Del Odio Al Amor (Christopher Vélez)

Capítulo 25

Este capítulo va dedicado a Nutella_forever_16

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Pero creo que era una buena manera de arreglar las cosas, además así voy a poder ayudarlo más con sus padres....

Narra Christopher:

Después de tanto tiempo por fin conseguí ser su amigo. Crei que nunca lo conseguiría, pero ahora veo que no fueron en vano todos mis esfuerzos.

Aún recuerdo la primera vez que la vi. Ella cree que fue la vez en el pasillo con Alan, pero no fue así.

Ella tal vez me vio ahí por primera vez, pero yo la vi mucho antes, así que les contaré.

Era un sábado, mi padre me obligó a acompañarlo a la empresa, el me dejo en su oficina pues iría con sus socios ha hacerle una entrevista de trabajo a una señora.

No entendía porque demonios me llevaba si me iba a dejar aburrido en aquella oficina.

Y para colmo me había quitado mi celular. Así que me dispuse a jugar con una pelotita pequeña que había en su escritorio.

La comenze a lanzar por las paredes, hasta que calló en una de las ventanas, asustandome, pues si lo rompía mi padre me mataría.

Me acerqué a la ventana para ver la luna y vi que estaba en perfecto estado, suspire aliviado. Pero a través de aquella luna la vi.

Ella estaba sentada en el sillón cruzada de piernas mirando con atención su celular. Tenía unos jeans negros con una playera blanca y unos tenis de ambos colores. Su cabello estaba suelto, las ondas del mismo rodeaban su rostro.

Me quedé como tarado mirandola se veía tan linda, pero era extraño, al verla sentí la necesidad de tenerla conmigo. Se que siempre he sido un "Don Juan" como solían decirme los chicos, y que siempre que estaba con una chica era por una semana, ya que sólo me atraían no llegaban a gustarme en realidad.

Ella levantó su cabeza mirando a todos lados, como si buscara algo, pero luego la volvió a bajar para seguir mirando su celular.

Yo no sabía porque me había quedado así, era raro, en ese momento me hize a la idea de que sólo la quería para un rato, para satisfacer mi ego nada importante, pero no fue así.

Ella levanto la cabeza pero esta vez mirando fijamente a la ventana. Al ver eso me asuste y retrocedí callendo de espaldas al piso.

Pero luego recordé que por aquellas ventanas sólo se podía ver lo que pasaba afuera, más no de adentro, la parte de afuera era como un espejo. Así que me despreocupe y volví a mirarla.

Pero esta vez ella se levantó y fue directo hacia la ventana, se paró en frente de ella y comenzó ha hacer muecas graciosas, yo comencé a reír, pero luego me tapé la boca para que ella no se diera cuenta.

Después comenzó a sonreir para luego negar con la cabeza.

-Este cambio tan repentino me está afectando de verdad- escuche que dijo mientras su sonrisa se desvanecía.

Bajo su mirada y luego puso su mano en la ventana, se veía triste, así que en donde ella puso su mano yo puse la mía. Pude notar que su mano a lado de la mía era muy pequeña y eso me dio cierta ternura.