My Sweet Cake (PAUSADA)

Capitulo 4

NICK

Conduje en silencio mientras los chicos hablaban sin parar sobre que iban a pedir o si alguna de las porristas se había lanzado contra ellos.

Tuve que evitar resoplar cuando Douglas presumió que estuvo detrás de las gradas con una de ellas, y cuando Mark se burló de él diciendo que él había rechazado a esa chica y que se llevo las sobras.

Miré por el retrovisor a Jimmy que sonreía cada vez que Douglas intentaba golpear a Mark desde delante; unas pocas veces le había visto mirarme por el espejo pero solo eran unos pocos segundos antes de que Mark llamará su atención sobre algún tema absurdo, lo que me dio ventaja para mirarle a cada momento que podía.

Parando en un semáforo vi sus ojos marrones tan claros como la miel, en un paso de peatones me fije que su cabello era lo bastante largo para meter los dedos pero no lo suficiente como para necesitar un corte de cabello, su cabello era castaño, en otra pausa tuve tiempo para ver pequeñas pecas que quedaban debajo de sus ojos, haciendo que luciera mucho más pequeño que Mark.

En otro parada que hice para que una madre y su hija pasaran, pude ver como arrugaba su pequeña nariz en disgusto sobre algo, y como se movía a cada palabra que decía, me recordaba a un pequeño ratón asustadizo; aparte la mirada cuando alguien detrás de nosotros pito para que siguiera.

En poco tiempo estábamos en el aparcamiento de una cadena de alimentación rápida, todos bajamos, y fuimos directos para pedir, había poca gente para recoger la comida pero la mayoría de las mesas estaban ocupadas.

- ¿Por qué no van a buscar una mesa?- propuso Douglas a Mark y Jimmy, ambos asintieron y salieron fuera en busca de un lugar algo apartado que tuviera algo de sombra.

- ¿Qué van a tomar?- preguntó la joven cajera mientras masticaba su chicle con la boca abierta.

- Cuatro hamburguesas, dos de patatas fritas y un refresco grande.- dijo Douglas.

- Para mí, seis hamburguesas...- la cajera se quedo boca abierta y Douglas igual- Dos refrescos grandes y dos de patatas.- asintió mientras apuntaba nuestra orden- Pon tres hamburguesas más, y otro refresco.

- Tardará un poco.- dijo la chica sin dejar de mirarme, seguramente pensando cómo me iba a comer todo eso yo solo.

- Está bien.- nos movimos a un lado para que la cola siguiera.

- ¿Nueve hamburguesas?- preguntó Douglas- ¿Quién va a comer tanto?- preguntó asombrado.

- No sé cuanto come Jimmy, creo que tres estará bien.- me encogí de hombros mirando los cristales intentando ver donde estaba Mark.

- Ajam...- murmuró Douglas divertido, antes de mirar la cola de gente.

- ¿Qué quiere decir ese "ajam"?- gruñí molesto, mi hermano levantó las manos.

- No dije nada, como estas, hombre.- me miró de reojo, iba a mandarle a la mierda pero la cajera nos llamó para recoger nuestro pedido.

Después de equilibrar las dos bandejas y las otras dos de Douglas salimos fuera y rápidamente localizamos a Mark y Jimmy mientras se reían, uno frente al otro.

Me apresuré hacia ellos, su conversación se corto cuando llegamos y dejábamos las bandejas en la mesa, me deslicé en el banco junto a Jimmy mientras Mark silbaba al ver tanta comida.

- ¿Alguien más se está apuntando a comer con nosotros?- preguntó divertido mientras intentaba dejar más sitio al gran cuerpo de Douglas.

- Es por si nos quedamos con hambre.- murmuró Douglas mientras agarraba una hamburguesa y su refresco, dio un mordico tan grande que se llevó media hamburguesa- Mierda, están buenas.- dijo masticando y bebiendo.

Mark hizo una mueca de asco al ver comer a nuestro hermano y no pude evitar reír mientras cogía dos hamburguesas y se las dejaba delante de Jimmy, sin mirarle agarré su bebida y la mía, y después una hamburguesa para mí.

- No tengo...- comenzó a decir.

- Hambre, si, lo sabemos.- dijo Douglas absorbiendo de su pajita.

- ¿Entonces?- preguntó mirando la comida frente a él.

- Por si cambias de idea.- le miré unos segundos y sus ojos se iluminaron de manera extraña, me removí incómodo y agarré mis patatas.

No dijo nada en cambio agachó su cabeza y agarró la hamburguesa antes de darle un mordico y cerrar los ojos, juró que escuche que gemía en voz baja cada vez que daba un bocado.

¿Esta era alguna tortura que me había mandado algún antepasado de alguien por ser tan capullo o algo así?

En quince minutos todas las hamburguesas habían sido devoradas y los envases tirados a la papelera más cerca, Mark abrió su boca y un eructo más grande que él resonó a nuestro alrededor.

- Mierda, eso sí que ha estado bien.- dijo palmeando su barriga.

- Dejas de tener encanto cada vez que haces cosas como esas.- dijo enfadado Douglas.

Estaba tan molesto como Douglas pero la suave risa de Jimmy hizo que relajara mi rostro y lo mirara, juró que luche contra una sonrisa mientras miraba sus hombros subir y bajar cuando él mismo intentaba aguantar la suya.

Antes de darnos cuenta los cuatro nos estamos riendo tan fuerte, que todo el mundo a nuestro alrededor nos miró durante unos segundos, y lo mejor de todo es que no nos importaba una mierda.