Incontrolable (Luke Hemmings)

22.- Perdiendo

-¡Luke!- grité a todo pulmón levantándome rápidamente del sofá.

-¿Qué pasa? - Luke seguía dormido.

-¡Son las diez y media! ¡Las clases ya han empezado hace mucho! - Hemmings se despertó rápidamente y se levantó.

-Mierda, coge todas tus cosas, nos vamos al instituto.

-¡Mi mochila está en mi casa!

-Joder, joder...- se paró un minuto y me miró.- ¿Qué te parece hacer novillos un día?

-Pero después me van a cargar la culpa.

-No, lo solucionaré.

-¿Cómo?

-Voy a pensar.

-Mierda, si piensas ya estamos tocados y hundidos. - me sentí rendida en el sofá.

-Eh, no soy tan tonto.- nos reímos.

-¿Y ahora qué hacemos?

-No sé, podemos hacer cosas.- se acercó a mí, levantando y bajando sus cejas rápidamente, me reí como una loca.

-Ni harta de vino Hemmings.

-¿Por qué no? Se nota que eres virgen...

-No soy virgen.

-¿Ah no? Demuéstramelo. - mordió su labio inferior.

-No voy a caer en tu trampa, Luke.- nos reímos y le di un codazo. - Soy tonta, pero no tanto...- Luke negó con la cabeza sonriendo.

-Kiara Clifford eres un caso crítico.- dijo imitándome, cogí un cojín y le di en toda la cabeza. - ¿Con qué esas tenemos eh? ¿Quieres que te haga cosquillas? - negué con la cabeza. Mi móvil sonó rápidamente.

-¿Kiara?

-Hola Michael.- tragué saliva.

-No te veo por el instituto.

-E...estoy en la clase de música.

-Me has dado un susto, pensaba que harías novillos o algo parecido.

-Bueno, vale, adiós.

-Chao.- colgué rápidamente y resoplé.

-¿Se ha enterado? - preguntó Luke.

-No.

-Menos mal, eres una suertuda.

-Ya me contarás a mí...-rodeé los ojos.- ¿Adónde vamos ahora?

-Podemos dar una vuelta por el instituto y esperar a que salgan. Así tu hermano no se dará cuenta de que has hecho novillos.

-Hemmings, ¿por qué nunca usas tu fabuloso cerebro? - nos reímos. - De acuerdo, ah, gracias por acoplarme en tu casa esta noche.

-No ha sido nada, aunque sé que soy pesado, aún no entiendo por qué no hemos hecho nada.- nos botamos a reír otra vez. Llegamos al instituto y los dos nos apoyamos en su moto, me ofreció un cigarrillo pero no acepté.

-¡Eh Kiara!- gritó Michael acercándose cuando sonó el segundo timbre.

-Hola- sonreí.

-Has salido muy temprano, ¿no?

-Sí.

-Sí, temprano...- dijo irónicamente riéndose Luke. Le pisé un pie para que dejase de hacer el payaso.

-Emmm, bueno, ¿nos vamos para casa?

-Vete tú, te seguiré por el camino, no me voy a perder eh. - Luke y yo nos reímos y le guiñé un ojo a mi hermano.