Capítulo 24

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Yuuri despertó cuando sintió el cuerpo de su marido removerse entre las sábanas, antes de separarse de él lo observó y cuando se aseguró de que el ruso se encontraba dormido, acunó sus mejillas y le besó en su respingado nariz

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Yuuri despertó cuando sintió el cuerpo de su marido removerse entre las sábanas, antes de separarse de él lo observó y cuando se aseguró de que el ruso se encontraba dormido, acunó sus mejillas y le besó en su respingado nariz.

Era tres de enero y sus familiares junto a Minami se devolvieron a Japón, Victor junto a Yuuri decidieron ir a despedirlos pero una vez que llegaron a casa todo se tornó lúgubre, Victor lo ignoraba y Yuuri solo podía estar tras él rogándole hacer sus ejercicios y tomar sus medicinas, cuidarlo no era difícil pero Victor podía ser muy terco la mayoría del tiempo y ese era el problema, se rehusaba a hacer ejercicios por el dolor, dolor que fue desvaneciéndose poco a poco al paso de los días. Ahora han pasado dos meses desde que los japoneses se fueron y no han mejorado su relación, Victor contrabajo podía ver al japonés todos los días, a veces no aguantaba y se ponía a llorar al recordar los momentos que vivió con él y en las posibilidades que no llegarían, como sus hijos, esos niños que había querido tener pero por trabajo decidieron que aún no era tiempo, ver a su marido con el abdomen abultado por llevar a su hijo dentro lo llenaba de ilusión en aquel entonces, ahora no sabía que hacer cuando tenía a Yuuri en frente ¿Qué debería hacer? Se preguntó.

Victor se encontraba en uno de los parque más concurridos en San Petersburgo acompañado de Yuuri, el japonés junto a su esposo daban una caminata por los parques, duraron un poco más que hace semanas, se sentaron en una de las bancas mientras Yuuri veía al peliplata y este miraba un punto fijo al frente.

— Victor — Habló el azabache.

El mencionado le miró de vuelta, Yuuri tenía las mejillas y nariz sonrojadas a causa del frío, se veía hermoso.

— ¿Si? — Respondió dudoso, Yuuri entrecerraba levemente sus ojos cuando tenía preguntas importantes que hacerle.

— ¿Por qué me pediste que te cuidara?

— ¿Eh? — Le tomó por sorpresa.

— Es que... No entiendo... ¿Por qué me pediste que cuide de ti si puedes contratar a una o un enfermero para que lo haga? ¿Por qué... por qué atrasaste el divorcio si ya no me quieres cerca?

Victor disimuló su sorpresa con una leve sonrisa, se acercó a Yuuri para verlo a los ojos y acariciar su mejilla carmesí, el japonés sorprendido por la muestra de cariño se relajó casi al instante para suspirar, Victor se acercó involuntariamente y acarició la nariz de su esposo con la suya, un pequeño empujón y los unirían en un beso que Victor supuso que Yuuri esperó ya que este cerró los ojos casi al instante, tenía ganas de besarlo, si, pero se iba a contener.

— Porque es tu deber como mi esposo, mientras estemos casados tengo el derecho a exigir tus cuidados y a parte te lo dije, no podría dejar que una persona desconocida cuide de Makkachin y de mi.

Los ojos achocolatados se abrieron y Yuuri no podía estar más confundido y decepcionado pero no se separaron, el japonés cerró los ojos para tomar aire y suspirar, y tomó valor, si no lo decía ahora no lo haría nunca.

On The Blades© (Victuuri)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora