7 LA FURIA DEL SEÑOR

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Después de varios minutos estaba en mi cuarto esperando a oír el sonido de la puerta cerrarse indicando que mamá había entrado, pero nada, ¿por qué no entraba a la casa?, pude haber besado a Drew y después haber entrado; otro punto menos a mi favor, espero que él no se desespere conmigo.

Crack. El crujido de la puerta me alertó, baje descalza dos escalones y me quedé quieta, desde mi posición se puede oír bien una conversación de la sala, ahí estaba mi abuelo viendo TV, como siempre. No escuchaba nada, sólo el sonido de las voces de la ópera clásica que supongo veía Robert; me estaban poniendo de mal humor en ese momento. El olor a madrea y nuez era muy intenso.

—Hola papá, ya vine—dijo mamá

Mamá usaba un vestido gris y un saco del mismo color.

—Aveline, ¿por qué tan temprano?

Robert traía puesto un suéter naranja, pantalón marrón y sus zapatos negros de vestir lustrados a la perfección.

Esa es la respuesta más cariñosa que he escuchado de un padre a su hija.

—Hoy comenzaron mis vacaciones y nos dejaron salir temprano.

—Me da gusto.

El sonido de un comercial de comida invadió la habitación

— ¿Puedo sentarme?—preguntó mamá

—Claro, no estoy viendo nada importante.

El terciopelo azul que cubre los sillones de la sala rechinó cuando mamá se sentó.

— ¿Dónde van a pasar las fiestas?—pronunció la dulce voz de mamá

— En casa de Simone; nos invitó a todos a la cena, como cada año.

—Bueno Jordan y yo no iremos—suspiró—Una amiga de la Ciudad Celestial nos está invitando a conocer su nueva casa y pasaremos con ella las fiestas.

Había soltado la bomba, ahora venía la onda expansiva.

—Bien— escuché la voz grave de Robert contestar.

¿Bien? ¿Así de fácil?; parece que me había preocupado más de la cuenta.

—Es bueno que lo tomes así papá—continuó mamá

—Espera, lo decía porque van a repetir El lago de los cisnes en una hora; ¿Jordan y tú no estarán aquí? ¿Por cuánto tiempo?—preguntó molesto

Olvídalo. Demasiado bueno para ser del cielo.

—Exacto, dos semanas—dijo con timidez

—Todas las vacaciones—suspiró— Sabes que la navidad y el año son fiestas para pasar en familia, ¿ella es tú familia?

—No papá, pero hemos pasado con ustedes muchas fiestas; una no hará la diferencia—repuso mi madre.

— Lo que digas, lo que estás haciendo con tu vida y la de tu hija está muy mal Aveline, no quiero oír nada más; haz lo que quieras, parece que no tuvieras familia, maldición.—gruñó

Mi madre guardó silencio por unos segundos, ¿estaría llorando?

—Los amigos son familia también papá, es una lástima que tú no los veas así —contestó y se levantó del sillón.

Corrí a toda prisa por las escaleras. Mientras iba a mi habitación escuché que Robert dijo:

—Avísale a Beth y a Simone, no creo que les guste la noticia.

Las flores sombrías    #PGP2018Donde viven las historias. Descúbrelo ahora