56. Así fue como termino todo.

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Espero que les guste, y en lo posible que no me asesinen ❤️ Los quiero hasta el infinito y más allá, nos vemos en dos semanas con el capítulo final 😘


Aviso: Están leyendo la versión editada del libro por lo que comentarios viejos no aparecen, así queee, a votar y a comentar!!! Gracias, los amoo♥


56 | Así fue como termino todo.

Tyler me hace girar. Sonrió y dejo que me atraiga a su cuerpo. Mi espalda choca con su pecho y apoya su mentón en mi hombro. Cierro mis ojos al mismo tiempo que echo la cabeza hacia atrás. Besa mi cuello y me estremezco.

—¿Quieres que nos vayamos? Ya es tarde —murmura cerca de mi oído; de otro modo no podría oírlo por lo fuerte que está la música.

Asiento, las cuatro de la mañana es suficiente para una fiesta de estas. Definitivamente no nos fuimos «temprano» como Tyler había dicho.

No me crucé con Max ni con Key, cosa extraña ya que ellos viven aquí. Estuve con Tyler toda la noche y puede ponerse algo abrumador. Estuvimos con unos amigos en un momento, pero la mayor parte del tiempo éramos solo nosotros dos.

—Bueno, andando —sentencia. Toma mi mano y salimos de la masa de adolescentes borrachos. Apenas toqué un trago que me preparó Tyler a modo de broma para recordar nuestra noche en casa de Nick. Tyler parece haber aprendido de la noche que tuve que buscarlo en un estado deplorable. Ambos estamos completamente sobrios.

Nos internamos en la noche. Estamos en primavera, y es una de esas noches en las que hace un calor tremendo. A veces extraño Portland con su clima fresco y sus inviernos duraderos. Sin embargo, es lo único que extraño.

Tomados de la mano y atrayendo demasiadas miradas, me lleva hasta su auto. Durante toda la noche sentí las miradas curiosas que nos juzgaban y susurraban entre ellos. Supongo que no es fácil digerir que efectivamente Tyler y yo estamos juntos de nuevo. Honestamente, no termino de entender en qué demonios se ha convertido esto. Pero si de algo estoy segura, es de mis sentimientos.

Dejo escapar un suspiro una vez en el auto. Estoy muy cansada. Agreguémosle que mi noche no acaba aquí.

—¿Te llevo a casa? —me pregunta al encender el motor.

—¿Tan rápido quieres terminar la noche? —inquiero casi en un tono de diversión. Volteo para mirarlo, su cabello castaño claro ya no está tan bien peinado como estuvo hace unas horas, los mechones rebeldes se encuentran desordenados; sin embargo, su rostro sigue igual de atractivo que siempre. Esboza una pequeña sonrisa que marca sus hoyuelos.

—¿Qué propones?

Al parecer, mi pregunta ha funcionado. La verdad es que no quiero ir a casa. Prefiero estar con Tyler.

—¿Qué te parece el muelle? —sugiero alzándome de hombros. Simplemente nombro el primer lugar que se me vino a la cabeza. De las pocas veces que lo visité a lo largo del año, ninguna fue con Tyler.

Ladea su cabeza y hunde sus cejas.

—¿El muelle? ¿A las cuatro de la mañana? —suena dudoso.

—Suena como un plan excelente. —Finjo una sonrisa increíble.

Tyler entrecierra sus ojos, como si intentara descifrar mis intenciones detrás de esto. Pero la cuestión es bastante simple, no hay segundas intenciones. Estoy a punto de resignarme, llamarle aburrido y decirle que puede llevarme a casa cuando su respuesta me sorprende:

The New Heartbreaker | DISPONIBLE EN LIBRERÍASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora