No podía... no podía mirarle a los ojos y decirle que me gustaba Bob o que él ya no me gustaba. Eso sería mentirme a mí misma.
-Yo: Ya está tío
-Justin: No. Dilo -Dijo serio- No eres tan valiente como para decir las cosas a la cara?
-Yo: Que quieres que te diga? Eh? -comencé a llorar- Que aún te sigo amando? Que no puedo evitar llorar cuando te miro a los ojos? Que siento que me muero cuando te veo con Selena? O que nunca me enamoré de nadie como lo estoy de ti? Eso quieres que te diga? -mis lágrimas caían con rapidez- Pues ya esta -sus ojos estaban acuosos, aunque no lloraba. Miré al suelo para poder esconder mis lágrimas- Ya he dicho todo lo que tenía que decir, espero que ahora me dejes -le miré- pero me dejes verdaderamente en paz. No me hables, no me mires, no existo para ti.
-Justin: No puedo hacer eso -una lágrima cayó sobre su mejilla- No puedo dejar de hablarte no lo entiendes?
-Yo: No, no lo entiendo.
-Justin: Al menos quiero ser tu amigo, solo te pido eso. Sé que no volveremos a ser como antes, que nada volverá a ser igual que antes... Pero entiéndeme, quiero que seamos amigos.
-Yo: Justin, pero yo...
-Justin: Por favor -me interrumpió mientras cogía mis manos-
-Yo: Está bien...
Él me abrazó con fuerza, yo inspiré el dulce olor de su cabello, que hacían de mi sufrimiento un mundo. Sería capaz de ser su amiga después de todo?
Apoyé mi cabeza en su hombro y permanecimos así, abrazados, por varios minutos. Luego volvimos a nuestros asientos, cada uno al suyo, separados.
Al llegar a Birmingham pasó más de lo mismo. Cientos de fans, reunidas en el aeropuerto que gritaban mi nombre al pasar por ahí. Ni que yo fuera famosa...
Luego yo fui con las chicas a un centro comercial a comprar ropa o accesorios ya que hacía tiempo que no lo hacíamos. Pero teníamos que volver pronto, ya que hoy mismo volveríamos a las clases, estas clases que habían sido paradas en esa semana de vacaciones en los Ángeles.
-Justin: Enrique, no entiendo este ejercicio -Pasó las hojas de su libreta con desesperación-
-Enrique: Verás Justin, no puedes intentar hacer un ejercicio si no leíste la página entera.
-Justin: Pero es que es tan larga -suspiró-
Mi padre le iba a contestar, pero un sonido, procedente de la puerta le interrumpió.
-Enrique: Adelante.
La puerta se abrió, y entonces entraron una chica y un chico.
-Justin: Hey! -Se levantó corriendo a abrazarlos- Que tal Jaden? Que guapa Willow -les abrazó- Mirad, os presento a los hijos de los Smith, serán mis teloneros -sonrió-
Les saludamos y seguimos con las clases, que por cierto estos chicos se apuntaron a ellas ya que por lo visto, estarían algún que otro concierto con Justin. No le veía sentido... para unas semanas que estarían aquí y tener que dar clases... Pero fue su padre el que los obligó.
-Jaden: No sabía que tu chica fuera tan guapa en persona -sonrió-
Justin me miró sonrojado, pero yo no quise caer en su juego.
-Yo: Ya ves, es que Selena en persona es muy guapa -sonreí y seguí haciendo el ejercicio-
Miré de reojo a Justin, este tenía la mirada clavada en el suelo, sin hacer nada ni decir nada.
