Olvidada

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—Hmm.— hizo una mueca meiling

Se encontraba sentada en una silla frente a un grande espejo, se podía notar que esta enfadada, se concentra tanto en un pensamiento que no se percata que alguien entra a la habitación.

—¿Te sucede algo?.—pregunta una voz femenina, era tan dulce y amable que apenas podía ser escuchada.

—¡¡Ah!! ¿En que momento entraste?.

Era una chica de piel pálida, vestía un vestido blanco, su cabello oscuro esta entrelazado, es bastante hermosa y luce amable. 

—Luces pensativa ¿a qué se debe?.— dio unos pasos para acercarse.

—Es por culpa de esa bruja.

—¿Bruja?. ¿Te refieres a la chica que los cadetes vieron hacer magia?

—Si, ella misma ¿La viste?

—No, solo que todo el territorio esta hablando de ella. Es el tema principal, incluso creo que los capitanes de los otros territorios se han enterado.

—¡¿Cómo que se han enterado los otros capitanes de los territorios?!.— exclamó levantándose de la silla.

—Dije que era posible..

—Ya se han enterado.

una tercera voz intervino a la conversación, en la puerta se encontraba shaoran quien sostenía una carta en sus manos.

—Ellos van a venir hoy en la noche, parece que desean ver a la chica.— suspiró. Daidonji
¿podrías prestarme unos minutos a meiling? Tengo que hablar con ella.

—Si.—Tomoyo se retiró.

—¿Que pasa?—Meiling adopto una expresión llena de serenidad.

—Descubrí algo sobre esa chica.— cerró la puerta.

—¿La bruja? dime que te dijo

—No es una bruja, puede que no me creas pero ella es la dueña de las cartas clow.

—¡¿Que?! Debe ser una broma
¿No se supone que estaba desaparecida? Tú mismo dijiste que las cartas clow habían desaparecido, por lo tanto no existiría un dueño. ¡Además! Esa niña no puede ser la dueña, tal vez se las robo al verdadero dueño o..

—Meiling ella hizo el conjuro frente a mis ojos, además cuando invocó la carta "la flor" me demostró que era la verdadera dueña.

—Pero aún así ella no puede ser la dueña, tú te haz preparado para ser el dueño de las cartas clow.

—Y lo seré.— afirmó.Ser él dueño de las cartas clow significa llevar una grande responsabilidad, no es algo que una niña como ella pueda hacer, además como hijo de la familia lí es mi responsabilidad.

—¿Eso significa que..

—Asi es, voy a quitarle las cartas o mejor dicha reclamar lo que me pertenece. Incluso si es por las malas me haré él dueño.

—Tienes razón, solo tu puedes ser el dueño, yo te apoyaré shaoran.— tomó las manos del chico mientras sonreía.

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—¿Me pregunto de que estarán hablando?.—pensó en su mente tomoyo

Caminaba por un largo pasillo, lleva en sus manos dos manteles de color blanco, dobló hacia la derecha cuando se topó con una pared, ahora cerca de ella había unas escaleras de caracol hechas con madera, bajó las escalera con calma, pero al alzar los ojos para mirar la cocina—que es hacia donde las escaleras conducen—Se asustó.

Sakura esta sentada en el comedor mordisqueando una manzana, parecía bastante hambrienta debido al modo en que comía. Cuando se percató de la presencia de Tomoyo se levantó del comedor con él rostro sorprendido.

—Tomo..

Los manteles que cargaba Tomoyo los dejó caer. Lucia sorprendida, abría y cerraba los labios como si quisiera decir algo que no podía, quizás por la impresión o quizás por algo más.

—¡Aquí estas!.— gritaron unos guardias que bajaban las escaleras.

Sakura había escapado no hace mucho, al despertar en la cama de un cuarto notó que era su momento para huir. Tenia tanta hambre que al encontrarse en la cocina decidió comer una manzana, ahora otra vez fue apresada por los guardias y llevada de regreso al cuarto vacío en que la mantuvieron encerrada con llave.

Sakura cayó al suelo dándose un golpe en el brazo izquierdo debido a que la metieron a la habitación de un empujón. Golpeó la puerta exigiendo ser liberada, no entendía en absoluto nada, lo único que sabe es que el mundo ha cambiado, no conoce la razón pero sabe que esto es debido a que alguien interfirió con el pasado o quizás el futuro. La princesa sakura no fue muy específica al decirle que lo que hace unos días "Vivió" era irreal.

Se quedó unos minutos en silencio analizando la situación. Se sentía deprimida por shaoran, su rostro se hacia presente en su cabeza, esa mirada fría y cruel provoca  temblores en su cuerpo, pero su rostro no se veía atemorizado, en cambio comienza a tornarse rojo.

—Incluso cuando es tan atemorizante se ve aún más guapo.— dijo siguiendo un hilo de pensamiento, su mente se había nublado y puesto en blanco.

Una vez que se dio cuenta de lo que había dicho se dio dos palmadas en los cachetes.

—¡Esta no es una situación para pensar en eso sakura!— se alteró cerrando los ojos, su corazón estaba latiendo fuerte.

El sonido de la puerta abriéndose la hizo volver a la realidad, un pie entró primero y seguido el cuerpo de una joven pelinegra, era Tomoyo quien lleva una bandeja con un plato de curry y un vaso de agua fría.

—Te traje la comida.—sonrió Tomoyo a lo cual sakura puso un rostro confundido.

—¿Pa-para mi?

—Si, esta mañana que te vi en la cocina parecías hambrienta. Ven a comer.— se agachó colocando la bandeja en el suelo.

—Ah.. gracias.— se dispuso a probar de la comida.

Tomoyo se quedó mirándola fijamente mientras comía.

—Muchas gracias Tomoyo.— sonrió dejando él plato y el vaso en la bandeja.

—¿Sabes mi nombre?—Tomoyo alzó las dos cejas ante su sorpresa.

Esa pregunta la hizo regresar a la realidad, la realidad donde había sido olvidada..


Sakura Card Captor/ You Are My Love  Primer Libro (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora