¡Hey Arnold! La nueva era

Capítulo 13: "Misión: La Gran Patty" - Parte 3

-Maldición, contesta... -insistía una vez más. -Vamos... solo quiero saber cómo estás.

Curly no daba señales de vida, no respondía a los mensajes ni a las llamadas. Brainy comenzaba a preocuparse cada vez más, sabía que su amigo estaba pasando por un verdadero tormento y solo quería ayudarlo, ser un apoyo para él.

-Vamos, Curly. Por favor... -Brainy intentaba una vez más comunicarse con su amigo. Le había mandado un centenar de mensajes y ya llevaba varios minutos intentando que conteste sus llamadas. Solamente sabía que pasaba la mayor parte del tiempo conectado en los videojuegos. Aun así, los mensajes que le mandaba por esa plataforma también eran ignorados.

Pasaron varias horas, la noche había caído y aún no conseguía dormir. Estaba recostado en su habitación, mirando el techo y pensando en su mejor amigo, en cómo se sentiría. "Tengo que ayudarlo", pensó. "No se cómo, pero tengo que pensar en algo, está sufriendo mucho...".

En la mañana siguiente, Brainy estaba tomando las primeras clases del día, aún le seguía invadiendo la idea de ayudarlo a Curly. Sin embargo, el gran dilema era el cómo. "¿Algún regalo? ¿Qué podría hacerlo feliz? Nada sería suficiente...". En su cabeza empezó a rebotar una lluvia de ideas. "Rhonda...", pensó de repente, abriendo los ojos como platos. "Rhonda..., pero no, es imposible. Rhonda... ¡Gerald!", se acordó con furia. "¡Ese maldito hijo de puta! ¡Él es el culpable de todo esto!" Apretó los puños con tanta fuerza que empezaba a lastimarse. Sus dientes emitían un chirrido y de vez en cuando se mordía el labio inferior con enojo. "¡Tiene que pagar!... ¡Eso!", se alegró al instante. "Si el sufre, Curly se alegrará. Eso es lo que tengo que hacer". En su rostro se dibujó una enorme sonrisa torcida.

El resto de las clases se convirtieron simplemente en asuntos sin importancia para Brainy. Dentro de su cabeza solo rondaba la idea de hacer sufrir a la persona que convirtió la vida de su mejor amigo en un infierno. Se pasó todo el día pensando en la manera que llevaría a cabo su plan, sin tener éxito, aún no se le había ocurrido nada bueno. Para la hora del almuerzo, la frustración comenzó a emerger, el pensamiento de que no se le ocurriría nada tomaba posesión de él, cuando de pronto, como ayuda divina, lo que andaba buscando se le atravesó justo de frente. Brainy se disponía a ir al comedor, estaba muy cerca de la entrada principal cuando escuchó la voz de alguien que conocía.

-Tranquilo, estoy bien -dijo Phoebe, forzando a no verse tan mal.

-¿Qué puedo hacer para ayudarlos? -preguntó Arnold, acercándose a ella.

Con gran rapidez, Brainy detuvo su paso y se escondió tras la pared, en el pasillo antes de llegar al comedor. Con precaución, asomó lentamente la cabeza para observar al par, sentía que algo raro estaba pasando. Abrió los ojos enormemente cuando vio que ambos se estaban dando un cariñoso abrazo. Su boca quedó abierta de tal manera que podía funcionar como un túnel de moscas sin ningún problema. Cuando finalmente reaccionó, se revisó el pantalón con torpeza hasta que pudo encontrar lo que andaba buscando. De su bolsillo derecho sacó un sofisticado celular, abriendo la cámara y apuntando hacia ellos. Clic. Una vez más. En un instante, tomó varias fotos de ese sospechoso abrazo. El rubio volteó con dirección cercana a donde se escondía Brainy, lo cual le generó un susto enorme y retrocedió completamente. La sorpresa había hecho que respirara con prisa y dificultad. Se acomodó los lentes e intentó nuevamente seguir espiando. Al observar la escena por una nueva ocasión, notó como Arnold tenía sus dos manos posadas en la cara de Phoebe con un ambiente muy romántico. Brainy no dudó ni un segundo en tomar más fotos de aquel momento. Una vez más, Arnold sospechaba de su presencia, sin embargo, en esta ocasión estaba preparado y solo se escondió nuevamente hasta que el rubio dejara de mirar a los alrededores. Intentó espiar por una última ocasión, sabía que tenía algo bueno e inconscientemente tenía la sensación de que en algo le serviría para ayudar a su amigo.