⚔Capitulo 14: Palabras de un comandante⚔

1.9K 161 38
                                    


Nota 4# No juzgues a alguien por su presente, tú no sabes lo que fue de su pasado. Y lo que pueden llegar a ser en el futuro

Mis pies se sentían muy helados, pronto seria invierno. Mis dedos incluso estaban morados por lo frio del clima, estaba un poco contrariada, pues el estar dormida por dos días, me desubico por completo. No he visto a ninguno de los chicos desde entonces y eso me hacía sentir un poco desanimada más porque ellos en estos momentos deben de ir a la ceremonia.

Todo el día lo pase en cama ya hasta creo que me quede sin trasero, es cierto que mis heridas pueden sanar rápidamente, pero por la gravedad de la caída, es lógico que todavía mis huesos, y tendones estén gravemente dañados. No seré capaz de moverme hasta que se regeneren, que fiasco.

La noche fue cayendo lentamente y nadie llego. Era lógico si andaban en la cena así que no esperaba que alguien llegara verme. Incluso después de las comidas que me trajo la enfermera me propuse dormir para no estar tan esperanzada de ver a alguien.

Pero entre el silencio del lugar, comencé a escuchar unos pasos entre la oscuridad, no podía ver quien era debido a que la enfermera dejo entre mi camilla y la otra unas cortinas para darme privacidad, no podía ser mujer pues eran unas pisadas eran más firmes y duras, es por eso que pensé que sería alguien más.

Una silueta alta se dibujaba como reflejo de los candelabros me tense pues en mi mente comencé a teorizar quien sería esa persona, trataba de enfocar mis ojos lo más que podía, pero entonces lo mire. Alto, rubio y ojos azules. Era Erwin Smith.

Mi corazón comenzó a palpitar de alegría. Porque no había tenido la oportunidad de ver su estado hasta estos momentos, no creí poder sentirme tan feliz de ver a un desconocido vivo. Se miraba tan bien, y recuperado, muy diferente a como lo vi en aquella azotea, en donde podía ver sus órganos casi que fuera, aunque me surgió la duda ¿Qué hacía aquí?

—Señor Smith...es grato verlo— estaba muy emocionada, de por fin poder conocerlo, y el parecía ser alguien tan calmado y pacífico. Al tenerlo justo en frente de mi camilla me hacía sentir tremendamente ansiosa, el vestía una camisa blanca de mangas largas era realmente alto.

—Vaya tu eres a la que le debo mi vida—salvarle la vida, eso hice yo—no había tenido la oportunidad de verte hasta ahora. Bueno es que mi esposa no ha dejado que salga de mi habitación por la recuperación. Pero es bueno tener el momento para agradecerte, lo mucho que hiciste por mí.

—No se preocupe, la recuperación es primero antes que todo, pero no sabe que feliz me hace que todo haya salido para bien. ¿Pero cómo supo dónde encontrarme?, dudo que su esposa se lo dijera.

—Eh... ¿Te molesta si te acompaño? Y te lo cuento todo.

—No en lo absoluto, ya me comenzaba a sentir un poco sola ya que la enfermera se retiró.

—Si es que este lugar es un poco tétrico cuando no hay muchas personas, supuse que te podrías sentir un poco triste aquí.

—Si...Gracias, realmente me sentía así.

El señor Erwin busco una silla para poder estar más cómodo y se puso a un lado de mi camilla para poder hablar mejor. Creo que por un lado entendí por qué Carolina se había enamorado de él, una persona con sus características personales y físico son capaz de encantar a cualquiera. Claro que Carolina no estaba para nada de lejos en belleza, pero su personalidad tiene muchos altos y bajos para mi gusto.

No sé en qué momento comencé a evaluar a los hombres de esta manera, pero francamente era inevitable no crear un estándar del tipo de hombre que hay por estos lados, de la isla, eran muy bien parecidos la mayoría.

Alas Carmesí (LevixLectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora