Confuced Memories

El reclamo de un lobo

- lo siento, lo siento- murmura abrazando con fuerza a Stiles, lo llevaba en brazo para que su cuerpo pudiera mantener el calor corporal.

No había sido intencional, había sido solo un arrebato de su lobo, un impulso que no pudo resistir- lo siento, lo siento- volvió a cantar, acunando el cuerpo delgado de Stiles- te pondrás bien, lo juro- menciono apretado el lugar donde debería haber piel y ahora solo había una enorme mordida.

- ¿Do...Donde...está mamá?- pregunto Stiles abriendo lentamente los ojos.

- vendrá- respondió mirando a otro lugar, se suponía que eso no debería ser así, no debería estar muriendo, sino aceptando- lo prometo- dijo apretando más a Stiles contra su cuerpo.

Peter manejaba con desespero, bajando la velocidad cuando escuchaba alguna patrulla cerca, no era momento de una persecución, menos cuando el paciente era el hijo del mismísimo Sheriff.

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- te prometo que estarás bien, vale- menciono Talia colocando una rodilla sobre el piso, quedado a la altura de Isaac, Scott había caído rendido después de borrar ese recuerdo.- ¿Tienes miedo?- pregunto cómo el joven Isaac miraba con pánico el cuerpo tendido de su amigo.

Isaac dirigió su mirada a Talía, no sabía que había hecho, solo sabía que Scott se había derrumbado en cuanto la pelinegra lo había tocado- ¿Voy a morir?- pregunto con algo de valentía.

- No- murmuró Christopher levantando el cuerpo de Scott para llevarlo a uno de los cuartos disponibles.

- Pero el...- señalo con temor, eso daba miedo, tenía la sensación que estaba mejor en el orfelitato, siendo golpeado por ese niño cada noche.

- solo está dormido- conforto Talia- ven- dijo tomando la mano de Isaac para sacarlo de ese lugar- mira - dijo una vez que salieron al patio tracero.

- su..sus ojos- murmuró asombrado.

- ¿Recuerdas el cuento que te regalé?- pregunto Talia mirando hacia el frente, tenían trabajo que hacer, parte de la piscina estaba manchada de sangre, el agua estaba turbia en color rosa.

- está bien ser diferente- respondió Isaac- ser yo no es malo- murmuró mirando hacia donde estaba todo el desastre, aunque su vista fue tapada por Talia.

- ser diferente- murmuró la loba tomando la posición anterior, quedando a la altura de Isaac- algunos nacimos con diferencias- informo haciendo cambiar su frente y orejas- ser yo no es malo- continuo sacando levemente sus colmillos- es solo que está bien ser distinto- menciono regresando a su estado natural, Isaac tenía el corazón desbocado, el pánico podía percibirse a kilómetros.

- yo...- murmuró dando un paso hacia atrás.

- tranquilo- compadeció atrayendo solo un poco al niño- no te voy a hacer nada- menciono tomando las manos de Isaac para colocarla sobre su rostro- se que tendrás miedo, se que este cambio es difícil de aceptar- dijo sonriendo ampliamente al momento en que el niño comenzó a tantear algunas partes- te prometo, te juro que jamás vas a volver a tener miedo- dijo pasando su mano sobre el cuello de Isaac- te cuidare con mi vida- prometió tanteando el pequeño bulto del cuello donde sobresalía la servicial- pronto serás un héroe, un gran caballero indestructible, con el corazón más noble que jamás hubieras imaginado.