Capitulo 3

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El lunes llegó en un abrir y cerrar de ojos, así que enseguida volví al colegio.

Al llegar y abrir la puerta me encontré una pequeña nota. Reí imaginándome de quien sería.

¡De la próxima no te libras! Tócame la puerta cuando veas esto, T x.

Así que dejé mis bolsos e hice caso a la notita.

- ¡Buenos dias chica perdida! -sonrió al verme- pasa, pasa

- Gracias -entré y le miré.

- Hoy después de clase ven conmigo, quiero presentarte a unos amigos -dijo simpático.

- Está bien -sonreí.

- ¿Como lo llevas? -me miró.

Me encogí de hombros- aun estoy mal y enfadada con él pero le echo de menos.. Aparte ahora esta jodido y me preocupa aún mas... -contesté sincera.

- Ya pasará, ya verás -sonrió esta vez dulcemente.

(...)

- El es Brad, ella Martha, Lydia, James y Ari, chicos, ella es Tina.

Los seis nos saludamos encantados de conocernos y estuvimos toda la tarde charlando y riendo. Eran buenos chavales y las chicas eran muy amables conmigo.
Sinceramente, por un rato, me olvidé de todos mis malos rollos. Me hizo bien pasar esas horas tomando algo con ellos.

- ¿Donde vamos el viernes? -preguntó Brad mientras acariciaba la mano de Martha.

- Pues donde siempre ¿no?

- Sara Ellen da una fiesta esa noche -les miré- ¿sabéis quien es?

- Para no saberlo -dijo James, y todos asintieron. Yo les miré con gesto de no entender a qué se debía ese comentario.

- Es una de las chicas mas conocidas de aquí -me explicó Tristan- su padre trabaja para una discográfica y pues imagínate..

- ¡Dicen que sus fiestas son de las mejores!

- Yo he salido varias veces con ella -les miré- ¿le aviso que iremos?

- ¡Perfecto! -contestó Brad energico.

Cuando empezó a oscurecer, decidimos volver cada uno a nuestros estudios.

- Vente en un rato a cenar conmigo anda -propuso Tristan.

Creo que sabía que, al estar sola, pensaría en lo que me pasaba y estaría mal y que, por eso, me invitaba a hacer estas cosas.

- ¿Seguro? -él asintió- Está bien, me ducho y vengo -sonreí.

- Pues aquí te espero.

Nos despedimos y me metí en mi habitación. Me desvestí, llené la bañera de agua y me sumergí en ella, súper relajada.

Había una frase que no dejaba de rondar en mi cabeza; su padre trabaja para una discográfica y pues imagínate...

- Hubiese sido una gran oportunidad para Luke y los chicos -me dije a mí misma y suspiré.

Pero seguí comiendome la cabeza y sentí la necesidad de hablar con él. Le echaba mucho de menos, muchísimo. Aparte estaba mal, y llevaba mas de una semana sin hablarle.

No lo hagas

Hazlo

No

Le necesitas

Te ha engañado

Aún le quieres

No aguanté más.
Me sequé rápido y me senté en la tapa del wáter con la toalla alrededor de mi cuerpo. Cogí el movil, entré a Whatsapp y le busqué.

Que bonita foto pensé. Estábamos juntos, en la cabaña. Sonreí ante los recuerdos.

Hola Luke... ¿Estás mejor? Tienes que cuidarte...
Un beso, A.

Enseguida su estado pasó a ser "en línea".

Poco después, a "escribiendo..." Y, sin poder evitarlo, mi corazón empezó a latir más y más fuerte.

A chance to change (Luke Hemmings) |5sosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora