» Just a Fan •• Min YoonGi & Tú «

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–Así que me viste entrar con una chica ¿eh?

–No estoy jugando Yoon, respóndeme... ¿Acaso estás saliendo con ella? –preguntaste impasible.

–No exactamente, solo hoy fuimos a dar una vuelta. Encima, es una prima de Jimin, no veo a qué vienen tus horribles celos.

–No estoy celosa

–¿Ah no? ¿Y entonces por qué estás reclamándome? Tengo derecho a salir con alguien más, tú y yo no somos nada.

–Dime que estás jugando... –tallaste tus ojos ante las ganas de llorar –Ayer me robaste lo más preciado que tenía en la vida sólo para que no saliera con Taehyung y ¿me vienes con esto? Ojalá supiera que tanta porquería tienes en la cabeza. Me utilizaste.

–No me vengas con estupideces, yo no te obligue a nada _____.

–¿Sabes qué? Me voy.

–¿No vas a despedirte de mí?

–Eres un maldito cínico.

Saliste de ahí dando un gran portazo y dejando a Yoongi sintiéndose culpable.

Cuando llegaste a tu casa subiste directo a tu cuarto, te lanzaste a la cama y te soltaste a llorar... ahogando tu cara entre las almohadas.
Te cuestionabas el como era posible que existiera alguien tan insensible como el, al menos esa era la actitud que te había mostrado ese día y algunos anteriores.
Realmente se había ganado tu odio por un buen rato, pero eso no quitaba que aún sintieras ese amor que siempre le habías tenido.

Yoongi
Yo en verdad lo siento, sabes que no quise decir esas cosas. Me comporté como niño pequeño y tienes razón en estar enojada.
Siento que no te hayas despedido de mí, te veré en unos meses, si es que tú quieres también. Recuerda que eres muy valiosa en todos los aspectos. Te quiero demasiado💛

¿Por qué tenía que ser así de difícil?

•••••

Había pasado un mes desde que Bangtan tuvo que seguir con su tour, hablabas unas cuantas veces con Min pero siempre habías sido muy cortante.
Solo se preguntaban como estaban y era todo.
Tenías que admitir que lo extrañabas, solo conviviste con el una semana pero sentiste que fueron meses y ambos se tomaron un cariño muy grande, como el de amigos que se conocen desde la infancia.
Ibas a la escuela desganada pero actuabas muy bien y nadie sospechaba de tu enorme tristeza, ni siquiera tu madre ni Katheryne.
La única que sabía tu situación era tu hermana. El día que llegaste llorando a mares, ella estuvo ahí para ti, e incluso días después, consolándote cada que lo necesitabas.
Acudías de vez en cuando a algunos antros para ahogar tus penas en el alcohol. Sofía siempre iba contigo para asegurarse que no te pasará algo malo y para ayudarte a llegar a tu cuarto sin que mamá te viera en ese estado.
Sonaba un tanto exagerado pero la partida de Yoongi y su insoportable actitud habían dejado tu corazón en ruinas.

Era sábado por la tarde y estabas con tu hermana viendo una película en casa. Tu mamá había salido como la mayoría de las veces.

–Hey _____, es aburrido ver películas sin palomitas. ¿Quieres que te traiga unas en especial?

–No Sofía, no me siento bien, gracias.

La película transcurría normal y a mitad de ella te levantaste para ir al baño. El calor que sentías era insoportable y tu vista se iba nublando a medida que avanzabas, hasta que todo se volvió negro y no supiste más.