A chance to change (Luke Hemmings) |5sos

Capítulo 15.

Capítulo 15.

Dije a Luke si quería quedarse un rato y él aceptó.

- Me han sobrado nuggets, ¿quieres alguna? -dije sentandome.

- Oh claro, me encantan -sonrió él cogiendolas.

Vinieron las chicas, que se habían ido al borde del agua.

- Tina, yo tengo que irme ya -dijo acercandose y dándonos dos besos.

- Nos deja por su novio, anda que.. -dijo Mire riendo.

Al irse Laia, Mire se sentó con nosotros pero a los pocos minutos llegó Ashton.

Cómo no pensé. Llevaban más de un año y se les veía genial, estaban hechos uno para el otro.

Pasamos casi toda la tarde charlando, haciendo chistes y riendo. Al ponerse el sol, ambos empezaron a estar muy demasiado ñoños y como me incomodaba dije

- Chicos, yo tendría que ir llendome a casa ya...

Luke, que parecía sentirse igual que yo dijo

- Pues yo te acompaño -levantandose.

Nos despedimos y empezamos a ir hacia casa.

- ¿Te apetece un helado? -dijo Luke al pasar enfrente de una heladería.

- Mmm, sí -sonreí- me encanta comer helado.

- Pues estás de suerte -sonrió él y fue a pedir.

(Narra Luke)

La invité a comer un helado porque me gustaba estar con ella. Me divertía y me parecía súper dulce, aparte de guapa.

Era bastante tímida conmigo, y eso me gustaba.

Estando con ella me sentía como si tuviese que cuidarla y hacerla sentirse a gusto todo el rato y ver que lo conseguía, me complacía.

Nos fuimos a sentar en la terraza de la heladería que estaba llena de luces de colores.

Le hice el típico gesto de moverle la silla, cosa que le hizo gracia.

- ¿Has escrito alguna canción más?

- Estoy en ello.. Esta es mas movidita -dije sonriendo.

- ¿Por qué no os reunís todos y buscáis bares o clubs donde tocar? Seguro le gustaríais a la gente -dijo ella mirandome.

- ¿Estas loca? -respondí yo, y reímos ambos- a tí te gusta porque eres nuestra amiga..

- Que no tonto, ¡lo digo enserio!

- Está bien, no prometo nada pero hablaré con ellos -sonreí.

Al levantarnos para finalmente ir a casa, noté que tenía frío así que, sin decirle nada, le puse mi chaqueta por encima de sus hombros.

- Oh, gracias -dijo ella sin esperarselo, y como respuesta tan solo sonreí.

Al ir caminando, de repente noté algo helado en mi espalda.. Eran sus manos y la miré y tan solo reía.

- Que malapersona -dije riendo quitandoselas- ¡estas helada! -y se las cogí para calentarselas un poco con las mías.

Es tan bonita y achuchable que al llegar a su casa, no pude evitar abrazarla.

(Vuelvo a narrar yo)

Llegamos a casa y, cuando estaba a punto de devolverle la chaqueta, me abrazó.

Me puse un poco nerviosa, pero en verdad me gustó, y mucho.

- Quedatela, ya me la darás en clase -dijo sonriendo al separarse.

- Está bien.. Gracias -dije tímida.

- No me las des todo el rato anda -sonrió antes de irse- buenas noches.