—Entonces... ¿Cuándo te veré? — Preguntó mi chica mientras deslizaba sus manos por mi torso y fijaba su tierna mirada en mi. Nos encontrábamos frente a la puerta de su casa, después de una hermosa y candente velada como novios oficiales, había pasado a dejarla sana y salva. Claro, eso después de haber conseguido una llanta de refacción una vez que la grúa acudió a nuestro rescate.
— Nos veremos pronto mi amor...
Mari sonrió, se abrazó a mi cuello y se paró sobre sus puntillas para besar mis labios con tanta calma, amor y ternura que sentí como mi vida entera se la entregaba en ese dulce beso... Carajo, la amaba tanto.
—Esto funcionará... ¿Verdad? — Preguntó una vez que nos separamos y pude notar un rastro de temor en su mirada.
—Pondré todo de mi parte para que así sea... Lo prometo.
Ella sonrió, depositando un corto beso en mis labios.
—No serás el único... —Suspiró —Nunca creí que llegaríamos tan lejos...
— Y es solo el comienzo...
Un breve silencio se hizo presente entre ambos, sin embargo; no era uno incómodo, era más bien, el lapso de tiempo que ambos necesitábamos para caer en cuenta de que todo aquello no era un sueño, era total y absolutamente real.
—Sé que ambos lucharemos por que funcione y, por mi parte, te prometo que voy a luchar por ti todos los días —Suspiré, cerrando los ojos al recordar la estupidez que cometí unas cuantas noches atrás —Prometo ser siempre sincero contigo...
Ella asintió, tomando mi rostro con sus manos y al instante, abrí los ojos, encontrándome con su dulce mirada.
—Yo también seré sincera contigo... —apretó mis mejillas, plantando un pequeño beso en mis labios —Y lucharé porque nuestra relación funcio...
—¿Serás paciente conmigo? — La interrumpí, ella asintió. — ¿Y me dejaras explicarte las cosas sin enojarte?
Asintió de nuevo.
—¿Confiarás en mí?
— Absolutamente.
Sonreí aliviado, atrapando sus labios en un tierno beso el cual, ella correspondió al instante. Sus deliciosos labios besaban y acariciaban los míos con lentitud y, poco a poco, su lengua se abrió paso dentro de mi boca, provocándome.
—Adrien... — Jadeó en el momento en que nos separamos un poco mientras un delgado hilo de saliva unía nuestras lenguas —Creo que... Es mejor que entre a casa.
Sonreí relamiendo mis labios para después volver a besarla. Era como si mi boca, mi cuerpo, mis manos, todo de mi necesitara de ella, de sentirla, tocarla, saborearla, acariciarla...
—Me cuesta tanto despedirme de ti...
—No eres el único —suspiró, peinando mis cabellos hacia atrás —Pero tengo cosas que hacer y seguro tú también.
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𝐒𝐂𝐀𝐑𝐘 𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐕𝐨𝐥. 1 & 2
عاطفية¿Pueden dos mejores amigos arriesgarse a perderse el uno al otro por darle paso al amor? Adrien y Marinette son amigos desde que eran unos inocentes y tiernos niños. Crecieron juntos y su amistad se fortaleció, volviéndose prácticamente inseparable...