El sueño de toda fanática.

Capítulo 30.

POV LAUREN.

Adiós bobos. -Dije subiéndome al jet privado que compartía con las chicas.

-Cuídate estúpida. -Grito Dinah desde el otro lado de la pista.

Las otras chicas sonreían tiernamente ya que sabían lo feliz que estaba, todas excepto Camila; se notaba su sonrisa totalmente falsa.

Subí al jet y nos fuimos rubo a encontrar a el amor de mi vida.
Nos fuimos a las 10 pm para llegar justo a las 5am, esperaba y estuviese despierta a esa hora y que no estuviera tan enojada como para no abrirme la puerta de su casa.

**

Hemos llegado.

No le había mandado ningún mensaje rogándole, mucho menos comentándole sobre que estaba a menos de 10 minutos de donde se encontraba ella.

-Gracias José. -Agradecí el que me ayudaran a bajar de la camioneta en la que me encontraba y recibía una rosa blanca que me entregaba con una gran sonrisa.

Y ahí estaba yo, temiendo aún por mi vida ya que pensaba que estaba que Nao estaba demasiado enojada.

Me acerqué a la puerta de su casa con unos largos pasos y antes de tocar me di cuenta de que había una foto en la puerta de su casa.

Ella y yo desnudas.

Sentí como mi cuerpo tembló al ver la foto y como me empezaba a hervir la sangre y como mis dedos estaban dejando marca en mis manos por la fuerza en la que los apretaba en un perfecto puño.

Arranqué la foto y se la mostré a José.

-Quiero que trates de investigarme quien puso esta foto aquí; checa si tiene huellas digitales o yo que sé.

El asintió lentamente mirándome a los ojos con complicidad.

-El que hizo esto las va a pagar caro. -Dijo y yo asentí con seguridad.

Respiré un par de veces y me acerqué nuevamente a la casa de Nao, toqué el timbre e intenté colocarme de la manera más sexy posible.

-¿Así me veo bien? -Le susurré a José mientras tenía un brazo recargado en la puerta.

-No, no, mejor ponga su mano en su cabello, así se vería mejor.

Me acomodé nuevamente y coloqué la rosa en mi espalda esperando a que Nao me abriera la puerta.

Una vez abierta mis ojos se abrieron completamente.

Nao tenía los ojos rojos al igual que la nariz y su pelo lucía como si tuviese un nido de pájaros, tenía aún su pijama de las chicas súper poderosas puesto y aún se veía soñolienta.

-¿Quien es?. -Dijo entrecerrando los ojos.

-¿A quién esperabas?. -Dije con una sonrisa de preocupación.

Ella pareció reconocer mi voz y se lanzó a mi con un gran abrazo.

-¿Qué haces aquí? -Dijo dándome un montón de besos en mi cara.

-Me enteré de que la nena más hermosa de todas estaba enojada conmigo y como no me gusta estar así; vine para contentarla. -La agarré con una mano de la cintura y con la otra acerqué sus labios con los míos en un beso.

-Me enojaré más seguido entonces. -Dijo con una gran sonrisa.

-Por favor no. -Dije con total sinceridad

Acercó sus labios nuevamente a los míos y me dio muchos besos pequeños.

-¿Podemos hablar?

Ella asintió y me dejó pasar a mi y a José. Él se fue a la cocina, ya sabe que debe de darnos privacidad.

-¿Sigues enojada conmigo? -Dije pasándome la mano por el pelo y viéndola a los ojos intentando ver alguna reacción o algo por el estilo, pero nada; se encontraba completamente neutro.

-Poco, te agradezco que hayas venido, no quería hablar de esto por teléfono.

-¿Me vas a terminar?- Dije con un tono de voz con miedo y angustia, que era exactamente lo que sentía en ese momento. Ella solamente desvió la mirada y movió la cabeza en señal de "no".

-¿Puedo pasar? -Dije intentando que me mirara a los ojos y ella asintió moviéndose a un lado para que pasara.

Cerró la puerta en cuanto yo entré y se recargó en ella cruzando los brazos y yo solo lograba verla con angustia.

-Debiste de haberme avisado que vendrías. -Dijo rompiendo el gran silencio incómodo que se había hecho.

-No me contestabas llamadas y estaba preocupada amor. -Me acerqué lentamente y pasé mi brazo por su cintura, acercándola hacia mi y con la otra mano la agarré de la nuca, besándola. -Perdón por no haber entendido como te sentías, soy una idiota, en verdad Nao; lo último que quiero es perderte.

-No te preocupes amor, yo también debo de disculparme por no haberte explicado el porque me enojé y no solo dejarte de hablar, pero no me sentía de humor, solo tenía ganas de llorar. -Colocó su cabeza en el hueco de mi cuello y me abrazó, haciendo que el sentir su respiración me pusiera los pelos de punta.

-No, no tienes porque disculparte, sé como son de acosadores las personas y no pensé en que tu no estabas acostumbrada a ello y no entiendo porque mierda la gente es así de estúpida y amor en verdad entiendo si no quieres que contrate guardaespaldas, si quieres intimidad pues lo entiendo.

-Te quiero mucho, Lauren.

Al escuchar eso besé su frente y solté un gran suspiro ya que pensé que todo iba a salir mal y me iba a pedir que termináramos y eso es lo que menos quiero, perderla.

-¿entonces ya todo bien? -La alejé un poco para ver su rostro y notar si me mentía o no y ella solo asintió con una carita adorable aún que continuaba con los ojos hinchados.

-Pero estoy enojada porque no me dijiste nada y ¡Mirame!.- Alzó los brazos. - Me veo horrible.

-Te ves preciosa, como siempre mi amor. -la acerqué para depositarle un gran beso.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Hola, habla la que iba a actualizar más seguido xd, perdonen chicos.
Tenía exámenes y estaba preocupada por asuntos personales, pero ahora ya todo bien;) 
Por favor puntúen, compartan y comenten :)

Pdt. Estoy escribiendo otro ffic, pero este es Camren, por si quieren pasar a verlo :)

Pdt2. ¡El álbum de Camila se estrena en DOS días! No puedo esperar más para oirlooo :')

Besitos.
-N