fueron la puerta, un claxon y para finalizar un chirrido de llantas. Mire a mis padres y ellos solo miraban a los lados o comían.
-¿Por qué no me apoyaron? -Mi padre carraspeó un poco mirando a Grandinee.
-Porque ella ya está lo suficientemente grande Natsu, calma tus celos -hice un mohín inconsciente- y quita ese puchero, parece que tienes quince años en lugar de veinticinco. -dirigí mi mirada al plato riendo levemente al oír como otra vez todos estallaban en carcajadas.
¿Qué cosas no?
Minutos después fuimos todos al patio trasero, tomé a Lucy en brazos y corrí a la piscina.
-¡No! ¡Natsu no traigo ropaaaaa! -Salté sin importarme nada que anduviéramos hasta con los zapatos. Al subir a la superficie, vi que los otros igual me habían imitado.
En uno de esos momentos los chicos nos colocamos a las chicas en los hombros y comenzamos una pelea de ver quien tiraba primero a quien. Erza y Jellal ganaron la pelea.
No supe ni que paso en realidad, pero cuando menos lo espere era de noche, había Dj, chicos de la universidad, alcohol, mucha gente, luces y todos bailaban al mismo compás.
Tome a Lucy de la cintura bailando al ritmo de la música, había perdido a los chicos de mi vista, mis padres ya se habían ido a dormir, pero habían asegurado los cuartos y salones de la casa con seguro.
Ni yo ni Lucy estábamos tomando, solo bailábamos al ritmo de la música, sus hermosos mares chocolates conectaron con los míos, dándome cuenta de que en verdad la amaba con tanta locura. Nuestro amor era muy diferente al de muchas personas.
Yo no quería bajarle la luna, o las estrellas. Yo quería que ella me acompañará, que estuviera ahí para celebrar a mi lado todas mis metas, y yo celebrar las suyas. Sentirla a mi lado en los buenos momentos, pero más en los malos y en los peores. Ella era un maldito ángel. Mi ángel, que me salvo de un infierno.
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Amor Loco
FanfictionLucy era hija única, y huérfana, sus padres le dejaron suficiente herencia hasta más allá de su muerte. Pero para todos era un bicho raro o una gema preciada solo por una razón. Era virgen. Algo muy raro en la actualidad para una chica de 20 años...