Enamorada de él Matt Hamilton (Mi Bestia)

Capítulo 11

Capítulo dedicado a tod@s mis lectores fantasmas gracias por leer para mi es muy importante, aunque estén en las sombras se los agradezco 😘😘😘
                                                 
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Reicher

Había pasado aquello que tanto temía, había sucedido. Una vez sentí su respiración pesada en mi espalda con gran cuidado de no despertarlo me deslicé fuera de aquella inmensa cama, mentiría si dijera que no me gustó eran sensaciones nuevas para mí no pude frenarlo sus carias y sus besos nublaron todos mis pensamientos y mentiría como una descarada si dijera que no lo deseaba.

Claro que lo deseaba, deseaba a ese hombre, aunque me lo prohibía a mí misma cada vez que pensaba en ello, desde aquella noche de la gala benéfica cuando me beso de aquella manera tan lujuriosa me sentí deseada por primera vez en mi vida, aquel beso despertó en mí sensaciones que jamás había sentido, él se había encargado de despertar en mi cosas que jamás pensé sentir.

Sus caricias encendieron algo en mí que no pude contener, sus besos húmedos por todo mi cuerpo solo hacían más grandes aquellas sensaciones, ver como se deshizo de la escasa ropa que llevaba hizo que no dudará de su experiencia y a la vez me llevo a pensar en a cuantas mujeres les había hecho lo mismo, quería gritarle que parara, que no estaba lista para esto, pero mi cuerpo decía todo lo contrario, su toque hacía divagar mis pensamientos haciendo que solo aquello que estaba pasando estuviera en mi mente.

Su boca dejaba besos húmedos y calientes por todo mi cuerpo haciendo un recorrido hasta llegar a mis senos jugueteo con ellos a su antojo y yo lo disfrutaba, los abandonó para seguir aquel recorrido que había pausado en mis senos hasta llegar al elástico de mis pantalones deshaciéndose de ellos como lo había hecho con la blusa de mi pijama.

Cuando llego a mis bragas juro que mi sangre se heló, mis ojos parecían salirse de órbita, cuando sentí su toque en mi entrepierna aquellas sensaciones se intensificaron al mil, mi propio cuerpo me traicionaba, estaba a merced de aquella bestia que tanto daño le había hecho a mi familia.

Con una agilidad increíble se deshizo de mis bragas dejándome completamente desnuda ante él, nuestras miradas se encontraron y quería desaparecer no quería saber cómo se encontraba mi cara ni mucho menos que él viera el miedo que en el fondo estaba sintiendo, moriría de vergüenza, su boca se adueñó sin aviso alguno de mi clítoris dándome un increíble placer, lamia, chupaba y jugaba con él a su total antojo fue entonces cuando sentí su miembro juguetear en mi entrada y sin aviso me penetro, clave mis uñas en su espalda ahogando un grito ante el dolor que aquello provocaba en mí, lo menos que quería era que supiera que estaba entregándome a él por primera vez.

El entraba y salía de mi con suavidad como si estuviera plasmando aquello en su mente y cuerpo, me costaba respirar y adaptarme a la voluptuosidad de su miembro, con cada estocada mi cuerpo se fue acostumbrando hasta que aquel dolor punzante pasó a ser una simple molestia dando paso a una gran ola de placer, mis manos acariciaban su cuerpo sin pudor, sus estocadas se intensificaron al igual que mi deseo era una sensación nueva para mí, sentí aquello que se apoderaba de mí.

Había leído muchísimas veces sobre ello, pero sentirlo era mucho más diferente a leerlo aquel calor que sentía dentro de mi iniciaba desde lo más profundo de mí y recorrió todo mi cuerpo e iba en aumento, sus estocadas aumentaban aquello de manera increíble, el rose de su cuerpo con el mío sudados, unidos como si fuéramos una sola persona me daban una sensación indescriptible, estaba cerca muy cerca de explotar y él lo sabía, lo sentía por la manera en que mis paredes vaginales se contraían de tal manera que sentía como mi vagina apretaba su miembro erecto y duro dentro de mí, sus movimientos fueron más intensos y no aguante, explote en aquellas sensaciones nuevas para mí en un orgasmo arrollador.