85- Credence Barebone

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Credence Barebone
Animales fantásticos y donde encontrarlos
Advertencia: (en este fic ambos son niños)
Para LaraSaiz


Credence sabía que un minuto tarde llevaría a un castigo. Fue por eso que cuando no te vio entrar por la puerta a las 8 en punto se preocupó. Madre se volvería loca al verte llegar tarde.
-ve a buscarla-fue lo único que le dijo la mujer al joven, quien asintió y salió prácticamente corriendo por la puerta del orfanato.
Camino directo a la esquina que te tocaba ese día para repartir panfletos, el día ya estaba oscureciendo y no era normal que llegaras tarde nunca.
-ya basta ¡Déjeme en paz!-gritaste al borde de las lágrimas.
-aww la rarita quiere llorar-se burlo el chico rubio que parecía líder de la pandilla. Credence maldijo por lo bajo. Te habían rodeado tres chicos y habían tirado tus panfletos por todo el callejón.
-no la molesten-siseo Credence sacando coraje de quien sabe donde. Los evadió mientras se colocaba a tu lado y tomaba tu mano mientras secabas tus lágrimas.-vamonos-
-solo son una banda de raritos que nadie quiere- agrego uno de los chicos, parecía ser de clase alta por como se vestía.- ni siquiera sus padres-
Tu cara cambio abruptamente. El tema de tus padres era algo delicado y credence lo sabía.
-¿Qué pasa niña? ¿No te gusta que hablen de tus papis?- pregunto el rubio nuevamente mientras la empujaba levemente. Credence no noto cuando el viento comenzó a levantarse llevándose con el los volantes del suelo. Tu vestido comenzó a ondearse y el cabello de credence a cruzarse en su su cara.
-¡Ya dejenla en paz!-grito molesto credence. Pero los jóvenes cambiaron su rostro a uno de asombro cuando esto ocurrió. Al principio credence pensó que fue por su grito pero luego volteo a verte.
Tenías expresión de enfado. El viento ahora era demasiado fuerte, y todo tu emanaba un aura negativa.
-¿_____?-te pregunto credence temeroso.
-¿Qué le ocurre a esta freak...?-pero el joven no pudo terminar que salió volando hacia la pared del callejon.
-¡Esta poseída!-grito otro pero los dos que quedaban salieron volando también, cayendo al suelo de manera estrepitosa.
-¡Corran!¡Corran!-grito el rubio mientras se levantaba y salía disparando lejos de ellos dos, los compañeros al instante se retiraron con el, dejándolos a ambos solos.
-eres...eres una bruja...-dijo credence en estado de shock.
-¿Qué?-preguntaste confundida, no entendias que había ocurrido-¿De que hablas?-
-¡Tu! ¡Tu eres una de ellos!-grito ahora fuera de sí, alejándose algunos pasos de ti señalandote-eres una abominacion-
Miraste tus manos incapas de creer lo que habías hecho. Luego a credence. Su expresión ahora era de miedo.
-credence...- dijiste estirando tu mano hacia el.
-no...mamá debe saberlo... ella...-
-ella va a matarme-interrumpiste entre lagrimas.
Credence observo como te quebrabas delante de él. Toda su vida creyó que las brujas y magos eran monstruos. Eso fue lo que madre les había inculcado de pequeños. Pero en ese momento tu no parecías uno.
-no me lleves con ella-lloriqueaste sorbiendo tu nariz y limpiaste con la manga de tu vestido las lágrimas de tu mejilla.
-vete- susurro credence por lo bajo. Lo miraste sin entender. Eras solo una niña.-le diré a madre que te fijaste...-
Respiraste profundamente. ¿A dónde ir? No tenías hogar. Lo único que podías llamar así era el lugar que madre les había dado.
-¡Vete ahora!-te grito Credence, quien también lloraba ahora.
Asentiste incapas de saber que hacer. Le diste una última mirada y comenzaste a correr en dirección opuesta.
Credence se quedó observándote mientras corría por las calles oscuras de la ciudad, desapareciendo a la vuelta de la esquina. Intento calmarse respirando profundo y volvió sobre sus pasos para volver al orfanato.
-¿Donde está ella?-pregunto con voz desinteresada Mary lou barebone.
Credence solo se limitó a negar con la mirada en el piso. Sabía lo que venía.
-¿Sabes lo que eso significa verdad?-pregunto ella acercándose lentamente a el. Sus pasos resonaron debido al chocar de los tacones contra el suelo-alguien debe ser castigado por esto.-
Credence asintió cabizbajo y se quitó el cinturón lentamente mientras Mary lou lo esperaba con la mano extendida.
Sintió en cada fibra de su ser los latigazos. Pero fue la primera vez que fue lo que menos le dolió en ese momento.
No volvería a ver a ______. Y eso era mucho más doloroso que cualquier herida física que pudieran hacerle.

My Bad Guys: oneshots Donde viven las historias. Descúbrelo ahora