Hija De Dragones©

Capítulo 24

*Creo que ahora deberia comenzar nuevamente a ser una chica normal, olvidarme de todo y ser como antes... Por mi culpa todos se han alejado , todo ha cambiado. *

Termine de recorrer el bosque logrando salir sin prisa a la carretera... Teletransportarme seria la forma más rápida de llegar a casa pero solo seguire caminando, asi puedo despejar mi mente aun mas rápido.

A medio camino, mientras la carretera se haya sola decidí mirar al cielo, para asi contemplar cada una de las estrellas que alumbraban en este, una gran luna que fulguraba bajo la gran negra noche.

A unos 2 kilómetros aproximadamente hallé una casona similar a una cantina, nunca antes la habia visto, por lo que me causo mucha curiosidad y entre sin mediar palabra, al empujar aquella puerta de vidrio 3 hombres voltearon a hacia mi, sorprendidos quizás por que era la unica mujer que se hayaba alli, se levantaron y me hicieron seña de que fuera hasta donde ellos se encontraban.

*Sonreí y camine despacio.*

- Hola, primer noche que te vemos por estos lugares. - Dijo uno de los chicos que se encontraba sentado en la mesa.

-Normalmente no suelo estar a estas horas por aquí, es solo que hubo un problema o bueno si asi se le puede decir, por lo que decidi caminar y bueno hasta aqui he llegado. - Dije en tono sarcástico.

-Debes saber que estos lugares son peligrosos para una mujer que ande sola y más hoy que es luna llena. - Dijo otro chico que se hayaba alli en la misma mesa.

-¿Peligroso en que sentido?, ya he tenido suficiente como para tener miedo a cualquier cosa. - Gire los ojos para luego soltar una risa sarcástica.

- Normalmente la sangre de las personas tienen un olor diferente a los híbridos, la sangre de ella no tiene olor... - Susurro uno de los chicos a el cantinero.

-¿Mi sangre?- Mire a ese chico con cierto desprecio.

Todos me miraron asombrados, pues no creian que yo oiría todo lo que susurraban.

-Mi sangre no tiene olor y el color cambia depende en que estado me encuentre. - Sonreí dejando ver mi lengua, esta se encontraba dividida en 2.

-Dragones. - Dijo uno de ellos para levantarse bruscamente de la mesa.

-Si fuera un dragón, no crees que su sangre deberia oler a Cosmos (Flor del otoño, perteneciente a Corea.) - Dijo uno de ellos mientras chasqueaba su lengua.

Sonreí de medio lado y sali de ese lugar, comence a caminar nuevamente por aquella fria y sombría carretera.

Minutos después, me sentí agotada asi que decidí parar en medio del camino y solo mirar nuevamente al cielo...

- No pense que tardara tanto llegar a casa. - Suspiré. -Es mucho más lejos de lo que imagine.-

Tome posición para hacer la teletransportación pero antes de terminar el ciclo para lograrlo, escucho la voz de alguien que proviene de atrás de donde me encuentro yo.

-Entonces si es cierta la historia.- Me giré en ese momento y observe a uno de los chicos de aquel lugar siguiendome.

-¿De que hablas?.- Pregunte sin quitar mi vista de su rostro.

En menos de 1 segundo, desaparece de donde esta y aparece frente a mi.

-¿Eres un chupa sangre?- Dije mientras observaba sus colmillos.

-Esa palabra hiere nuestros sentimientos preciosa.- Guiña un ojo e intenta tocar mi rostro con uno de sus dedos.

Le detengo antes de que estos toquen mi mejilla.