My Bad Guys: oneshots

111- Vegeta

vegeta
Dragón Ball Super
Para MitzukiSaito

Miren esta preciosidad y lloremos juntxs

Solo cuando estuviste sola te permitiste derramar una lágrima por tu hija.
Sentada en la cama, en esa habitación solitaria de la mansion Brief, solo allí te permitiste ser débil. Fuera de la vista de Trunks, Vegeta y el resto de los terrícolas.
Trunks y tú se quedarían en ese tiempo hasta que pudieran resolver el problema de Goku black, quien los había seguido gracias al anillo que poseía pero por un tiempo limitado.
Recordaste como te enfuresiste al verlo allí, y te lanzaste directo al ataque sin siquiera pensarlo. Trunks quiso detenerte pero le fue imposible. Goku black te miro con una sonrisa burlona, y con un par de golpes te dejo noqueada en el piso. Luego de ver a Goku y Vegeta ir contra el.
Era de noche y todos habían ido a dormir en la mansión. Todos excepto una persona.
Vegeta entrenaba furioso en la cámara de gravedad. No entendía como esa copia barata de kakaroto los había derrotado tan fácilmente.
No entendía ese brote de ansiedad que sintió al verte caer inconsciente en el suelo.
Un dejo de angustia ajena recorrió su cuerpo y su mirada se dirigió directamente a la ventana, hacia la mansión. Donde seguramente _______ se encontraba.
Sacudió su cabeza aún más molesto. ¿Cómo podía ser que una mujer que apenas conocía se metiera en su cabeza de esa manera?
Había tenido una esposa, y una hija... Algo completamente impensado para el.
Trunks había sido un momento de debilidad, jamás se le había ocurrido tener otro hijo.
Con otra saiyajin.
Y así como se enteró que tenía una hija, la perdió en el mismo momento, gracias a Goku Black.
Apagó las luces de la cámara. Dispuesto a pasar la noche allí sin pisar la mansión. No podía quedarse cerca de ella. No podía permitirselo.
Sentía su aura llamándolo, tal vez era una locura, pero se sentía atraído por ella. Como si la conociera desde antes.
Sacudió su cabeza quitando esos pensamientos , se acostó en el suelo y se quedó allí solo, en la amplia cámara.
Debía admitir que la joven era atractiva. Sus cachorros tendrían buenos genes, era poderosa, con un gran carácter y un gran temperamento.
Toda una saiyajin. Tal vez alguien así podría llegar a ser reina en su planeta.
Pero ahora estaban en la tierra. Era completamente distinto.
Pronto se encontró imaginando cómo sería su vida con ella. No sabía mucho del futuro. Pero imagino despertarse todos los días al lado de una mujer así, con su hermosa cabellera negra sobre la almohada y su rostro sereno durmiendo de lado.
Se la imagino junto a él, se imagino su cuerpo, y a el recorriéndolo cada centímetro.
Debía parar ahora.
Un movimiento fuera de la cámara llamo su atención. La chica había salido al balcón de su habitación. Miro unos instantes el cielo y aumentando su ki salió volando repentinamente.
No debía importarle aquella vulgar saiyajin, no debía interesarse en sus asuntos... mierda.
Gruñó molesto consigo mismo mientras abría la puerta de la cámara de gravedad y en silencio seguía el rastro de la mujer por los cielos. No quería llamar su atención por lo que voló ocultando su ki detrás de ella.
Y así llegó a un pequeño acantilado, donde ella se encontraba sentada. Con los pies colgando al vacío.
- sigues apestando en ser sigiloso- dijo sin siquiera voltear a verlo. Vegeta no se sorprendió en lo más mínimo. Ella conocía todo de el seguramente. Y al contrario, el no conocía nada de ella.-lo siento, aún hablo como si fueras mi esposo-
-tecnicamente lo soy- se limito a decir, cruzándose de brazos, parado detrás de ella-si eres quien dices ser-
-¿Aún dudas de mi?- pregunto ella con burla-¿ O no quieres creer que soy quien digo ser?-
Vegeta no respondió. Por lo que se lo tomó como una afirmación.
-no era mi intención viajar con Trunks al pasado- volvió a hablar ella. Vegeta solo de limito a escuchar.- solo ocurrió , el me vio inconsciente, supongo que quiso ayudarme, y me trajo con el, no es un mal chico, Bulma estaría orgullosa de el-
-ella lo está- respondió el príncipe refiriéndose a la Bulma del presente- a veces pienso que...-
-lo consciente demasiado, lo sé, me lo has dicho- terminaste lo que el diría con una sonrisa burlona
A vegeta no le gustó nada. No le gustaba que pudiera leerlo tan fácilmente.
-esa mocosa, la tal Mila...-
- tu hija - le cortó la joven con tono sombrío - ya te lo dije, es tú hija- suspiro con tono cansado, había olvidado lo que era lidiar con el viejo vegeta- es muy parecida a ti de echo, algo gruñona, suele competir con Trunks por tu atención, aunque le ganó cuando empezó a salir con chicos- reiste tristemente - cuando era niña le decías que era la princesa de un planeta, ella se volvía loca cuando le contabas las historias de nuestro lugar de origen-
-yo no haría algo como eso- refunfuñó el molesto de la patética imagen de padre amoroso que le estabas pintando
- claro que no, por qué aún no conoces a Mila, ella te cambio la vida-
Dijiste para luego quedarte en silencio unos momentos- era algo... demandante-
-¿Cómo es que nos conocimos?- pregunto vegeta luego de unos minutos de silencio, solo roto por las olas que chocaban contra el Risco.
-tu hermano, vino de visita a la tierra, me encontró en un planeta y desde entonces somos amigos, viajamos juntos a muchos lugares, pero luego se casó y decidí darle espacio estableciendome aquí, sabiendo que había otros de mi especie- explicaste girandote a verlo. El simplemente asintió en silencio mientras seguía parado detrás de ti evitando verte- puedes sentarte, no muerdo-
El te fulminó con la mirada mientras reías levemente, amabas ponerlo incómodo.
-se que tienes preguntas, pero no puedo decirte más nada, ya sabes, el futuro y esa porquería- murmuraste haciendo un gesto con la mano. Restándole importancia.
- parece que las costumbres humanas se te pegaron, convirtiéndote en alguien vulgar y mal educada-
-amabas que diga groserias- le giñaste un ojo-mas que nada cuando estábamos en la cama-
-no soy el hombre del que estás hablando- respondió Vegeta mientras un pequeño rubor subía a sus mejillas
-pero lo serás... Algún día...- respondiste mirando el cielo
Vegeta se sento junto a ti unos instantes después. Y ambos se quedaron en silencio mirando el paisaje. Era de noche, las estrellas brillaban más que nunca mientras que las olas chocaban contra las piedras muchos metros bajo sus pies.
- aquí fue donde me marcaste- le dijiste, intentando no mirar sus ojos, no quería que viera la tristeza en los tuyos- aquí comenzó todo-
- volverás al futuro- ordenó más que otra cosa el saiyajin. ¿Qué pasaría si ella se quedaba? ¿Y si lo convertía en esa persona que ella tanto extrañaba de el?
-lo se-respondio simplemente enconiendose de hombros- solo quiero disfrutar el presente hasta que eso pase-