112- zuko

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Zuko
Avatar: humo y sombra 3
Para Just-A-Dreamer-More

¿Donde estan mis bellas comentaristas?

La pelea comenzó a penas nos vimos rodeados y _______ fue directo hacia azula. La única que tenía el rostro descubierto.
_______ lanzó una patada de fuego a su contrincante pero azula era muy ágil, había recibido uno de los mejores entrenamientos (incluso podía crear rayos, cosa que ____ no podía) por lo que no le fue muy difícil esquivarlo. Azula reía como loca mientras esquivaba a su ex mejor amiga. 
-te has vuelto muy buena ______, ¿has estado ocupada volviéndote un soldado?- pregunto con una pequeña risita burlona. Jugaba contigo.
-¡Deja de parlotear! ¿Donde están los niños?-grito la joven deteniéndose a unos metros de ella.
-¡Pero que son esos modales!- fingió estar ofendida, lanzando un rayo que esquivaste  por muy poco- ¿De esa manera saludas a una vieja amiga? De todos modos debería agradecerte, gracias a ti se me ocurrió esta maravillosa idea-
-¿De qué hablas?- preguntaste confundida. Agitada por su anterior ataque.
-¿Recuerdas una de nuestras primeras pijamadas? Fue en tu casa, tu madre había preparado mochi....-
-si, era para el cumpleaños de mi abuela, tu me obligaste a robarlo- le lanzaste un puñetazo al rostro furiosa. Habías recibido la tunda de tu vida por ello.
-oh me das demacido crédito por ello-sonrio cinicamente deteniendo tu puño- pero en fin, esa noche tú y mai no podian parar de murmurar en sueños, a pesar de no haber probado un bocado por la culpa que sentían, tenían por los Kemurikage, unos espíritus nacidos del miedo, la ira y la venganza-te dio un rodillazo en el estómago y caiste al suelo - ¿Muy de mi estilo no crees?-
-¡ya cállate!-gritaste enfurecida. Con tus pies giraste en el suelo y la hiciste caer, pero te dio un puñetazo al rostro alejándote de ella.
No te detuviste, el combate era reñido. De reojo pudiste ver a los demás algo alejados, aang y zuko peleando espalda con espalda contra cuatro espíritus y al novio de Mai tacleando a uno que se acercaba a la chica.
- mis nuevas amigas y yo tomamos de inspiración tu pesadilla, aunque debo admitir que ahora eres más fría y calculadora, tu padre hizo bien al meterte en el ejército- barriste el piso con tu pie lanzándole fuego pero ella lo salto sin problemas, lanzaste tres patadas de fuego seguidas y luego una llamarada de tus manos, pero está choco contra una que ella creo de barrera-¿Qué dices? No es mala interpretación ¿Verdad?- una risa escalofriante se escapó de sus labios. Logró golpear tu nariz y tirarte al suelo, pero Zuko se había desecho de sus contrincantes y llego junto a ti.
-¡Déjala en paz!- grito furioso. Era irónico. Tu trabajo era protegerlo pero los papeles se invertían.
-¡zuzu! ¿ Vienes a recuperar a tu amor de la infancia?- pregunto tomandote de la chaqueta acercándote a ella- ¿Que pasa? ¿Mai no es suficiente para ti? ¿De dejo por otro?- fingió un puchero señalando a Kei Lo- realmente esto es muy patético, pero siempre fuiste muy sentimental, muy...lloron-
Aprovechaste su monólogo para clavar tu codo en su brazo, logrando soltarte. Ella creo una llamarada azul en su mano pero Zuko lanzó una igual, logrando una explosión que levanto humo por todo el lugar.
-¡Azula! ¡Alto!- grito el señor del fuego persiguiendo a su hermana la cual corría lejos de allí. Pasó junto a ______ quien se levantó al instante siguiéndole el paso.

Mientras tanto Aang se deshacía de los "kemurikage" que lo rodeaban. Lanzó una patada mandando una gran ventisca a uno de ellos y una esfera de viento hacia otro, quedando libre por completo
Dos más de aproximaron detrás de él pero logró cubrirse con una pared de piedra, dejándolos atontados.
Miró hacia todos lados.
-¿_____? - pregunto confundido al caerse solo-¿Zuko? ¿Mai?- pudo ver a la joven a lo lejos junto a Kei lo.
Un sonido lo alarmó al instante. Un grito de ayuda provenía de una de las catacumbas. Se acercó a ella y con su tierra control arrancó lo que parecía ser una compuerta, dejando a la vista a un hombre de la nación del fuego con una gran cantidad de niños siendo acechados por dos Kemurikage.
-¡Miren! ¡Es el avatar!-grito uno de los niños alertando a los espíritus quienes se giraron hacia el-
-¡Niños! Los busque por todos lados-respiro con alivio. Luego se enfocó en los dos que lo amenazaban.
Látigos de fuego salían de sus manos. El avatar salto los escalones del pasadizo que los separaban y arremetió contra ellos. Una gran cantidad de humo se formó metiéndose en su nariz. Dejándolo algo atontado.
-¡Plumas de mono!- maldijo el agatar- tome el aire equivocado-
-que tal, tal parece que un poco de humo bastaba para deshacerse del avatar- se burló uno de los kemurikage cuando Aang cayó al suelo luego de una patada. Pero instante Mai y su novio arremetieron contra ellos. Ayudando al avatar a levantarse.
-¿ encuentras bien? - dijo Mai
-si estoy bien- sonrió el agradecido.
Al instante Mai sintió a alguien gritar su nombre. Y su vista se dirigió finalmente a su pequeño hermano Tom- Tom quien corría hacia ella. Finalmente lo había encontrado.

