Cenicienta después de las doce

Príncipe azul 6

Espero pacientemente que Cinder se digne salir de casa. Por mientras saco mi celular para jugar y perder un poco de tiempo para que aparezca. Cuando voy en el nivel cinco algo me tapa la vista del sol haciendo que pierda la partida, pero al levantar mi mirada me sorprendo al ver a la abuela de Cinder.

-Necesito hablar de una cosa contigo.

-¿Que cosa?

-Mi nieta me dijo que estaban juntos.

-Y usted no quiere que yo este con ella, ¿Verdad?

-No es eso, se que te gusta y también le gusta a ella.

-¿Me esta poniendo nervioso, que ocurre?

-Necesito que la cuides en cualquier momentos y mas ahora, ¿De acuerdo?

-Obvio que si, ¿Pero por que?

-Porque tengo cáncer y no tengo mucho tiempo de vida.

-No se que decir, ¿Sabe Cinder?

-No, pero le contare lo antes posible y por eso estoy hablando contigo este tema. Mi nieta ya tiene mayoría de edad por lo cual puede hacerse cargo, pero se quedara completamente sola, no tiene a nadie mas que a mi, por eso quiero que me prometas que la cuidaras cuando no este, ¿Me lo prometes?

-Se lo prometo, pero sabe que le romperá el corazón cuando se lo cuente.

-Ese es mi mayor miedo, yo soy lo único que tiene y ahora la abandonare como todo lo que ella quiso en un momento.

-Ya no esta sola, me tiene a mi y haré todo lo posible para que sea feliz.

-Sabia que eras un buen chico y se que la protegerás con tu vida, tan solo espero que pueda seguir su vida después de irme.

-Nunca la dejare sola, se lo prometo.

-¿Por que tienen esas caras?

-Estaba contándole el ultimo capitulo de la temporada de mi serie, cuando muere mi personaje favorito.

-¿No me digas que le estas contando nuevamente la muerte Dean en sobrenatural?

-Que quieres que te diga, me duele.

-Sabes que luego revive, ¿Verdad?

-No me hagas spoleir.

-Como digas. Nos vemos abue.

Le dice depositando un beso en su mejilla para luego tomarme la mano y dirigirnos hacia el instituto.

-¿Sabes que falta?

-¿Que falta?

-El beso de buenos días.

Me mira desconcertada, para luego que sus mejillas se tiñen de un color rojo suave. Me gusta como reacciona Cinder por una simple palabra. Me acerco a ella lentamente y le deposito un pequeño beso en sus labios haciendo que Cinder sonría.

-Así mejor.

Le digo tomándole la mano y ella me mira con una sonrisa para luego caminar hacia la parada. En estos momentos me preocupa algo mayor y es que como va reaccionar Cinder cuando su abuela le cuente que esta muriendo, no quiero imaginarlo, le romperá el corazón.