41. Alison

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41 | Alison

—¿Cuánto le falta a Jess? —pregunto bufando. Rick y Seth la invitaron a comer, y para empezar, debemos esperarla. Se está demorando más de lo normal y ya tengo hambre. Pasar todo el día en la playa me dejó hambrienta.

Minutos después, el timbre suena y mi rostro irradia alegría. Al fin comeremos. Soy la única que se levanta del sofá para ir a abrir la puerta.

—¡Por fin! —exclamo sonriente hasta que me doy cuenta de quién es. Cualquier pizca de felicidad se evapora como arte de magia. En realidad, no es magia, es...—. ¿Qué demonios haces aquí, Alison?

Apenas esas palabras abandonan mi boca, escucho a Seth y Rick levantarse de sus lugares y acercarse a la puerta.

—Eh... Yo... —un par de lágrimas se deslizan por sus mejillas. Muerde su labio y fija su vista por encima de mi hombro—. Yo... Rick, por favor, te necesito.

Inmediatamente volteo para ver a mi hermano, y puedo notar un ápice de esperanza en sus ojos. Ese pequeño brillo que no veo hace semanas. Brillo que va a desaparecer y oscurecer aún peor la próxima vez que ella lo decepcione.

—Y una mierda —suelto en una sonrisa irónica—. Vamos a hablar afuera, Alison.

No espero una respuesta de su parte y salgo al pasillo, cerrando la puerta para evitar que nos escuchen, aunque honestamente, no me importa. No quiero que suene desesperado, pero estaba esperando este momento.

—Quinn, déjame hablar con tu hermano —suplica con sus ojos cargados de lágrimas. Niego. ¿Ahora quiere hablar? ¿Después de engañarlo y tratar mal al único chico dispuesto a tratarla como una reina?

—Estas muy equivocada, Alison. —Me cruzo de brazos. Aunque tenga menor altura que ella, logro ser más intimidante—. No vas a acercarte a mi hermano nunca más.

—Pero Quinn... —pide— Tú... Tú no lo entiendes. Lo necesito.

Me daría pena su desesperación si no fuera porque sé que es todo un acto de manipulación. Imágenes de ella y Scott Van Lexer bombardean mi cabeza. Solo consigue enojarme más.

—¿No entiendo que después de todo buscas a mi hermano como pañuelo?

—Scott y yo no estamos más juntos —cuenta entre sollozos—. No lo quiero.

—¿Y decisión de quién fue eso? ¿De Scott? —adivino.

Después de Año Nuevo, no supe cómo iban a seguir las cosas, qué tipo de repercusión iba a tener lo que hice. Scott terminando con Alison estaba en mi lista, solo que no por mí, sino porque eventualmente iba a aburrirse y dejarla.

—Quinn, lo destrozaste. Ni siquiera su madre le habla, lo echó de su casa. Ya no tiene nada —bufa entre llantos—. Ya no es el mismo de antes.

Y ahora que no tiene nada, Alison no lo necesita. Si él no la dejaba, ella iba a hacerlo.

—Solo quiero hablar con Rick —vuelve a suplicar—. Nunca pensé que Scott fuera a dejarme así.

—Nunca digas nunca, Alison —le recomiendo y me cruzo de brazos—. Scott es una mierda de persona. Y algo me dice que lo sabías, y aun así caíste por él como tonta que se tropieza con roca tras roca con tal de perseguir a alguien por conveniencia. —Ella muerde su labio para evitar llorar. Suelto un suspiro frustrado—. Alison, eras una buena chica. O eso creo. Seguiste al chico que te prometió la luna y las estrellas y ni siquiera pudo darte la mitad de eso. En el camino, le hiciste daño a mi hermano.

—Ya lo sé, Quinn —espeta furiosa de escuchar la verdad—. Pero Rick va a entenderme, lo que tenemos es único y podemos solucionarlo. No me hagas sentir peor de lo que ya me siento... Yo...

Créeme, lo haré.

—No, Alison —la interrumpo bruscamente—. No pareces entender, y por eso alguien debe decírtelo. Si no querías a mi hermano solo bastaba con dejarlo, no engañarlo a sus espaldas por quién sabe cuánto tiempo y ridiculizarlo frente todo el mundo. Y ¿con Scott? Sabías que estaba comprometido, sabías de Marine.

Ella no responde, así que continúo con todo lo que tengo guardado.

—Y, ¿sabes qué, Alison? Siento pena por ti. Pena porque perdiste a un chico fenomenal como mi hermano. Sé que no es perfecto y que tiene sus cosas malas, pero nadie te va a amar tanto, ni te va a cuidar como lo hace él. Así que cuando sigas persiguiendo a alguien por su dinero, su posición y su apellido, quiero que recuerdes a mi hermano y lo feliz que te hizo hasta que lo echaste a perder.

Alison rompe en llanto sin poder aguantarlo y se echa a correr escaleras abajo. La observo hasta que desaparece de mi vista y suelto un resoplido cansado.

Volteo para entrar y me encuentro a Rick y Seth mirándome perplejos en la puerta. No sé en qué momento la abrieron. Sonrió satisfecha, sintiéndome inundada de una extraña felicidad y satisfacción. Los esquivo para entrar al departamento bajo sus miradas estupefactas.

Que tengas una buena vida, Alison.

—¿Podemos comer ya? —les pregunto. 


Nota:

Feliz 2018!

Nunca mas hago esto con ustedes. Es como hacer un pacto con el diablo, tengo los dedos amortiguados🤨😫

Pero aca estoy, cumpliendo👋🏼

💛

love,

cande.


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The New Heartbreaker | DISPONIBLE EN LIBRERÍASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora