Escuela De Clichés

Especial

Adrián tiene la oportunidad de su vida al estar dentro de la habitación del chico que le encanta. Todo fue gracias a la pequeña hermana de éste y aprovechará la ocasión al máximo.

–Todo huele a él. –murmura mientras da los primeros pasos dentro del cuarto. Su vista se dirige a una camiseta, la cual está sobre los pies de la cama. Entonces la toma y huele la prenda con entusiasmo mientras suelta suspiros.

Justo en ese momento nota a algo moverse bajo las sábanas que están en la cama y una cabellera castaña llama su atención –Harry. –reprime un grito para luego rodear la cama y ubicarse en uno de los lados. El mismo lado hacia donde Harry está mirando dormido. Adrián no puede creer que lo tenga tan cerca, piensa que es un suelo. Pero aún así se ve y siente muy real. Con una de sus manos comienza a acariciar el cabello alborotado del mayor, diciéndose a si mismo que es muy suave.

Parece que Harry siente las caricias y se levanta de la cama dormido, sólo para darle un pequeño susto a Adrián y luego terminar boca arriba. Suelta pequeños ronquidos mientras el rubio casi muere de un ataque al corazón. Está seguro de que si Harry lo ve en su habitación estaría en serios problemas.

Su corazón recibe otro golpe cuando nota que Harry tiene el torso desnudo, no sabe si tampoco lleva pantalones ya que las malditas sábanas lo cubren de la cintura para abajo –Vas a matarme. –murmura Adrián al sentir que su entrepierna crece dentro de sus jeans con solo ver eso. Ni todas las chicas con la que estuvo pudieron hacer algo parecido y esta seguro que tampoco hay otro chico que lo haga sentir igual.

Adrián ya no puede resistirse a Harry, así que se acerca mucho más a él para besar sus labios por un momento. Eso es maravilloso para el rubio. Pero quiere mucho más del mayor y no le interesa llegar hasta el final para conseguirlo. Con ese pensamiento, él comienza a dejar besos por la mandíbula de Harry y baja por su cuello, escuchando como el castaño suspira sonoramente en ocasiones.

Esos sonidos lo incentiva a seguir y escoge un lugar de su cuello en donde hacer una marca. Su boca se detiene en ese lugar para luego comenzar a succionar la piel con fuerza, quiere marcarlo como suyo y todos podrán ver la marca en el cuello de Harry.

Mientras hace la marca, su mano acaricia el pecho del mayor con cuidado. Hasta que siente la necesidad de bajar más y más, entonces sus labios de separan de la piel del otro y sonríe al ver que en ese lugar hay una marca roja que pronto tomará un color violeta.

Adrián sonríe satisfecho. Pero esa sonrisa desaparece al ver que esos iris cafés lo están mirando –Puedo explicarlo. –dice rápidamente. Pero su mano derecha a punto de entrar bajo las sábanas lo incrimina bastante.

Harry lo aparta de un golpe en el rostro, Adrián cae al suelo mientras maldice. Tiene las manos cubriendo su rostro e intenta soportar el dolor –Te dije que no te acercaras a mí.

–Lo sé, p-pero es algo que no controlo. –responde Adrián haciendo rodar los ojos al castaño.

–No estoy de humor para esto. –niega mirando a un lado, pero Adrián insiste que lo ama y le promete que él jamás lo lastimaría ni nada por el estilo. También le comenta que estaba muy preocupado por él ya que no fue a la escuela y sólo quería saber si estaba bien.

–Escuché que ayer tenías una cita y que te dejaron solo. Yo jamás haría eso. –agrega el rubio. Sin saber que acaba de cometer un error.

Eso desata la rabia de Harry y termina dándole otro golpe en el rostro. Éste es mucho más fuerte que el anterior y está cargado de ira. Adrián intenta mantenerse de pie pero el golpe fue demasiado para él –¡Lárgate, no quiero volver a verte jamás! ¡Debes entender que no me gustas! –exclama Harry mirando al menor en el suelo.