¡El amor no existe!

"¿Sigues con ese "fustan", María?

-¿¡Mario!? -casi grito, mi mejor amigo de toda la vida que me abandonó está en frente mío y no he bricado a sus brazos.

-Oh dios, ¿estoy viendo a la mismísima Jordan Marie Williams? -gritó muy agudo, agitando sus manos graciosamente.

-Oh dios, eres tan gay.

-5 años querida -dijo incrédulo- 5 años sin vernos y me dices "oh dios, eres tan gay" ¿enserio? -bromeó ofendido.

-Si Mario está aquí eso significa que... -abrió los ojos de canica que tiene y gritó demasiado fuerte, dejandome sorda... otra vez- ¡JESSIE ESTÁ AQUÍ!

-Sí, de hecho está en su cuart...

No lo dejó terminar y no sé de donde saco una niña de 11 años esa fuerza para quitar a Mario de en medio, pero lo hizo.

-¿Y no me dejarás pasar, inútil?

-Oh sí, pasa mi amorsito. -Hizo un reverencia indicando la puerta a lo que reí y pasé pisando su pie.

-Eso me pasa por ser tan caballero -se quejó.

-Exacto, maldito cursi.

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-¡No lo creo!

-Oh sí, nena. Este galán de aquí conoció a la maravillosa Beyoncé. -enseño sus musculos y se recostó en el cómodo sillón con sus brazos en su cabeza.

-Yo tengo la suerte de un navo -bromeé.

-Bueno navo, te toca, ¿qué ha sido de tu vida?

-Lo de siempre, ya sabes. Nada nuevo excepto por mis 4 trofeos y 3 medallas de ORO nuevos -dije orgullosa, MUY orgullosa. ¿Olvidé mencionar que juego Basquetbol?

-Doña ego al asecho. -rió fuerte y me contagió sus carcajadas- ¿y chicos? tu sabes -agitó sus pobladas cejas.

-De hecho, hay un chico...

-¡OH DIOS! ¿¡TÚ Y UN CHICO!? ¡RÁPIDO AL BUNQUER DE EMERGENCIA, YA VIENE EL APOCALIPSIS! -gritó fingiendo desesperación.

-...que hace quererme tirar del techo.

Volteó a verme tan jodidamente rápido que no puedo creer como no se rompió el cuello y rompió a carcajadas.

-Me lo esperaba.

-Apenas lo conocí hoy y es un pequeño grano en el culo -gruñí.

-¡Eso es amooor! -cantó.

-¡Eso no existee! -le imité.

-¡Que todavía no lo encuentres es otra cosaaa! -siguió cantando.

-El amor no existe -dije ahora seria.

-Bien doña ogra, ¿quieres cenar en casa? -dijo volviendo a sonreír, la verdad su sonrisa es muy bonita y nada castrosa como la de ustedes ya saben.

-No lo creo -dije mirando mi reloj- digo, no es que no quiera, si quiero pero mam...

-Lo entiendo María -dijo mi segundo nombre en español, cosa que odio.

-No me llames así, Tonio -traté de decir Toño en español pero me es complicado, al contrario de Mario al ser latinoamericano- ¿y si tu vienes a comer sandwiches de mantequilla de maní y jalea y duermes en mi casa? -sonreí a lo que el hizo una cara de asco.

-Está bien María, todo por ti.

Me abrazó por los hombros y caminamos hacia la puerta.

-¡CHRIS! -grité- ¡NOS VAMOS!

-¡NOOOOOOOO! -bajó corriendo mientras una niña un poco más baja y de cabello castaño corría detrás de ella.

-Hola Jessie.

-Hola Jordy -ella era la única que me llamaba así, por alguna extraña razón. Me abrazó efusivamente y le correspondí.

-Jessie, ¿quieres ir a dormir a mi casa? -le susurré.

-¡Sí, sí, sí! -corrió hacia su cuarto y regresó con ropa en una pequeña mochila.

-¿Tu que piensas usar? -le dije a Mario que jugaba con mi hermana.

-Dormiré en Boxers -dijo como si fuera lo más normal del mundo, de hecho lo era... hace 5 años- Es broma, dormiré con estos pants, son cómodos -dijo al ver mi cara de horror.

No es como que no quisiera ver a este chico en Boxers pero tampoco soy así.

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-¡Te odio, enserio! -grité al ver mi delicioso sandwich de mantequilla de maní y jalea a la mitad.

-¡Está rico!

-¡PERO ERA MÍO! -volví a gritar- aparte a ti no te fustan.

-¿Sigues con ese "fustan"? -dijo incrédulo.

-Sí, ¿algún problema? -dije al prender mi xbox 360 y entregándole un mando.

-No, no. -río.

-Bien -asentí más para mi que para el y puse el juego.