Siento como mi estómago protesta en mi contra y me revuelvo incómoda en la cama sin querer abrir mis ojos y pareciéndome estar más cansada de lo habitual. Vuelvo a dejarme llevar nuevamente por el intenso sueño que hace pesar mis párpados sin permitirme siquiera pensar en abrirlos y haciéndome dejar a un lado cualquier malestar, pero sólo luego de unos minutos siento un sabor agrio en mi boca que me hace reaccionar rápidamente intentando salir de la cama.
¡Mierda...!
Empujo a Zab para poder salir e ir hacia el baño antes de hacer un desastre, pero sólo con poner los pies en el suelo veo que todo me da vueltas y me voy de bruce callendo de espalda sobre las baldosas frías.
—¡Diablos! —grito horrorizada, luego dejando escapar de mis labios un quejido, sin poder quitar mis ojos borrosos del techo blanco y en mi trance sintiendo como Zab sale de la cama rápidamente dejando caer algo al suelo lo que me hace cerrar los ojos inconscientemente ante el estrepitoso ruido. Luego cuando los abro nuevamente me doy cuenta que es de día por la claridad que se filtra por las ventanas y lo veo aparecer frente a mí con sus rostro adormilado y cabello oscuro enmarañado.
—¿Nena, Estás bien? —Frunzo un poco el ceño y algo confundida niego con la cabeza mirando su rostro preocupado mirarme con cautela. Intento procesar todo cuando me siento más repuesta, pero entonces vuelvo a ser consciente del torbellino de las náuseas y salgo disparada al baño dejándome caer frente al retrete y sin el mínimo esfuerzo devolviendo todo el contenido de mi estómago.
¡Cielos!
Zab que corre inmediatamente a mi par permanece detrás de mí acariciando mi espalda y brazos con cariño, tambien sosteniendo mi cabello mientras no puedo dejar de vaciar mi estómago una y otra vez, hasta el punto de sentir un dolor agudo quemándome por dentro, entonces justamente ahora doblada sobre el retrete soy consciente de todo lo que ha pasado ayer y sumamente aturdida y desorientada comienzo a maldecirme por dentro, por haber salido de la manera que lo hice. Comienzo a buscar en mi adolorida cabeza todo lo que ha pasado anoche, pero por más que trato de recordar me encuentro un tanto despistada.
¡No puedo creerlo!
Cierro mis ojos fuerte tratando de que Zab no note mi confusión, tiro de la cadena, tomo un papel para limpiar mi boca y cierro la tapa quedando contra el retrete. Me encuentro cansada y adolorida, pero entonces volteo y lo miro por un breve momento mientras se toma el momento para retirar con sus dedos el cabello de mi rostro, para luego dejar un beso en mi frente.
Su rostro somnoliento se vé cansado,
Cómo si no hubiese descansado en días, pero siempre guapo, entonces sin poder contenerme encierro mi rostro en su torso desnudo.Estoy un tanto azorada, tanto que no tengo el valor para verle a la cara por más tiempo y preguntarle qué demonios hice anoche para encontrarme de tal forma. Juro la estoy pagando caro y con creces.
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Jamás Te Soltaré #2
RomansaSegunda parte de la Bilogía "Jamás" Ha pasado casi un año después que Vila volvió a sentirse viva y plenamente feliz, después de que su vida cambió y dejó atrás el pasado que tanto la marcó, la atormentaba y hacia sus días un infierno, ahora tiene...