No Promises • jb

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"I got these feelings but you never mind that shit"

Terminé de ponerme la sudadera y fui hacia el escritorio para coger el móvil. Sentándome en el sofá al lado de mi madre le mandé un mensaje a Justin, preguntándole si nos veíamos a algún lado o pasaba a buscarme; habíamos quedado para dar una vuelta porque los dos nos habíamos pasado el día estudiando para los exámenes finales.

Paso en 5min por tu casa
Tengo una sorpresa para ti ;)

Fruncí el ceño mirando la pantalla del móvil y lo bloqueé, pensando en qué demonios tenía en mente hacer aquella noche.

–Mamá, voy a salir a dar una vuelta –la miré, haciendo que despegase los ojos de la pantalla de su portátil.

–¿Con las chicas? –Me miró con curiosidad.

–No –negué–. Con Justin.

–Madison –se sacó las gafas y me miró divertida–, ¿tienes algo que contarme?

–Mmm... no –enrollé los labios dentro de mí boca.

–Maddie –insistió, sonriendo finalmente.

–Es que aún no te puedo contar nada –me encogí de hombros–. No somos amigos pero tampoco novios.

Fui completamente sincera. Mi madre era como mi mejor amiga y las dos confiábamos muchísimo la una en la otra y nos contábamos prácticamente todo; después del divorcio de mis padres nos habíamos unido muchísimo y me encantaba tener esa relación con ella. No todo el mundo podía presumir de tener una relación así con algunos de sus padres.

–¿Os falta dar el paso?

–Algo así –hice una mueca–. ¿Dónde están Kate y Caroline?

–Han ido a buscar la cena porque ninguna teníamos ganas de cocinar. Bastante nos espera mañana.

–Dios mamá, no sé qué tenéis pensado hacer pero se me ha hecho la boca agua.

–No me hagas la pelota que sabes que vas a tener que dejar la casa como una patena –volvió su vista al portátil–. Vienen los abuelos y no quiero que se encuentren todo sucio.

Estaba a punto de responderle, pero la puerta de la casa sonó y me levanté, sabiendo que era Justin el que había tocado. Sonreí al verle, al igual que él cuando nuestros ojos se encontraron.

–Hola –me saludó–. ¿Nos vamos?

–Claro –asentí y asomé la cabeza por la puerta, alzando la voz–. Mamá, me voy ya.

–Pasáoslo bien –respondió–. Y no llegues muy tarde.

Empezamos a caminar hacia el coche de Justin y cuando los dos estuvimos dentro me atrajo hacia él, pegando sus labios a los míos y acariciándome la pierna sin perder mucho más tiempo. Sonreí contra su boca y enredé nuestras lenguas, viendo que las dos se habían echado de menos el poco tiempo que habían estado separadas.

–Me daba cosa besarte con tu madre "delante" –se separó, dejando un último beso húmedo sobre mis labios.

–Tranquilo, gracias a Dios no se parece en nada a mi padre –me senté bien en el asiento, abrochándome el cinturón de seguridad.

–Quedó bastante claro el otro día –rió.

–Ya vi que congeniasteis bastante bien –miré como conducía.

–Simplemente fue amable –se encogió de hombros–. Ya sé de quién has heredado el encanto –me miró por un segundo, guiñándome un ojo.

–Qué idiota eres –intenté esconder una sonrisa por lo que había dicho.