PV NIALL.
Las once en punto. Debe estar a punto de salir por esa puerta. Las pantallas del aeropuerto señalaban que su vuelo desde Madrid había aterrizado hace ya media hora, asi que no debe tardar mucho en llegar ya.
Sabía que el vuelo llegaría alrededor de las diez y media y, sin embargo, llevo aquí desde las nueve de la noche. Reconozco que estoy un poco nervioso por ella. Que haya aceptado venir aquí significa mucho para mí. Eso significa que no se ha olvidado de mí y que lo que tuvimos en verano fue de verdad.
Vanesa es una muy buena niña y en absoluto es interesada. Me ha dado rabia que durante estos meses no hayamos podido hablar tanto como a los dos nos hubiera gustado, pero se que ella ha estado muy ocupada con el instituto y mi trabajo no me deja mucho tiempo libre que digamos. Pero tengo una buena noticia para ella. En marzo del año que viene iremos a España a hacer una promoción de nuestro disco y nuestros conciertos allí, asi que podremos vernos otra vez.
Me he quedado apoyado en una de las columnas al lado de la puerta por donde tiene que salir Vanesa para no llamar mucho la atención. Lo que menos quiero ahora es que se forme un jaleo aquí nada más llegar ella.
Sé que no debo ir a lugares con mucha gente yo solo y debería haber avisado a Paul o a alguien para que me acompañara, pero quiero hacerle la estancia a Vanesa lo más cómoda y normal para ella en la medida que sea posible, aunque eso a veces es bastante improbable.
Las puertas comienzan a abrirse y comienzan a salir muchas personas, me imagino de distintos vuelos que han llegado a la misma hora que el de Vanesa, asi que no la debe faltar mucho. La gente pasa y pasa pero Vanesa no sale. Espero que esté bien y no haya tenido ningún problema para salir. ¿Quizás debería preguntar? No Niall no te precipites que solo han pasado unos minutos.
Por fin veo a una chica morena y muy blanca de piel cruzar la puerta con una maleta azul que se para justo en la salida y comienza a mirar hacia todas partes buscando mi mirada. Me separo de la columna y me pongo recto. Antes de que me de tiempo a decirla nada, gira su cabeza hacia la derecha y nuestras miradas se cruzan. Sus ojos oscuros que desde lejos parecen totalmente negros se tiñen de alegría y una gran sonrisa inunda su rostro mientras se dirige andando muy deprisa hacia mí.
Yo la sonrío mientras se acerca hacia mí y me alcanza. Ambos nos quedamos quietos, uno en frente del otro, nos hemos quedado sin palabras en un segundo, pero ella rompe esa pequeña tensión dándome un abrazo que echaba mucho en falta. Yo la estrujo entre mis brazos y aprovecho ese momento tan especial que estamos viviendo. Nuestro reencuentro.
- Te he echado mucho de menos Niall- me dice en voz baja en mi oído haciendo que me llene de ternura por sus palabras.
- Y yo a ti pequeña, no sabes cuánto.
Ella se separa de mí y me deja observarla detenidamente. Veo en ella la misma cara de la niña que conocí en verano, pero en el fondo más cambiada, más mayor. La ha crecido bastante el pelo y su cuerpo se ha estilizado un poco más. Está muy guapa. Cojo su maleta del suelo y la hago un gesto con la cabeza para que me siga.
- Que bien te sientan los diecisiete- la digo haciéndola reír.
- A mí me sientan bien todas las edades Horan.
- Cierto, pero te noto no sé, más… mayor- la digo haciéndola sonrojar un poco- bueno dime, qué tal ha ido el vuelo.
- Bien, muy corto en realidad.
- ¿Tuviste algún problema con tus padres?- la digo mientras llegamos a mi coche y meto su maleta en el maletero.
- Bueno, me costó un poco convencerles y no les culpo. Nuestra relación es rara como poco- me dice riéndose.
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Destiny
Fanfiction¿Existe realmente el destino? ¿Nos da la vida "señales" sobre lo que debemos hacer? ¿Está el amor verdadero destinado a cumplirse o, por lo contrario, las cosas pueden complicarse y hacer que todo se salga por la borda?