Junto A Ti (Jack Frost X Tu)

Capítulo 21: Lo Destruiste Todo 2/? Maratón!!

Tomé aire y miré a mi alrededor. Todos ya se habían comenzado a disipar por el Gran Salón, lo suficientemente lejos como para no oír nuestra conversación. Jack me sigue mirando con el ceño fruncido y la mirada expectante a mis movimientos.

Un nudo en mi garganta se me formó al pensar en Ademir. Su plan no funcionó, no lo culpo ni nada por el estilo, pero ahora tengo que hacer esto sólo para salvarlos. Qué irónico, lastimarlo para salvarlo. Con los ojos ya cristalizados y mis palabras mentalizadas miré a Jack y dije:

—No, no está bien—pude notar la brusquedad en mi propia voz—acabo de perder a mi mejor amigo ¿y quieres que me sienta bien?

—Lo siento, sólo intentaba ser amable...

—No—rugí, había llegado el momento—de no haberte conocido nada de esto habría pasado. Hubiera preferido seguir en mi vida aburrida pero tenías que entrometerte en lo que no te incumbe, como siempre, ni siquiera debiste aparecer ese día mientras jugaba con los niños. De no ser por ti ahora mismo sería un espíritu y podría seguir desinteresándome cualquiera de los Guardianes. Arruinaste mi vida—mentí—Lo destruiste todo...

Sus ojos ya se habían empezado a cristalizar antes de que pudiera terminar lo que decía, tragar saliva me dolía por el nudo gigante que abarcaba toda mi garganta al verlo así. Lo había lastimado, lo estaba alejando de mí y él no sabía que lo hacía por su bien... Me sentía terrible, no es gratificante lastimar a la persona que más amas en el universo y aún así yo lo estaba haciendo...

Jack dejó caer una lágrima que se congeló al tocar su piel fría, que antes para mí era un hogar. Me miró con el labio inferior tembloroso y dijo:

—¿Crees que no me repito eso desde que te conozco?—entrecerró los ojos—sé que hubieras estado mejor y te hubiera ido mejor sin mí pero ¿ese es el problema, no? Nunca fui suficiente para ti...

—... No... No lo fuiste...

Pegó un salto y salió volando por la ventana de donde se veía la luna en su máximo esplendor. Fue en ese momento que me permití llorar; cubrí mi boca con ambas manos para silenciar mis sollozos. Las lágrimas empezaron a quemarme las manos y a dejarme marcas en ellas pero eso no me importaba, volé hacia mi habitación con el cayado en una de mis manos sangrantes y cerré la puerte de un azote. Me deslicé hasta el suelo y dejé caer mi cayado.

Permití que las lágrimas quemaran mi piel hasta que ambas manos estuvieron cubiertas de sangre y los dedos se me entumecieron. Eso era lo que merecía por ser una idiota...

—Bueno, bueno—rieron—esperaba algo más, pero eso sí que fue un espectáculo de primera.

Alex azotó su bastón en el suelo y se inclinó hasta quedar a mi altura, me miró a los ojos con expresión divertida y acarició una de mis manos. De golpe la tomó y la apretó, me retorcía de dolor en mi lugar mientras ahogaba un grito y le rogaba con la mirada que me soltara pero apretaba más como si fuerza le sobrase.

—Eres buena chica,___, puedes decirle ahora lo que quieras—sonrió de lado—yo he cumplido con parte de mi plan y tú me has ayudado así que te devolveré el favor dejando que le digas la verdad. Sin embargo sólo se lo podrás decir a él y nadie más.

Asentí en cuanto apretó más mi mano para obligarme a responder, alargando más mi agonía.

Se dispersó en una nube de humo y escapó por mi ventana, cubrí mis manos sangrantes con vendas y fui a buscar a Jack rogando por que estuviera cerca de aquí todavía. Al darme la vuelta pude notar una figura verde que aterrizaba sobre la cúpula de madera y a su lado noté una figura azul haciéndose un ovillo.
Hada abrazó a Jack mientras yo me ocultaba detrás de la punta que estaba en el centro del techo. Poco a poco pude empezar a escuchar su conversación...