Cara
Ser una mujer casada con el hombre que alguna vez me había lastimado de la manera más dolorosa que se puede imaginar lleva meses ahogándome. Respirar el mismo aire que él era como veneno para mi sangre. Me enfermaba a tal punto que mi espíritu parecía habitar fuera de mi cuerpo. Peleas y gritos era lo único que habíamos tenido, pues no podíamos tener otra cosa. Extrañamente, y eso ya se sabe, sentía que revelarme contra él, que lastimarle con mis insultos me hacía sentir mejor.
Pero, ¿a quién quería engañar?, nada me hacía sentir de otra forma que no fuera como una muerta en vida, hasta esta noche.
Soy una mujer herida, con demasiadas grietas abiertas en mi corazón. Muchas de ellas causadas por el hombre que, elegido o no, ahora es mi marido. El mismo hombre que me pide entre besos y caricias, susurros y palabras románticas que me deje llevar, que derribe todas mis barreras y lo deje curar esas heridas con su amor.
¿Puede él realmente hacerlo?
Adam me ha hecho sentir cosas que en mi vida imaginé que llegaría a sentir, y muchísimo menos tan fuertes y... buenas. Fueron más que los toques o los besos, pulsando las teclas necesarias para hacerme vibrar, fue la ternura, la devoción, esas de ganas ver mi felicidad mucho más allá de la suya, eso fue lo que me llevó a sentir ese cúmulo de emociones tan placenteras para mí. En sus manos mi corazón pareció recobrar vida entre sus brazos y después de años de haberme sentido como muerta mi cuerpo se llenó de energía, de luz, de ganas de vivir con...él.
Y no puedo dejar de desear más de él.
Comprendí que mi felicidad depende única y exclusivamente de mí, me la están ofreciendo y quiero abrir mi corazón, soltar todo aquello que lo lastima y aferrarme a esa felicidad que él me ofrece con todas mis garras... Que me la de Adam, no lo esperé, pero me voy a permitir disfrutar de ella. Sí, sé que en más de una ocasión dije que jamás lo dejaría poner sus manos sobre mi cuerpo, pero esta noche descubrí que las palabras se las lleva el viento desde el mismo preciso instante en que salen de nuestras bocas.
— ¡Adam! —En el preciso momento que menciono su nombre la oscuridad que nos envolvía se disipa, siendo alumbrados por una luz amarillenta.
Ya no estoy sobre la encimera ni él entre mis piernas. Tengo mi jersey puesto y en este momento nos encontramos sentados sobre el piso de la cocina, y yo sin ninguna resistencia me encuentro sentada entre sus piernas abiertas. Estoy encarcelada en su calor mientras sus brazos me rodean las caderas teniendo mi espalda muy pegadita de su pecho y él con su cabeza presionada contra mi hombro, que despega en cuanto siente la caridad.
En esa misma posición llevábamos un buen rato sin mediar palabras, cada uno en su mundo y con nuestros cuerpos enfriándose luego del incendio que se había desatado hace unos minutos atrás. No llegamos a nada más. Todo acabó en el momento que me dio ese orgasmo devastador.
—Ya llegó la luz. Sabía que no tardaría mucho. —Suspira y siento un agarre más firme de sus manos contra mi estómago, inhala el olor de mi pelo enterrando su nariz entre ellos y agregó—: Lo malo es que se romperá la magia. Ahora seguirás siendo esa fierecilla indomable que me grita que no la toque y saldrás huyendo de mí, como... siempre.
Puedo sentir como las palabras duelen en sus labios.
Realmente si la luz no se hubiese marchado posiblemente ahora estaría en mi cama dormida o quizás seguiría desvelada, dando vueltas de un lugar a otro. Sin embargo, sobre ese colchón me seguiría sintiendo igual de vacía, rota y mañana seguro iba a despertarme con el mismo pensamiento en mi cabeza: «Estoy vacía y sin emociones por dentro». Seguiría creyendo lo que tantas veces me gritó mi ex novio en la cara haciéndome sentir inservible como mujer, que era fría, un témpano de hielo incapaz de sentir. Pero con lo poco que mi marido me hizo esta noche me demostró que más que fría, soy un infierno en llamas. Con sus besos. Caricias. Susurros. Con cada toque y su devoción, Adam incendió cada fibra viva de mi cuerpo.
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Por una promesa © DISPONIBLE FÍSICO Y DIGITAL, AMAZON
RomanceCompleta/ Por tiempo limitado LIBRO 1 DE LA SERIE «AMORES INEVITABLES» Por una promesa es una historia de amor, pero también es de odios y rencores del pasado, una historia donde el odio juega un papel fundamental, y solo una fuerza mayor y superior...