Las palabras tienen vida propia / Taeyong y tú

UN SUSTO #17

Después de esa tarde me decidí a dormir por la noche. Así pasaron los días ensayando, hasta que un viernes por la tarde mientras estaba sentada en el piso de la sala de práctica descansando,  Violet había ido al baño, cuando vino de vuelta estaba corriendo con una pequeña sonrisa en su boca y con su teléfono en la mano derecha.

          —¡Adivina! —exclamó Violet

          —No... sé, ¿pasó algo?

          —Doyoung sacó un STATION con una chica del grupo GUGUDAN

          —¡Que bien por ellos! —dije irónicamente

          —Es una canción de amor, ¡veamos juntas el vídeo!. ¡Por favor!—ojos de cachorrito, eso siempre le funcionaba conmigo.

          —Ah... está bien, siéntate aquí —palmeé el lugar a mi lado.

Comenzamos a ver el vídeo desde el teléfono de Violet. Visualmente era muy lindo, sus colores cálidos y con un toque a vídeo antiguo. Doyoung salía muy bonito para ser sincera, el close up que le hacían a su cara hacía verlo muy atractivo y guapo, no podía dejar de ver esos inmensos ojos saltones que él tiene. Noté que realmente se veían bien juntos y que lograban parecer una pareja realmente tierna y realista en cuanto a la historia que contaba el vídeo, me picaba el bichito de la curiosidad si es que así funcionaba un amor sin tener que estar escondiéndose de cámaras. La chica que cantaba con Doyoung era realmente bonita y su canto era igual, me preguntaba si Doyoung sería de esa manera con su novia, si tal vez Taeyong podría llegar a ser así.

          —¡Que vídeo más lindo y la canción lo es aún más —agregué. El vídeo había terminado ace unos segundos.

         —¡Que envidia!, yo quiero un STATION con Doyoung —se lamentó Violet

          —¿Ahora irás por Doyoung?. ¡Violet contrólate por Dios! —exclamé un poco molesta. Me había sorprendido como podía cambiar de un chico a otro tam rápidamente.

          —¿Por qué te pones así? —preguntó Violet

          —Es solo que... no sé, no quiero verte triste otra vez

          —Ahora que me doy cuenta, has estado mucho con él —bromeó Violet 

          —¿Con él?—esperaba que no hablara de Taeyong, justamente pensaba en él.

          —Con Doyoung, de él estamos hablando. Comprendo la situación

          —¿En serio que comprendes? —fui irónica

          —Claro, no tocaré a Doyoung. Ahora, iré para allá... adiós—la chica se puso de pie y se sentó en un sofá que había en la esquina de la sala de prácticas. 

Supuse que Violet creía que me gustaba Doyoung, por lo no comprendía nada en realidad. Eso obviamente no era verdad pero quería que se calmara por un tiempo, ir de chico en chico no le dará una buena reputación y no quería que se la pasara llorando tampoco.

Ya en la noche guardamos nuestras cosas y nos llevaron en la van a nuestro hogar. Una vez allí nos fuimos a dormir rápidamente, el cansancio no nos dejaba otra opción. Al otro día teníamos que asistir en la mañana a una entrevista para una revista y además nos harían una sesión de fotos, luego para la tarde nos la dejaban libre. Como era fin de semana nuestra empresa nos daba rato libres casi siempre esos días. Terminamos nuestra agenda al día siguiente cerca de las dos cuarenta p. m. y nos llevaron directo a casa, una ves allí nos propusimos con las chicas dormir un poco para poder tener pilas recargadas durante la tarde y que el sueño no nos ganara. Dejé mi teléfono con la alarma programada a las cinco p. m. por si no lográbamos despertarnos antes. Cosa que pasó y nos despertamos gracias a la alarma de mi teléfono.