¡Hey Arnold! La nueva era

Epílogo

Narra Arnold

Han pasado dos largas semanas desde el día del enfrentamiento. En la universidad no paran de hablar sobre el asunto. Con un montón de mentiras y exageraciones, la información ha llegado a oídos de todos. Pero al parecer, poco a poco, las personas comienzan a perder el interés... Es un gran alivio.

Las clases siguen estando igual de aburridas. Hoy es viernes y lo único bueno de este día es que habrá una noche de juguetes en la noche, en la casa de Stinky, tal como lo dicta la tradición. Nunca he estado tan ansioso por una celebración de este tipo...

Hoy comimos juntos en la cafetería. El grupo se hace cada vez más grande, tuvimos que juntar varias mesas para caber todos con comodidad. Curly y Brainy han formado parte de esta enorme familia. Sus méritos en el enfrentamiento fueron extraordinariamente heroicos. Todos hemos alabado hasta el cansancio a Curly y su gran acto. Incluso Rhonda lo ve de manera diferente. Esperamos que el pequeño héroe logre su objetivo y sea muy feliz, creo que se lo merece. Los pequeños gamers nos contaron sobre el problema que tuvieron con Wolfgang, estaban tan asustados y arrepentidos cuando nos dijeron. Todos lo entendimos, nadie les había reprochado nada...

Gerald y Phoebe se han dado una nueva oportunidad. Todos estamos realmente feliz por ellos, era lo que todos esperábamos y la verdad, se ven demasiado bien juntos. ¡Nacieron para estarlo! Gerald se la pasa pidiéndonos disculpas todos los días, cada bendito segundo. Enserio lo perdonaríamos si dejara de hacerlo... ¡Es una tortura!

Sid y Helga es una pareja que nadie creía posible. Todos nos sorprendimos al verlos juntos. Sid el mujeriego, siendo fiel y leal a una de las mujeres más rudas y temperamentales de toda la universidad. Vaya locura... Pero saben cómo manejar su relación, sin duda estarán varios años juntos, eso si es que no llegan al matrimonio. Con Gerald he hecho una apuesta, espero ganarla, quiero escuchar a Sid decir "sí, acepto" Todos sabemos el caso de Brainy con Helga, pero no siempre se gana en la vida. Al menos no pierde las esperanzas... aunque hay un par de chicas que lo ven de manera rara, como acosándolo. A ver qué pasa...

Hablar de Harold y Patty, para qué, son demasiados tiernos. Harold realmente se ha ganado la lotería con ella. Es la mujer perfecta para él. Hermosa, simpática, lo tolera en todo, y ambos comen hasta reventar. Se los ven demasiado felices y eso es lo único que importa.

En cuanto a mí, no hay nada interesante por contar... Han pasado dos largas semanas pero aún tengo algunas cosas en mi cabeza que espero resolver en la noche de juguetes.

********

La noche había caído y la hora se acercaba. Llegué temprano junto a Gerald y Phoebe aunque la pareja de los gordetes ya se encontraban instalados. Vaya que Harold ama las noches de juguetes...

Los minutos pasaban y los demás invitados comenzaban a llegar.

-¿Estamos todos? -preguntó Sid.

-Al perecer, sí -dijo Harold, dándole un vistazo a todo el sótano. ¡No, claro que no! Faltan aún...

Esperaba pacientemente en mi celular cuando de pronto recibí el mensaje que tanto estaba esperando. Me sentí realmente feliz y salté de mi asiento. ¡Llegaron!

Acompañé a Stinky a recibirlos, él era el único que lo sabía aparte de mi mejor amigo y su novia, mi mejor amiga. Después de todo, es el dueño de la casa, debía pedir su autorización. A él no le importó. Al final, seguía mirándome con recelo, pero eso se acabaría hoy, todo se acabaría... También se lo dije a Lila, era mi obligación saber si no le incomodaba la decisión que había tomado.

-Chicos... llegaron más invitados -anuncié con temor, bajando las escaleras junto a Stinky. Detrás de mí, con timidez y duda, bajaban Wolfgang y sus dos grandes camaradas, Edmund y la comadreja.