Madison.
Me detuvo. No me dejo que quitara el botón de sus pantalones. Quiero complacerlo.
Al escuchar decir eso abrí mis ojos que inconscientemente había cerrado y por los cuales lágrimas salieron. Lo mire y me estaba viendo directamente a mis ojos con una sonrisa tranquila. Quito mis manos de su pantalón bruscamente y me abrazo. Fue tan rápido que mis brazos quedaron contra su pecho.
—Madi, te juro que te haría el amor ahora mismo, pero tú no estás lista y estamos en el colegio. No sería el mismo sentimiento Madi. Lo que estábamos a punto de hacer se llama sexo.- no sabía ni qué decir, ¿a que se refería?
—Hay diferencias entre tener sexo y hacer el amor. Tener sexo es penetrarte con mi miembro, hacerlo salvajemente y que el orgasmo sea el único propósito. Pero cuando haces el amor, todo es perfecto, los besos, las miradas, los toques, los movimientos y llegar al orgasmo solo es una pequeña parte de ello.Me daba vergüenza que el se diera cuenta de que no estaba lista.
El antes me lo había mencionado,: "... con Anabell tuve sexo, pero a ti Madi, te haría el amor toda la eternidad." Nunca se tomo el tiempo de explicármelo, pero ahora entiendo. Ya antes habíamos pasado por esta situación pero esta vez quería, pero no podía.
—Ya te dije Madi, mis intensiones contigo no son esas, eso solo forma parte, pero así tenga que esperar cien años para poder tocarte y hacerte sentir en lo más alto de la vida, lo esperare.
—Andrew...
—No digas nada, sólo déjame abrazarte.
Pude liberar mis brazos de su abdomen y yo también lo abrace. Se encargó de que mi falda estuviera en su lugar y me abrazo aún más fuerte. Mis pechos estaban chocando contra el suyo y me dolían.
—Me duele.- a penas pude decirlo ya que me estaba quedando sin aire.
El se alertó y se separó de mi rápidamente. Me miró y con sus ojos me pedía disculpas. La liga que sostenía mi cabello abundante y rizado se rompió y todo mi cabello callo sobre mi rostro. El río y retiro mi cabello de mi vista. Me beso y mordisqueo mi labio, de igual forma beso mi frente y me coloco en su pecho.
—Escucha mis latidos.- sus latidos eran rápidos.
—Eres la única que me provoca esto.En el fondo escuchamos un sonido, como el de una cámara. Observamos quién era y me dio vergüenza que Liam viera como Andrew y yo estamos sentados.
—Muy romántico esto, les mandare la fotografía.- me levante súper rápido y inconscientemente me sonroje aún más.
Liam era el hermano mayor de Liza, era un chico deportivo, sincero, sociable e inteligente. Se graduara este año del colegio, planea ser un sargento de la policía. Liam era igual de importante como lo era Liza para mí. El ha sido de esos chicos que a pesar de saber tus defectos sigue junto a ti. Recuerdo que una vez me dijo que yo le gustaba y desde entonces me dice...
—Mi chica ya es experta en matar chicos con su hermoso cuerpo y destreza, que suerte tienes Andrew.
Andrew sabia los sentimientos de Liam, pero nunca les presto atención, su amistad era más grande.
—Le estoy enseñando poco a poco, Liam, pero creo que este es de los casos donde el estudiante supera al maestro. Mira como me tiene.- Andrew hizo notar su entrepierna, Liam río.
—Chicos estoy aquí.
—Oye Andrew, será mejor que cambies de tema porque Madi está a punto de estallar de tan roja que esta.- tenía razón, sentía mi rostro caliente.
—Si, ¿Liam buscabas a alguien?- dijo Andrew curioso.
—Es cierto un poco más y lo olvido. Te estaba buscando a ti Madi. Quería regalarte esto.- Liam me acerco lo que parecía un cupón.
—Hace unos días estaba en un centro comercial y una señorita muy amable me regalo este cupón de ropa en una tienda que se que te gustara. Se lo iba a dar a Liza, pero ella no le gusta ese tipo de ropa y mucho menos se vería bien con ella. Si quieres puedes ir con Andrew y lo haces sufrir más.- me dio gracia como lo dijo pero no.—Gracias, Liam. Esta tienda me encanta, pero no iré con Andrew por malo.- vi a Andrew y estaba dudoso.
—¿A que te refieres?
Me acerqué a el y pase mi mano por su entrepierna. Abrió los ojos como platos y su piel se erizo.
—Este será tu castigo por no dejar que te liberará de tu sufrimiento, ahora sufre más.- como había subido mi mano hacia su abdomen los baje y me detuve en su entrepierna, pero solo la deje dos segundos y me volteé hacia Liam.
—¿Te gustaría ir conmigo Liam? Andrew está castigado.
—Si podré ver a mi chica probándose ropa sexy, no lo dudes, claro que iré.- puso su brazo por encima de mis hombros y me acerco hacia el, lo que dejo anonadado a Andrew.
—La cuidaré bien, amigo.- me llevó con el y juntos salimos del callejón.—Te amo Andrew.- me volteé y le guiñe un ojo.
Yo también se jugar.

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"Ese Chico Raro"
Teen FictionEl pasado es el creador de cicatrices en el corazón de las persona. Tal vez se alivie el dolor, pero las marcas seguirán hay. ¿Puede una simple persona borrarlas por completo? ¿Acaso es tan poderoso el amor? Madison es una adolescente de 15 años, co...