My Bad Guys: oneshots

37- Zuko

Zuko / nación del fuego
Avatar La leyenda de Aang
Advertencia: ninguna. Últimamente estoy encandilada con este personaje, no se porque pero me gusta mucho.

•-lo único bueno de esta obra es el entretiempo-dijo Zuko en La escalera el palco mientras esperaban que empiece el segundo acto.
Katara se encontraba sentada en lo alto de la escalera, mientras que Tod y Ang estaban parados frente a esta, y Suki junto a sokka estaban comiendo carne seca.
-Definitivamente ¡yo no soy mujer!-Grito Ang bastante enfadado
-es todo ficción, solo diviertanse- interrumpio katara- yo no lloro todo el tiempo ni aprovecho cualquier momento para dar discursos sobre La esperanza-todos volteando a verla con una ceja enarcada-¿¡que!?-
-Ya, y por supuesto Zuko y yo no estamos juntos-dijiste intentado sonar indiferente, Zuko volteo a verte disimuladmente-esta obra es estúpida -te cruzaste de brazos y saliste del lugar hacia el balcón, a tomar un poco de aire.
-Pues ¡yo creo que los personajes están muy bien interpretados!-Grito Toph con gracia, todos la fulminaron con la mirada.
-¿que le ocurre a ____?-Pregunto sokka cuando notó tú ausencia
-Yo iré con Ella-respondio Katara levantándose de su lugar y siguiendo tú camino-los vemos adentro-
Te encontrabas apoyada en el barandal del balcón, jugabas con una esfera de fuego control entre tus dedos, tú ceño estaba ligeramente fruncido y tú rostro serío.
-no hagas caso a la obra ___- te dijo Katara al salir
-No me molesta la obra- respondiste con frialdad, fulminandole con la mirada.
-¿crees que no me doy cuenta de tus sentimientos por Zuko?-Pregunto con una pequeña sonrisa, queriendo animarte.
-No sé de qué hablas-respondiste sorprendida de que se haya dado cuenta. Eras una persona fría, no mostrabas sentimientos facilmente, ¿como lo descubrió?
-Angg me gusta, nos besamos anteriormente-confeso ella- pero no estoy segura de esto, estamos en plena guerra-
-¿y crees que yo siento algo con Zuko pero me siento insegura de ello?- preguntaste con burla rompiendo sus sentimientos, ella se había abierto a ti y tú destrozaste su confianza.
-Katara-llamo alguien desde la puerta, Zuko se encontraba ahí algo incómodo, rascándose la nuca mientras evitaba tú mirada-Angg quería hablar contigo-mintio para dejarlos a solas.
Katara asintió y te miro con desepcion mientras se retiraba del lugar y tú le dabas la espalda nuevamente, mirando el cielo lleno de estrellas.
-¿no deberías estar en la obra?-preguntaste cuando no sentiste la presencia de Zuko irse
-Aun no empieza, creí que querías algo de compañia- dijo el acercándose un poco, algo inquieto.
-Solo salí a tomar aire ¿porque todo el mundo se preocupa por mí ahora?-Gruñiste molesta con el, molesta con todo el mundo, esa obra te había hecho sentir estúpida. Te giraste rápidamente para salir del lugar pero Zuko te detuvo del brazo.
-Siempre nos preocupaste _____- respondió el algo triste-y bueno...Yo...Esa obra...-
-No tienes nada que decir Zuko-dijiste completamente en calma, era hora de el segundo acto y solo querías lárgarte de ahi-solo es una estúpida obra mal hecha-
Te soltaste de su agarre e intentaste huir de la incómoda situación, ambos eran grandes, sabías que el estaba enterado de lo que sentías, y fingir que no había ocurrido nada era lo mejor en ese momento.
-Me hubiera gustado que no lo sea-dijo por lo bajo detrás de ti luego de que hicieras unos pasos, por lo que te detuviste completamente.
Un pequeño rubor corrió con tus mejillas cuando entendiste la indirecta.
-es lo que quería decirte...Bueno ¡rayos!...No soy bueno con estas cosas-se explicó algo enojado-yo...me gustaría...salir contigo, digo, cuando todo esto termine ¡solo si tú quieres, claro!-
Te quedaste quieta, dándole la espalda, sin poder creer lo que oías.
¿Zuko estaba pidiéndote una cita?
-¿y bien?-Pregunto luego de unos segundos de silencio.
Te giraste para verlo intentando no gritar como niña. Lo miraste unos segundos, a pesar de su cicatriz Zuko era un chico muy guapo, pero no era eso lo que te llamaba de el.
Ambos eran fugitivos de la nación del fuego, traidores. Azula pedía un gran precio por su amiga traidora, habías quebrado la confianza de la princesa al saber lo que planeaba contra su hermano, y por ello habías pagado un alto precio.
Y ahora ambos estaban aquí, solos, dos maestros fuego excluidos de su sociedad, y sin embargo Zuko se mantenía fuerte, enseñaba al Avatar fuego control e incluso disfrutaba de pasar tiempo con sus amigos aunque no quiera admitirlo. En verdad lo admirabas.
-Creo que deberíamos volver a la obra-respondiste cambiando radicalmente de tema. Zuko frunció el ceño mirando sus manos, algo desilusionado y triste, sin saber que había hecho mal contigo. Te acercaste a él y tomaste su mano con la tuya cariñosamente. Te costaba demostrar tus sentimientos, asique solo seguiste lo que tú corazón sentia- deberíamos ver cómo termino- le regalaste una sonrisa tímida a lo que él sonrió levemente en respuesta, afirmando tú mano con la suya comprendiendo tú gesto.
-Si vamos, quiero ver cómo termina eso-respondio más animado, y corrió a dentro arrastrándote con el.
Porque a pesar de la guerra aún había momentos que podías disfrutar. Como esa estúpida obra.