28.-¿Por qué le ha llamado enfermera?

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Karim se fue triste, me daba igual, lo que le dije era verdad y no quería que nada cambiase. Me quedé dormida pensando en Karim, en Inna, en Luke... El día siguiente, martes, iba a hacer novillos pero mis padres estaban aún arreglando papeles. Aunque me daba igual, ya estaba decidido, no iría al instituto. Necesitaba salir y despejarme un poco, estaba demasiado confundida y cansada para, por encima, ir al instituto. Puse unas zapatillas azules, ya gastadas por el timpo, unos pantalones cortos y un top crop negro. Salté desde la ventana de mi habitación hasta el césped, menos mal que nadie me vio. Me fui a dar un paseo por el puerto y me paré para ver las maravillosas vistas. Me quedé pensando en mis problemas, en cómo solucionarlos...hasta que la tranquilidad rompió....

-Anda, ¿mira quién está aquí? - esa voz era de Inna, oía muchos pasos, seguramente vino con sus amiguitos.

-¿Qué quieres? Déjame en paz. - me giré hacia ella.

-Tranquila, no te voy a hacer daño, no tengas miedo, cenicienta.- se rió.

-No te tengo miedo Inna, te podría aplastar con un dedo. No te vayas chuleando tanto por el barrio.

-¿Ah sí? Podríamos probarlo.

-No quería contagiarme de tu gilipollez. - todos gritaron: UUUh!

-¿Tienes miedo de romperte una uña bonita?

-Corrijo: tengo ganas de romperte la puta cara. - me acerqué hacia ella.

-¡Uhh! La gatita muerde, me encantaría verlo para creerlo.

-Tú no sabes hacer nada, solamente chupar cosas y no voy a decir qué cosas.

-Te has metido en problemas.

-Me he metido solita.

-Prepárate.

-Siempre estoy preparada. - un puñetazo me rozó la cara, haciendo que mi labio inferior empezase a sangrar rápidamente. Le agarré de los pelos mientras ella gritaba de dolor y después le tiré al suelo. Ella se levantó y me dio una patada en el estómago, después yo le cogí por el cuello y nos tiramos al suelo, yo agitando su cuello rápidamente mientras ella me arrancaba los pelos muy fuerte. Oí una moto acercarse, era Luke y Patricia. Tresh se acercó rápidamente. Le di un puñetazo en toda la cara a Inna, y empezó a sangrar por la nariz. - Así estás más guapa.- susurré. Me dio una bofetada. Antes de que pudiera darle otro puñetazo seguido de una patada en sus ovarios Luke me agarró de mi cintura, me levantó y me separó de esa zorra que se estaba levantando del suelo con ayuda de unos chicos, uno me sonaba demasiado, era... ¿Karim?

-¿Qué ha pasado? - dijo Luke preocupado.

-Ha empezado ella.

-Lo sé, ¿te duele mucho? -asentí con la cabeza. - Tranquila, te llevaré a mi casa. - me abrazó mientras Inna y su gente se acercaba a mí, y a mi gente.

-Hoy serás mi enfermero, ¿eh? - sonreí.

-Hemmings, aún no he acabado la pelea.- dijo Inna haciendo crujir sus dedos. Me giré hacia ella, menos mal que paré de sangrar enseguida.

-Déjala en paz.- replicó Luke.

-¿Ahora estás de su equipo? ¿Desde cuándo? Ah, sí, desde que te lavó el cerebro. No lo ocultes Hemmings, lo sabe todo el mundo.

-Eso no es verdad.

-Mientes. - sonrió pícaramente.

-Déjala en paz y márchate, no tienes nada que hacer aquí.

-Sí que tengo algo que hacer, machacar a esta capulla.

-¡Capulla será tu madre!- grité intentando acercarme a ella pero Patricia me agarró del top hacia atrás.

-No te atrevas a acercarte más a este barrio, no te pertenece. - dijo Inna.

-Vete a la mierda, ah no, que tu casa no está cerca de aquí, ¿no?

-Siempre has sido una zorra, una perdedora. Solamente estás utilizando a Luke, toda la gente lo sabe.

-Luke, te aviso de que si me vuelve a insultar esta paleta va a comer el suelo de lo lindo. - dije seria.

-No te atreverías.- dijo ella rodeando los ojos.

-Vete Inna, no quiero más líos.- dijo Luke acercándose a ella mientras Patricia me agarraba de la mano, ella estaba temblando.

-¿Qué te pasa?- le susurré a Patricia.

-Estoy intentando no pegarle una hostia a esa puta. Es tu pelea, no la mía. - le apreté más la mano, yo también estaba nerviosa.

-¡Estás cambiando Hemmings!- gritó Inna antes de irse. Yo, al igual que Patricia, no podía dejar de temblar.

...

Eran las cuatro, mis padres estaban en casa y seguramente no estarían preocupados, nunca se preocupaban por mí, ni aunque me atropellase un camión.

-¿Te encuentras mejor? - dijo Luke sentándose a mi lado en su sofá.

-Bueno, aparte de que me duele la cabeza y ya no sangro por mi labio inferior....sí, sí me encuentro mejor.- sonreí y él hizo lo mismo.

-Te metes en cada problema...

-Ya, Kiara Clifford vive para meterse en líos.- se empezó a reír.

-Y Luke Hemmmings la acompañará para que los dos sean enfermeros profesionales.- nos reímos los dos a carcajadas.

-¿Cómo es que habías venido tan rápido a la pelea?

-Estaba cerca del puerto. Oí que había bulla pero no me importó, hasta que Tresh se acercó corriendo hacia mí y me dijo que eras tú la que estabas en la pelea. Patricia vino detrás mía.

-Gracias.

-Eres mi novia Kiara, ¿cómo no te defendería? - sonreí como una tonta, al saber que era la novia de Luke Hemmings. - ¿Por qué sonríes?- negué con la cabeza, aún sonriendo.

-Tonterías mías...

-¿Te ríes porque dije que eras mi novia?- asentí con la cabeza.- Pues, para informarte, eres mi novia. Si no lo sabías.- dijo irónicamente, me reí y le di un codazo.

-Qué tonto eres, me encantas.

-Lo sé, todas las chicas vienen hacia mí. Ten cuidado.- rodeé los ojos.

-¿Qué hora es?

-Son las cinco y cuarto.

-Mierda, no quiero ir a casa. Me castigarán.

-Voy contigo.

-Ahora no me castigarán, me matarán.

-Venga vamos.- se levantó, y al cabo de unos minutos estábamos los dos en la entrada de mi casa, esperando a que me abriesen la puerta.

-¿Si?- mi madre abrió la puerta, cuando me vio se puso enfadada, me cogió del brazo rápidamente y me acercó a ella.- ¡Kiara! ¿¡Dónde has ido?! ¡Estábamos preocupados!

-Emmm, señora.- dijo Luke rascándose la cabeza, yo esperaba que su respuesta fuese decente, o por lo menos con un poco de sentido. - No la tomes con ella, no es su culpa. Mira, ella fue al instituto y después la invité a comer a mi casa, ella aceptó pero no tenía su móvil para llamar y no recordaba vuestros números de teléfonos. Entre charlar y comer nos pasó el tiempo volando. - abrí los ojos como platos, era la primera vez que Luke hablaba bien, sin palabrotas, formal.

-Ah.- mi madre me soltó del brazo.- En ese caso...perdona hija.

-Adiós enfermera.- dijo Luke, dándome un beso, haciendo que mi madre se preguntase en su escaso cerebro: [¿Por qué le ha llamado enfermera?]

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Incontrolable (Luke Hemmings)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora