Capítulo treinta y uno

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Capítulo treinta y uno:


Vienna, Luke y yo, nos dirigimos hacia el comedor. Yo seguía insistiendo en que Louis estaba enamorado de ella y no de mí.

—Es de ti, Paige. A ti te besará - dijo Vienna cuando estabamos haciendo fila de las bebidas.

—¡Ya! - gritó Luke - se estan peleando por una cosa estúpida. Al menos alguien las quieres, sea quien sea de ustedes.

—Luke, no pienses que nadie te quiere, nosotras te queremos - le dije, acariciando su nuca. - y ya, nos callamos - miré a Vienna.

—Si, hermanito - dijo Vienna - vamos a sentarnos.

Nos sentamos en una mesa, fuera del comedor. Las mesas de adentro se llenaban muy rápido, gracias a que todo el equipo de futbol se sentaba en ellas. Caminamos por el cesped hasta dar con una mesa vacía. 

—¿Cómo estuvo química? - preguntó Luke, divertido. Ya que ellos se habían salido de ella.

—No lo sé - hice una mueca - Harry, me estuvo tratando de besas toda la clase y no escuché nada.

—¡Que lindo! - dijo  Vienna tomando sus manos y sus ojos brillaban.

—¿Qué es lindo además de ti? - preguntó un chico que le tapo los ojos a Vienna.

—Hm, ¿tu? - preguntó Vienna con los ojos aún tapados.

—No lo sé. Tu dime - dijo y el chico -que era Liam- le destapó los ojos a Vienna.

—¡Liam! - exclamó ella y lo invitó a sentarse. Ya cuando se sentó, él le plantó un beso a ella. - ¿qué haces aquí? - preguntó ella cuando se separaron.

—Te vengo a invitar a un lugar - dije él, sin parar de mirarla, se veía que la quería, Harry se equivocaba con respecto a su hermano, bueno según mi parecer.

—¿A si? - preguntó Vienna - ¿A dónde?

—Es el lugar donde crecí. ¿Te gustaría ir? Si no quieres, no vamos y ya. - dijo él, haciendo puchero

—Me encantaría ir contigo. ¿Cuando vamos? ¿Mañana?

—Si, mañana pasaré por ti. Aquí a tu instituto. Pide permiso o lo que tengas que hacer. - dijo Liam, la besó nuevamente y se marchó. Despidiendose de mi y de Luke con la mano.

—¿No es un bombón? - preguntó Vienna, luego de qué se había ido. Luke y yo asentimos.


—Hola joven, y jovencitas - dijo Nicole sentandose junto a Vienna. El lugar que hacía dos minutos ocupaba Liam.

—Hola Nicole - dijimos a unísono.

—¿Cómo te fue anoche? - pregunté yo.

—¿Anoche? ¿Con qué? - preguntó ella, tomando un bocado de su comida y llevandolo a su boca.

—Con Niall - susurró Vienna.

—Ah, nada. No paso nada. Terminamos. - dijo ella, indiferente. Mis ojos se abrieron como platos. Al igual que los de Vienna y Luke.

—Yo creo que mejor me voy. Las dejo que sus conversaciones de chicas - dijo Luke. Se levantó y se fue.

—Para ser gay. Es muy masculino - dijo Nicole cambiando de tema.

—Si, lo es - dije yo - pero no cambies el tema, ¿qué pasó con Niall?

—Bueno, él y yo nos fuimos ayer, primero comimos en Picadilly y luego nos fuimos a mi casa. Efectivamente, mis padres no estaban. Les llamé para confirmar su ubicación y me dijeron que el avión aterrizaría en Londres dos horas después. Yo le di el día libre a todo el personal. Una hora después todas las mucamas, jardineros, y cher se habían marchado. Nosotros dos nos metimos a mi habitación y comenzamos a ver películas, comiendo palomitas. Él cada vez que podía me decía que me amaba. Todo iba perfecto. Después nos comenzamos a besar, cada vez más intenso. Yo estaba nerviosa, porque era mi primera vez pero estaba segura, yo amo a Niall - Vienna y yo escuchabamos todo con suma atención y sin parpadear - Nos besamos más fuerte y con más intensidad. Él se quitó la camisa y yo abrí sus pantalones. Para cuando yo comencé a quitarme la ropa, él me detuvo y me dijo: "¿Estás segura que quieres hacerlo?" yo le dije que si, y luego me dijo: "Yo, no quiero hacerlo ahora, Nicole." ¿pueden creerlo? Me dijo que no quería hacerlo ahora. Cualquiera lo hubiera hecho. Para los hombres esto no es nada simbolico.

—¿Y te dijo por qué no quería? - preguntó Vienna, rompiendo el silencio.

—Dijo que por qué no era el momento, que si lo ibamos a hacer algún día no iba a ser en mi habitación luego del instituto y de comer palomitas. Que iba a ser luego de una gran cena. Y sería en la suite de Marriott. E iba a ser, luego de besarnos tanto, de que el calor invadiera nuestros cuerpos, y qué nos extasiaramos de nuestro amor.

—¿Y por qué terminaste con él? ¿Por ser perfecto? - pregunté yo

—¿Perfecto? Yo estaba lista. Perfecto si hubiera pasado algo. Y él me rechazó. - dijo ella y una lágrima cayó por su mejilla.

—¡Nicole! - exclamé - cualquier chica, se muere por un muchacho que quiera esperar. Porque no hay hombre más perfecto si sabe diferenciar el amor del sexo.

—Eso es cierto, Nicole - dijo Vienna - hoy en día es dificil encontrar a alguien como Niall, no lo dejes ir. 

—¿Ustedes creen? - preguntó ella, secando sus lágrimas.

—Claro - dijimos Vienna y yo, al unísono.

—Bien. Le llamaré ahora. - dijo tomándo su telefono de su bolsillo y lo desbloqueó.

—¡No tienes que llamarme! - gritó Niall detrás de ella. Yo lo miré de frente. Vienna y Nicole se giraron.

Niall tenía consigo un gigantesco arreglo. Y más atrás venía Claudia y Zayn con una gran pancarta que decía, "Lo siento, Nicole".

—Lo lamento bebé - dijo Niall y se arrodilló cuando llegó a Nicole. - disculpame. A veces soy un idiota, lo sé. Y te amo mucho, como para perderte. Te amo tanto, que estoy de rodillas con un pantalon de dos mil libras en un cesped húmedo - Nicole rió entre dientes. Sus ojos estaban llenos de lágrimas.

—No. Disculpame tú a mí, Niall - dijo Nicole - yo fui la idiota y no trates de decir lo contrario. Yo debí apreciar eso y no terminar contigo. Lo siento. Y yo también te amo. - ella también se puso de rodillas en el cesped - estos pantalones cuestan dos mil quinientas libras - ambos rieron y se besaron.

Todo el jardín gritó y aplaudió. Vienna y yo nos miramos, como si hubieramos hecho un gran trabajó.


El timbre sonó y Vienna y yo volvimos a clases. Teníamos educación física. Caminando hasta los vestidores, vi a Louis.

—Paige - dijo él corriendo hasta mi - necesito hablarte

—Si. Hola Louis. Yo también estoy bien, gracias. - dije y él sonrió - ¿qué pasa?

—No puedo besar a la chica mañana - dijo él.

—¿Qué? ¿Se transfirió de escuela? - pregunté yo

—No. No puedo y ya.

—Pues, hicimos un trato. Tienes que cumplirlo. - le dije.

—Paige, por favor - suplicó él.

—¿Vas a decirme quién es? - le pregunté

—No. - sonrió

—Entonces, la besarás. Mañana. Al salir de las clases. - dije dando un ultimátum y entrando al vestidor de chicas.

Cuando entré, se escuchó el ruido agudo de los  lockers. Louis los había golpeado. Yo le resté importancia y caminé vestidores a dentro. Él tenía que besar a Vienna, mañana. Que deje su cobardía.

Little White LiesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora