Teach Me ↠ Park JiMin ↞ BTS

CAPÍTULO 31

- HyoRim, ¿te encuentras bien? -

- Oh, si, me duele un poco la cabeza es todo. - Ladeo un poco la cabeza evitando contacto visual. - Creo que es el cambio de horario y todo eso. -

- Ya veo.. bueno iré por más leche. - Asentí y poco después YooRa se levantó de la mesa dirigiéndose hacia la mesa donde estaban varios alimentos.

Mi cuerpo sentía nervios, estaba un poco adolorida y cansada.

Quería contarle a alguien lo que había pasado la noche anterior pero me contuve, la única persona a quien podía contarle era a YooRa pero no pude, tampoco debía, otra opción (que ni siquiera debería ser una opción) era TaeHyung, lo pensé muchas veces, debía soltar eso a alguien. Nunca tuve la necesidad de contar mis cosas a nadie pero esta vez fue distinto, no sabía si era bueno o malo lo que me había sucedido. No, nunca lo había experimentado, nunca pensé que estar con alguien fuese tan "riesgoso" o sea, me gustó en aquel entonces, supe encontrarle un ligero gusto pero aún seguía insegura.

Pongo la cabeza en la madera de la mesa, suspiro y pienso aún más sobre lo que paso en la noche.

En mi mente estaba grabado como sus manos tomaban mis ambas muñecas, ejerciendo presión en mi espalda baja para quedar inmóvil, todo mi peso estaba en mis rodillas que se apoyaban en la cama, Jimin se mantenía parado detrás sometiéndome más a él. Mi espalda se encorvaba más y por la fuerza mi mentón se mantenía levantado.

Una de mis muñecas tenían un leve color rojo y dolía, cielos, sí que dolía. No podía con mis piernas y mucho menos con el dolor de cintura. Esa sensación era tan confusa, en mi mente nunca quise repetir eso pero.. era JiMin.

"Te amo"

Dijo aquello cuando me embestía. Guardé silencio después de eso, me mordía los labios para no gritar. Sólo aguanté mientras sentía placer y dolor a la vez. Era imposible.

Una de las sillas se mueve, y yo pensando que es YooRa levanto la cabeza para poder verla pero no es ella.

- Buenos días. - Oh, qué cambio. Incluso sonreía.

- Hola. - Me levanto de la mesa haciendo una reverencia. - Yo.. debo irme. -

- Siéntate. - Volvió a hablar. - ¿Por qué no sonríes? ¿Te hice daño? -

Me encojo de hombros viendo alrededor. - Pueden escucharlo.. por favor guarde silencio. -

- Sólo quiero que tú me escuches. -

- JiMin.. aquí no por favor. -

- Bien. - Chasqueó la lengua. - Prepárate, debemos ir al museo. -

- No iré, no me siento bien. -

- Debemos ir todos, nadie puede quedarse. - Sus fanales marrones me inspeccionaban. - Lo sabes HyoRim, ve a alistarte.-

- Por favor JiMin.. -

Él hizo lo mismo que yo, miró a los lados y cuando se dio cuenta de que no había nadie cerca volvió a verme. - Sube a tu habitación, espérame ahí. -

Y lo esperé sentada. Después de aproximadamente diez minutos tocó mi puerta e ingresó directo para sentarse a mi lado.