"¿Quién demonios eres tú?"

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Eran apenas las 6:58 de la mañana cuando en la misma banca que hace 2 años, Kate y Kyle se encontraban sentadas ríendo de estupideces y demás hasta que llegó un chico al cual desconocían completamente.

-Hola, mi nombre es Daniel -sonrío amablemente.

-¿Eres nuevo? -río levemente, el chico asintió. -Mi nombre es Kate, ella es Kyle.

Las chicas estrecharon graciosamente sus manos con aquel chico.

Voltearon hacia el frente al escuchar pasos acercarse y maldiciones bajas.

-Jordan's point of view-

Los gritos de mi madre podrían despertar a todo el vecindario pero seguiría sin importarle.

De mala gana me senté en mi cama tallando mis ojos perezosamente, era otra vez lunes y anoche me desvelé en el celular. Al salir mi madre de la habitación continua con mi horrible uniforme, me paré y agarré las medias blancas -que para acabarla- eran diferentes.

Mamá, me diste medias diferentes! -Grité revolviendo los cajones en busca del par de la otra.

-¡Acá abajo hay! -gritó- ¡Baja rápido, ya son las 6:27!

Me puse desodorante, me abroché la fea y enorme camiseta y subí la aun más horrible falda y bajé con mi celular y zapatos en mano, me senté en la barra y miré mi desayuno, huevo con chorizo.

Mis desayunos no eran muy elaborados como se veía en las novelas, películas, tipo rayita y eso, siempre era algo con huevo o cereal, siempre.

Cuando terminé fui directo al baño a peinarme y lavarme los dientes, tenía tanto sueño que me lo dejé suelto, tomé mi mochila y abrí la puerta de la entrada, subí a la camioneta y miré la hora a la vez que mi mamá bufó y salió volando -casi literalmente- para llegar a la parada del bus, lamentablemente ya eran las 6:47 y el bus ya se había ido, luego de muchos sermones a los cuales no les tomé importancia llegamos a la escuela.

-¿A las 3?

-Sí, adiós. -Contesté para caminar hacia la entrada de mi fea escuela -sí, todo lo que tenga que ver con mi escuela es feo- viendo a los profesores revisar a los alumnos.

Pasando por ellos y sus miradas "intimidadoras" fui hacia la -ya típica en estos 2 años- banca amarilla donde se encontraban mis amigas Kate y Kyle, maldije en bajo al revisar los bolsillos de mi mochila y no encontrar mis audífonos.

-Hol...-Al llegar me topé con una sorpresa, un chico al cual nunca había visto, de cabello negro y ojos -muy bonitos, si me permiten decirlo- grises- ¿Quién demonios eres tú?

¡El amor no existe!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora