—¿Es en serio lo que estás diciéndome, Cara?
—Por supuesto que es en serio, Kea. ¿Por qué crees que estaría mintiéndote sobre eso? ¿Qué ganaría? Absolutamente nada —musito, con un sabor amargo en la boca—. Adam se acostó con esa chica, nadie me lo contó, yo misma vi con mis propios ojos como se la tiraba en su habitación. Es un cínico desgraciado —escupo molesta, dejando de lado; sobre mi cama, la libreta donde estoy anotando todo lo que necesito para que Kea tenga una boda muy bonita e inolvidable. Le ofrecí mi ayuda y ella aceptó encantada que le diera una mano con los preparativos, y yo estoy haciéndolo con mucho gusto. Es mi hermana del alma.
—No lo puedo creer —Kea suspira sentada a mi lado.
Ni yo menos.
—Elena es una pequeña zorra. —Miro a Kea a mi lado—. Prácticamente se le ofreció a Adam anoche. ¿Sabes que le dijo y lo oí? Que iba a complacerlo ya que yo como su esposa no lo hago... Pero claro, el animal que tengo como esposo no lo dudó ni un segundo y aceptó gustoso follar con ella bajo mi mismo techo y traicionar nuestro matrimonio, algo que yo no he hecho y en mis propias narices para colmo. Es un sinvergüenza.
Meto los pies bajo el cuerpo para sentirme más cómoda.
—Pareces muy molesta porque tu marido se haya acostado con otra mujer. —Me mira con una sonrisilla mientras coloca las dos manos a cada lado de sus mejillas. Eleva y baja sus cejas repetitivamente y claramente pude leer en sus ojos su siguiente pregunta—. No me digas qué realmente estás celosa de Adam teniendo sexo con otra, ¿ah?
Me levanto de bruces de la cama, clavando mis ojos verdes en ella mientras me cruzo de brazos.
¿Yo celosa de ese? Pero ni en mil años. Me aclaro la garganta para hablar suave:
—Estas diciendo cualquier estupidez —acoto—. ¿Por qué razón yo estaría celosa de ese animal? Adam es nada para mí, es basura. No me mueve ni un solo pelo y lo aborrezco con cada fibra de mi ser, por mí puede acostarse con todas las mujeres del pueblo y me da totalmente lo mismo. —Alzo una mano cuando intenta hablar para terminar con mi punto. Cierra la boca—. Lo que claramente me molesta sobre lo que sucedió anoche es la falta de respeto hacia mi casa y el cinismo de los dos. Solo eso y nada más.
Ella suspira profundo ante mis palabras y yo me descubro haciendo lo mismo. Yo no puedo tener celos de ese, ¿o sí? No, claro que no.
—A ver, Cara —Kea se pone de pie acercándose a mí, me mira muy seria—. Cuando tú tenías catorce años estabas locamente enamorada de Adam. Tu mundo se detenía solo con verlo y fui testigo de las veces que lo mirabas fascinada desde las sombras y enamorada de él hasta las patas. Tus ojos adquirían un destello de luz impresionante cuando le veías... Yo como tu mejor amiga y confidente puedo recordar todas las veces que me contabas ilusionada lo bonito que eran tus sentimientos por él. Las ganas que tenías de que él te notara.
Hace una pausa, yo continúo en silencio.
—Es verdad que él te lastimó de la peor manera, fue un desgraciado y no tenía el derecho de humillarte como lo hizo. Pero, contéstame esta pregunta que llevo mucho tiempo queriendo hacerte desde que volviste. Y sé sincera conmigo por favor. —Me mira muy fijo con sus ojos cafés—. ¿De verdad, aunque sea en el fondo de tu corazón no queda ni un poquito del amor que alguna vez sentiste por el que ahora es tu marido, ni una migaja?
Las palabras de Kea se meten muy dentro de mí, destapando todo lo que llevo escondido durante muchos años. Muerdo mi labio inferior con fuerza.
Sí, claramente ya lo dije antes, a mis casi quince años yo estaba estúpidamente enamorada de Adam. Lo veía caminar con ese aire de chulo irresistible al que ninguna chica se podía resistir por el patio de la escuela y mi pobre corazón de niña enamorada se aceleraba a tal extremo que luchaba por desprenderse de mi cuerpo.
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Por una promesa © DISPONIBLE FÍSICO Y DIGITAL, AMAZON
RomanceCompleta/ Por tiempo limitado LIBRO 1 DE LA SERIE «AMORES INEVITABLES» Por una promesa es una historia de amor, pero también es de odios y rencores del pasado, una historia donde el odio juega un papel fundamental, y solo una fuerza mayor y superior...