Incontrolable (Luke Hemmings)

31.- Hundida en mi interior

Después de estudiar bajé hasta la cocina y comí hasta reventar. Decidí dar un paseo por el barrio de Luke, todo me recordaba a él. Ya no me daba miedo andar por ahí, si fui capaz de darle un puñetazo en toda la cara a Karim, ¿por qué no a otro? Pasaba por la calle y toda la gente me miraba, se notaba que allí era importante gracias a Luke, pero yo no buscaba la fama. Puse mis gafas de sol y hacía burbujas con mi chicle de menta.

-Hola Kiara.

-¿Luke?

-El mismo.- nos reímos y me giré hacia él. - ¿Qué haces aquí?

-Eso mismo te iba a preguntar.

-No sé, dando un paseo.

-Ay no, a ver si te van a robar. - dijo con acento pijo. Me reí a carcajadas.

-Antes le rompo los dientes.

-¡¡Qué malota!! - nos reímos otra vez.- ¿Nos vamos?

-¿Adónde Hemmings? - rápidamente me cogió de las caderas y me arrimó hacia él, juntó nuestras frentes mientras me miraba hacia mis labios.

-A escaparnos juntos. - susurró.

-Estás loco.- me reí. - Aunque me encantaría. - le susurré en el oído. Él mordió su labio inferior.

-No, eres demasiado aburrida para aguantarte más. - se rió y yo le di un codazo.

-Ya has estropeado el momento.- dije negando con la cabeza y sonriendo.

-Lo siento, no me podía aguantar.

-No pongas excusas capullo.- una vieja nos miró mal, pensaría que nos estábamos peleando. Pero ella no captaría nuestro rollo. Luke juntó nuestras frentes y me besó. - Eres un caso aún sin resolver.

-Entonces quiero que seas tú la investigadora. - me reí.

-Hace mucha calor.- dije abanicándome con mi mano.

-Eso es porque me has visto.- me guiñó un ojo.

-Sí, seguramente será por eso, ni lo dudo Hemmings.

-Es que yo sé. - dijo señalándose.

-¡Vaya! ¡La parejita!- dijo Karim acercándose hacia nosotros.

-Mierda...- murmuré mientras mordía mi labio inferior nerviosa.

-¿Qué quieres Karim? - dijo Luke serio.

-Solo quiero hablar con tu chica tío.

-¿No te basta ya?- se acercó hasta él.- Déjala en paz.

-Solo quiero hablar con ella, Hemmings. - Luke me miró y yo asentí con la cabeza.

-Ten cuidado Karim - mi novio se fue hasta un bar, seguramente iba a comprar tabaco, muy propio de él. Estaba sola con Karim, otra vez, estaba preparada para una gran discusión con insultos de por medio.

-¿Qué quieres? - pregunté cruzando los brazos.

-Ya te han dicho que me van a expulsar, ¿no?

-Sí, se rumorea por todo el instituto.

-¿Cómo has podido ser tan cruel conmigo? Mis padres me van a matar cuando lo sepan.

-¿Perdona? Tú has sido el cruel, me has hecho meterme en más líos de los que ya estaba.

-Eso es porque te querías meter en problemas solita.

-Ya, pero tú también has tenido que ver algo en esto, ¡no te hagas la víctima!

-Todo fue por la culpa de tu novio, es un puto celoso.

-Eso no es verdad.

-¿Ah no? Pregúntaselo a su amigo Tresh.

-No lo haré, confío en Luke.

-Pues haces mal.

-Tu opinión me la paso por los huevos.

-¿Por qué eres tan difícil?

-Tengo muchas razones.

-Quisiera saberlas para comprenderte de una puñetera vez.

-Y yo quisiera comprender tu estupidez, pero veo que no lo consigo. Desde que te conocí solamente me estás metiendo en líos.

-Y te voy a meter en más.

-Ja, quisiera verlo para creerlo.

-¿Ah sí?

-Por supuesto pedazo retrasado. - Luke salió del bar y se apoyó en la puerta mientras nos miraba.

-Como tú mandes.- Karim me cogió de las caderas, me arrimó hacia él y me besó mientras yo me resistía.

-¡Kiara! - gritó Luke confundido y enfadado. Negó con la cabeza varias veces y se fue rápidamente corriendo hacia a saber dónde.

-¿¡Estás loco?!-grité separándome de Karim.

-¿Qué? Has dicho que te gustaría verlo para creerlo.- se rio.

-¡Eres un capullo!

-Suerte, a ver cómo le explicas todo esto a tu novio. - cerré los puños.

-¿¡Por qué me quieres joder la puta vida?!

-Vamos bonita, se nota que te gusta que yo te joda la vida.- me agarró otra vez de las caderas y yo escupí mi chicle en toda su cara. Antes de que él pudiese hacer algo yo ya estaba corriendo hacia mi casa. Abrí rápidamente la puerta de mi habitación y me encerré en ella. Cogí mi móvil y llamé tres veces a Luke pero él no contestaba, le envié diez mensajes pero no me respondía. Había pasado solo media hora del puñetero beso y no sabía nada de Hemmings.

-¡Mierda! - grité dándole una patada a mi cama y después quejándome del dolor. - Cógelo Luke por favor, cógelo Luke por favor...-dije intentando llamarle.

-¿Si?

-Luke por favor escúchame...

-Aquí no está Luke.- esa voz me sonaba, era...era...¡Rebeca! Noté que tapaba el móvil y se botó a reír. - Lo siento, te llamará cuando pueda, adiós.- se rió otra vez y colgó.

-No puede ser, Hemmings no me haría esto. - dije cerrando los puños. - ¡NO puede ser!- grité cogiendo mi móvil y tirándolo al suelo.

-¿Kiara?- dijo mi hermano entrando en mi habitación, yo tenía todo el rimel corrido por la cara y estaba empezando a llorar. - ¿Qué te ha pasado? Ven aquí.- me cogió de la mano y después me abrazó mientras yo me hundía en mi interior, un dolor en mi estómago me hacía llorar aún más. Michael me dio unos pañuelos mientras yo me sentaba en mi cama, limpiándome el rímel y las lágrimas. - ¿Me quieres decir por qué estabas llorando?

-Estaba hablando con Karim y de repente me besó, Luke nos miró mientras nos besábamos y se fue, le he llamado y ha contestado Rebeca. - mi hermano resopló. - No quiero pensar el motivo por el que Rebeca me cogió el teléfono.

-Ahora no te preocupes por él, preocúpate por ti.

-No puedo.

-Kiara...

-¡Que no puedo!- interrumpí cortante. - Déjame sola, no quiero que me veas llorar.

-Vamos soy tu hermano.

-Déjame sola.

-Vale, pero acuérdate de bajar y comer algo, ¿vale? Hazlo por mí.- me dio un beso en la frente y se fue. Me tumbé en la cama y cerré los ojos, por un momento sentí que Luke estaba a mi lado, riéndose conmigo. Después pensé en Karim y un escalofrío recorrió todo mi cuerpo. Antes de quedarme dormida en mi cama, solté una última lágrima. Pero no iba a ser la última.