— Muy bonito. — Gerard se sobresaltó con la repentina aparición de su hermano menor en la puerta de su habitación. — ¿Qué haces? ¿Buscando empleo para irte de la casa de una vez o jugando algún juego tonto?
— Jugando algún juego tonto. — Respondió indiferente, sin despegar la vista de la pantalla.
— Deberías madurar.
— Michael, si tú fueras muy maduro, no estarías asomándote en la puerta para molestarme, simplemente vivirías tu vida sin estar al pendiente de la mía.
— Uuuuhhh, te mató con esa lógica de campeones. — Para colmo, también llegó la novia de su hermanito, una rubia preciosa y simpática llamada Kristin, quien, al menos había llegado para burlarse de su novio.
A pesar de todo, Mikey escoge bien a las chicas y doy gracias al Señor por eso.
Considerando a la socialité neoyorquina, que son la clase de personas con las que se codea Mikey, no me habría sorprendido que se consiguiera una novia tonta y hueca, de esas que son espectaculares y casi irreales físicamente, las que cumplen con los estándares de belleza pero no los intelectuales.
Pero Kristin es genial, es una chica muy normal a pesar de todo; tiene dinero, pero no es una malcriada. Es bonita, pero también en lista, simpática, tiene una personalidad alegre y magnética.
Hasta me cae mejor que mi propio hermano.
El único defecto de Kristin (que creo que ni siquiera existe y que son cosas mías) es que presiento que tiene como una especie de lado friki que trata de ocultar.
— ¿Qué haces, Gee? — Entró en su habitación con toda la confianza del mundo, pasando completamente de Mikey.
Ni siquiera le importó lo asqueroso que estaba el cuarto de Gerard con la pila de basura y ropa sucia que tenía acumulada, sólo se adentró y se paró junto a él para ver lo que estaba jugando.
— En realidad estoy esperando a que termine de cargar. — La carga del juego iba más lenta que de costumbre, pero eso estaba perfecto para Gerard, porque en el momento, no le convenía que el juego terminara de cargar y que así Mikey y su novia se dieran cuenta de que estaba jugando con un personaje femenino. Qué vergüenza.
— ¡Oh, es Magique Landscape! — La emoción que mostró la rubia ante el título del juego no era normal.
— ¿Conoces el juego? — Gerard se sintió muy intrigado, pues se suponía que la novia de Mikey no pertenecía a ese mundo y no sabía nada de esas cosas.
— ¿Cómo? — Mikey agregó esta pregunta, por las mismas razones.
— Yo... Eh... — Se aclaró la garganta. — Lo que pasa es que mi hermana lo juega y por eso lo conozco.
— Mmm... Ya. — Mikey asintió un poco insatisfecho con esa respuesta ¿Pero quién era él para refutarla y decirle que dudaba de sus palabras?
La verdad es que la hermana de Kristin ya se había convertido en una especie de excusa. A veces a la muchacha se le escapan datos que sorprendían muchísimo a Mikey; conocimientos sobre El Señor de los Anillos, Star Wars, D&D... Luego, cuando se daba cuenta de que había dicho algo vagamente "friki", sólo se reprimía y decía cosas como "lo sé por mi hermana". Al principio, Mikey siempre creía la bendita excusa, pero ya estaba llegando a ese punto en el que se preguntaba si Kristin de verdad pasaba tanto tiempo con su hermana como para saber tantas cosas sobre ese mundo.
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Life Online; Frerard
FanfictionDonde Gerard es un treintañero que no sabe qué hacer con su vida más que jugar juegos de rol multijugador; en ese pequeño mundo conoce a Frank Iero, quien le muestra que la vida real puede ser tan genial como la vida oline.