* * *
VenusMe va a pagar todas y cada una De las cosas que se atrevió hacerme y eso, eso es seguro o dejo de llamarme Venus Moon.
Zahir sabía que lo había jodido, hasta el fondo al detener todo, más aun cuando yo iba dispuesta a todo con él en ese momento. Aunque la razón compensaba todo... Entre mis manos estaban las cosas de mis padres. Más allá de mis recuerdos junto a ellos en este proceso de duelo sus pertenencias eran un tesoro para mí. Sus fotos, su ropa donde aún yacía el olor de ambos. Tenía una mezcla tan extraña sensaciones como dolor, tristeza y muy en el fondo resignación, porque desde siempre había sabido que los hijos nacíamos para ver a nuestros padres morir y aun me estaba costando sobrellevarlo.
— ¿Así que volvemos a lo mismo? — Me preguntó Zahir, mientras me encontraba en la que era mi antigua habitación terminando de guardar las cajas donde estaban aquellas valiosas pertenencias.
— No sé de qué me hablas —. Murmuré bajo moviendo las cajas restantes. Lo miré de reojo, estaba parado en el umbral de la puerta de brazos cruzados.— ¿No sabes de que habló? entonces... ¿Por qué estás tan molesta conmigo? —. Me preguntó y al notar que andaba tan conversador lo supe... Sabe que lo arruinó y lo tengo en mis manos.
— siempre estoy molesta contigo Zahir. — Admití sellando algunas cajas con cinta adhesiva. Intentaba parecer despreocupada, cuando realmente quería trepármele encima como un mono y besarlo en agradecimiento por lo de la recuperación de aquellos objetos, que eran tan preciados para mí. Me erguí volteando a verlo. — ¿Cómo conseguiste todo esto?— Esa pregunta me parece un insulto. — Admitió alzando una de sus perfectas cejas oscuras. Ya sabía que una respuesta más clara que esa no había. Negué sonriendo.
— Eres la persona más ególatra que conozco.— No deberías decir eso.
— ¿Por qué?
— Yo no soy ni la mitad de ególatra de lo que eres tú. — ¿What? una risa se me escapó y lo vi sonreír.
— Eso no quita que la cagaste. — Dije dejando de reír de golpe y mirándolo con mala cara.
— fue por una buena causa. — intento justificarse.
— Podías a ver contestado y seguido… — Mierda, ¿pa que dije eso? zahir camino hacia mí.
— puedo remendar eso. ¿Quieres que sigamos? — Preguntó deteniéndose frente a mí, mientras yo tragaba saliva.Ah, ahora si quieres.
Sufre, Como todas aquellas veces que yo sufrí por alguna atención de tu parte.— No. — Corte hasta ahí, para pasarle por un lado dejándolo solo en aquella habitación, mientras me iba silbando cuanta canción se me ocurría al momento.
— Venus... — escuché a Lily llamarme, mientras bajaba las escaleras. Esta estaba despidiendo a Gael que al verme bajar se detuvo para esperarme, Tragué saliva. Al acercarme este volteo el rostro. Se le notaba la rabia por encima.
— Deshazte de ese. Tenemos que hablar — me dijo Gael dándole un beso en la frente a Lily y luego a mí. — Es en serio Venus —. Dijo con tono mordaz.
— está bien Gael.Cuando Gael se fue, con el centenar de polis que más bien parecían unos mercenarios de aquella casa, se sintió un vacío espeluznante.
— ¿Dónde dejaste al papacito? —. Me preguntó susurrando Lily. Rodé los ojos.
— arriba, seguramente pensando "esta mocosa" —. Dije riendo bajo.
— esa risita la conozco ¿estás pensando en algo maquiavélico cierto?
— ¿yo? no... Simplemente voy a darle una lección a Zahir.
— Venus...
— Y tú me vas a ayudar a sacarle canas a mi sensual esposo. — dije sonriéndole.
— ¿Solo canas? — preguntó. — Yo le hago el favor.
— Lily — Chillé quedándome y ella estalló en risas.
— tranquila mi pechugona. — Dijo divertida. — jamás me metería con el hombre del que está enamorada mi única mejor amiga.
— Pff ¿Enamorada yo? — Pregunté aplaudiendo y riendo de manera sarcástica. — Aja…
— Tú eres la única que no te has dado cuenta de ello. — me dijo y dejé de reír, fruncí el ceño. ¿Me está jodiendo verdad?
Ambas nos giramos cuando vimos al sultán bajando por las escaleras.
Piensa, piensa, piensa.
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Venus (COMPLETA)
RomanceSinopsis Un matrimonio negociado... Un hombre millonario, poderoso y peligroso... Un contrato de por vida... Una mujer de armas tomar... Con lo que Zahir Corvis, no contaba, era que su esposa Venus aparte de darle dolores de cabeza por sus actitudes...