Hija De Dragones©

Capítulo 10

Agradecí a Andy y a Cristen por su hospitalidad, pregunté a ambos si podía quedarme por esta noche a lo que ambos contestaron que sí, sin hacer ningún gesto, fue demasiado gentil, Cristen me mostró la habitación que me correspondía, en este caso sería la de huéspedes, pero muy acogedora, luego de entrar y sentarme en la cama, dirigí mi mirada para el suelo, lágrimas salían de mis ojos, rodaban por mi rostro y finalizaban su camino al ser absorbidas por mi suéter.

- ¿Puedo pasar? - Dijo Andy tocando la puerta. -Claro pasa- respondí asintiendo, mientras limpiaba mis lágrimas rápidamente.

- ¿Estas así por lo ocurrido hoy verdad? - pregunto Andy. -Pero y si tu querido amigo Jack es híbrido y puede saber qué te pasa, ¿Por qué no corrió a auxiliarte? - pregunto Andy con lógica en su pregunta, pero ¿Cómo sabía que Jack era híbrido? - ¿Cómo sabes que Jack es Híbrido? - Pregunté tratando de que Andy dijera algo estúpido, al contrario, su respuesta fue lógica nuevamente. -Crista, somos Hijos de un dragón en específico, cada persona posee poderes similares, pero solo uno de esos nace con diferentes sentidos, yo vi que era Jack, y por lo tanto sé que poderes posee- me guiño un ojo.

Solo asentí y me levanté de la cama, me dirigí al baño y recosté en el marco de la puerta.

- ¿Sabes Andy?, Cuanto quisiera acabar con esto ya, que todo sea normal. - Dije para que luego una lagrima recorriera mi mejilla, a lo que Andy no tardó en llegar y limpiarla antes de que está fuese otra víctima de mi suéter.

-Tranquila pequeña, todo a su tiempo- me guiño un ojo y me abrazo, su pecho era cálido y sentía que con ese abrazo me brindaba más que su amistad, un apoyo.

-Tengo miedo ¿sabes? - dije escondiendo mis manos dentro del suéter. -Tengo miedo de perder la batalla y no poder ayudar a papá, tengo miedo de echar todo a perder- Dije mientras me miraba al espejo. Andy me abrazo y sin más que decir sólo me cargo y me acostó con tal delicadeza.

-Todo estará bien- Beso mi frente y salió de la habitación. Tomé mi celular y llamé a Jack.

-Hola- mi voz se escuchaba entre cortada. -Hola, ¿te sucede algo? - Pregunto, pero no sentía que Jack era sincero. -No nada, solo quería saber si estabas bien- Sonreí y colgué.

Me acosté mirando hacia el techo de la habitación, miles de pensamientos pasaron por mi mente en aquel momento, tenía miedo en realidad de que fuese capturada, cerré mis ojos e intente dormir, pero fracase, aunque lo haya intentado mil veces, solo sabía dar vueltas en mi cama, girar de un lado a otro, no sabía en qué posición dormir, no podía sinceramente.

La habitación de huéspedes queda en una especie de sótano, es acogedora, en realidad me abruma tantas preguntas en mi cabeza.

Subí las gradas y me dirigí a la cocina, creí haber observado a Cristen, pero no, al parecer mi mente estaba creando alucinaciones. Estando en la cocina, tome un vaso y lo llene de agua, lo bebí despacio, mi tranquilidad se esfumó al observar a alguien atrás de mí, me giré sin esperar algún movimiento.

-Andy- dije mientras tomaba una bocanada de aire y lo expulsaba nuevamente, sonreí de medio lado, al acercarme a Andy noto que su piel esta extraña, sus ojos pasan de ser marrones a amarillos y su sonrisa era malévola, sudor frío comenzó a recorrer mi cuerpo, sentía que mi cuerpo iba caer en cualquier momento, puesto que mis piernas no paraban de temblar.

- Que sucede nena- me miro con cierta impotencia, eso me hizo dar cuenta de que en efecto no eran Andy. Corrí en dirección a la habitación, cerré la puerta con los pasadores y me senté en la cama, tenía miedo, sentía que no podía más, creí que todo había terminado.

La puerta se hizo pedazos, pronto mi cuerpo formó una adarga, brindándome la seguridad que necesitaba.

- ¿Tienes miedo pequeña? - me sentía anonadada al sentir sus palabras sobre mí. Pronto este se lanzó sobre mí intentando atravesar la adarga.

En ese momento me desperté del mismo grito que salió de mi boca, Andy y Cristen estaban a mi lado, yo estaba sudando, estaba pálida y Andy nervioso.

- ¿A quién viste? - Pregunto Cristen. -A Andy, físicamente era él, pero noté su piel, sus ojos y su forma de hablarme, no era Andy era alguien más- Dije mientras una lágrima recorría mi mejilla.

Andy, Dormiremos aquí- Dijo Cristen. -Iré por mis cobijas y una colchoneta, en un segundo vuelvo- Asentí y miré a Andy. -Tengo miedo- Andy me abrazo y me hizo sentir protegida con su tierno abrazo.

-Nada te sucederá mientras esté vivo- me abrazo fuertemente y puso mi cabeza en su pecho, tomo la cobija y me arropo, abrazando a Andy me fui quedando dormida.

Después de unos minutos desperté ya que no era capaz de dormir, en mi mente rondaba una y otra vez la imagen del Andy de mi sueño, tenía miedo, pero me sentía protegida con Andy a mi lado, así que me puse lo más cómoda posible.

Ya era aproximadamente las 12 de la noche, estaba dormida completamente, pero me sentía incómoda, sentía una mirada sobre mí, al abrir los ojos, Andy me estaba mirando, su cara reflejaba la mirada de un niño, una dulce sonrisa, me sentía protegida a su lado.

- ¿Te vez hermosa mientras duermes, sabias? - Sonrió y me abrazo. -Aquí estaré pase lo que pase- me guiño un ojo. -Por cierto, Cris, por si el sueño se vuelve realidad, no digo en el sentido de que te ataquen, si no por el otro yo, mira esto- alzó su manga y me mostró una pequeña cortada, se nota que era honda. -Con esto sabrás si soy o no- me abrazo y nuevamente quede dormida en su pecho.