-¡Azula espera!- gritaste corriendo tras ella. Pero no esperaste que se girara creando uno de sus rayos-¡No!- gritaste pero ya era tarde. Sentiste el impacto eléctrico en todo tu cuerpo dejándote paralizada y sin respiracion. Caiste al instante al suelo sintiendo el ardor de la quemadura en tu estómago, tus extremidades agarrotadas y tú cabeza pulsante.
-¡Es una pena _____! ¡Podríamos haber sido amigas nuevamente!-grito mientras se adentraba en una de las criptas del cementerio.
-¡______!- grito Zuko llegando junto a ti. Resbalando en el suelo por haber frenado de golpe.
-¡Estoy bien!- gruñiste con dificultad-¡corre! ¡Atrápala!- le dijiste nuevamente.
Zuko dio dos pasos hacia atrás aún no convencido pero luego echo a correr tras su hermana. Esto debía terminar.
Miraste tu estómago con algo de temor. Una Enorme quemadura había atravesado tu uniforme de general. Aún salia humo de ella. Podías ver la piel chamuscada y derretida en algunos lugares. Tu cabeza dio vueltas y sentiste que te ibas a desmayar.

-¡Azula!-grito Zuko adentrándose en la cripta.
-hola zuzu, ¿sabes de quién es esta cripta?-pregunto azula sentada en una de las tumbas del lugar-era del consejero más confiable del primer señor del fuego, lujosa ¿Verdad?-
-pareces... Pareces estar mejor- titubeó Zuko al verla. Su hermana había estado encerrada en un manicomio y ahora estaba frente a él. Parecía cuerda, o al menos más cuerda que la última vez.
-no solo mejor...¡Más fuerte!- grito lanzadose contra su hermano. Ambos chocaron sus antebrazos lanzando llamas con sus puños. Azula lo empujó de una patada en el pecho, tirándolo al suelo, parándose sobre el -yo parada sobre ti...¿Por que es tan familiar?- pregunto para si misma-¡Oh ya se! ¡Porque así lo fue siempre!-
-¡Matarme no te devolverá el trono! ¡Aceptalo! ¡Jamás lo tendrás!-
-¡Pero si ya me hice la idea!- dijo ella sorprendiendolo-¡No tendré el trono! ¡no es mi destino!- lo amenazó con llamas cerca de su rostro-¡Una vez que lo descubrí, esa voz en mi cabeza se detuvo! Ahora me siento más liviana- lo soltó distrayendo se con sus palabras, o tal vez eso quería que creyera- libre tal vez, por primera vez en toda mi vida-
- eso es genial azula...- su hermana definitivamente estaba loca
-¡Mi destino es lograr que te conviertas en el señor del fuego que trate de ser... Que gobierne a través del miedo...-
-¡zuzu!- escucho Zuko que su pequeña hermana lo llamaba desde afuera
-los amigos encontraron a los niños ¡Ganamos!- celebró el señor del fuego mirando a su hermana
-te equivocas zuzu, estas últimas veinticuatro horas eh demostrado que tan despiadado puedes ser- dijo ella con un dejé de locura tomandolo por el cuello de su capa-eres uno de nosotros, tarde o temprano te convertirás en alguien como yo...- visiones de lo que sucedió las últimas horas llegaron a Zuko, la manera en la que dio órdenes a su soldados, su pelea con Aang, la manera en la que trato a ____...-y entonces, en cierto sentido, seré yo nuevamente el señor del fuego-
-¡No! ¡Te equivocas!- una gran humadera comenzó a rodearlos.
-sigue tu propio consejo zuzu, acepta quien eres- dijo la voz de su hermana desde algún lugar. Para luego desaparecer por completo.

Gemiste de dolor cuando Aang intento levantar un poco tu uniforme para observar mejor la herida. El había llegado rápidamente separandose del grupo cuando observo que estabas en el suelo sin poder moverte, haciendo que Mai , su novio y el anciano (quien descubrió que era el padre de Mai, quien había  ayudado a azula pero recapacitado a  último momento) detuvieran a los niños lejos de ustedes.
-¡Zuzu!- oíste el grito de Kiyi escapando del grupo hacia los brazos de su hermano.
-Kiyi no sabes lo preocupado que estuve por ti- suspiro de alivio al abrazarla.
-¡Yo no lo estuve! ¡Sabía que vendrias- por nosotros!- chillo la niña abrazando su cuello.
Gemiste nuevamente, está vez soltando un pequeño grito de dolor.
-¡Lo siento!- soltó Aang preocupado. Al parecer era peor de lo que creías.
-ve con los niños Kiyi- murmuró Zuko en su oído haciendo que la niña corriera hacia el grupo. En cambio el avanzó a pasos rápidos hacia el avatar.
Su gesto se torció al verte.
-¿Tan mal está?-peguntaste queriendo ver nuevamente. Pero eso implicó hacer fuerza con tu estómago lo que Zuko impidió con una mano en tu hombro.
-no lo hagas-te pidio con voz calmada-Aang corre al castillo, necesito que avises a Katara, que venga lo antes posible- el avatar asintió mientras tomaba su planeador de la espalda y corría unos metros para salir volando del cementerio-tranquila todo estará bien- murmuró Zuko para ti. Sentia la mirada de alguien sobre el, pero ahora eso no importaba, tu frente sudaba, tu cuerpo temblaba de dolor...
-¿Mi sobrino...?-no pudiste terminar la frase.
-el está bien, gracias a ti- te consoló el chico. Luego se quitó su capa que solo los señores del fuego llevan y la colocó sobre  ti, era enorme por lo que te cubría  completamente- descansa soldado, yo me encargo de aquí en  adelante- sonrió a medias queriendo hacerla reír. Pero solo una pequeña sonrisa salió de tu rostro y todo se volvió negro.

My Bad Guys: oneshots Donde viven las historias. Descúbrelo ahora