2920, Primera semilla, Vol. 3

36 5 0
                                    


Autor: Carlovac Townway 


El Último año de la Primera Era.

15 de Primera semilla, 2920, Caer Suvio, Cyrodiil.

Desde su privilegiada posición en lo alto de las colinas, el emperador Reman III podía ver aún las espirales de la [[Ciudad Imperial]], pero sabía que estaba lejos de su tierra y de casa. Lord Glavio tenía una lujosa villa, aunque no lo bastante grande como para albergar a todo el ejército dentro de ella. Las tiendas se alineaban en las colinas y los soldados se acercaban a disfrutar de la famosa primavera de su territorio. No es de extrañar, pues el helado viento del invierno aún refrescaba esporádicamente.

"Príncipe Juilek, su hijo no se siente bien".

Cuando el potentado Versidue-Shaie habló, el emperador reaccionó al instante. Para él era un misterio cómo ese akaviri podía desplazarse por la hierba sin hacer el menor ruido.

"Me atrevería a decir que lo han envenenado", dijo Reman. "Consíguele un buen curandero. Le dije que contratase a un catador, como el que yo tengo, pero es un cabezota. Hay espías por todas partes, lo sé".

"Me temo que estés en lo cierto, majestad imperial", dijo Versidue-Shaie. "Vivimos tiempos traicioneros y debemos tomar precauciones para asegurarnos de que Morrowind no gane esta guerra, ya sea en el campo de batalla o por otros medios más sofisticados. Por eso le sugiero que no dirija la vanguardia a la batalla esta vez. Sé que deseas hacerlo, igual que tus ilustres antecesores Reman I, Brazollo Dor y Reman II hicieron, pero me temo que sería demasiado arriesgado. Espero que no te moleste mi sinceridad".

"No", asintió Reman. "Creo que tienes razón. Pero ¿quién liderará la vanguardia entonces?"

"Yo sugeriría al príncipe Juilek, si se recupera", respondió el akaviri. "De no ser así, Storig de Farrun, con la reina Naghea de Fluvia a la izquierda y el jefe de guerra Ulaqth de Lilmoth a la derecha".

"Una khajiita a la izquierda y un argoniano a la derecha...", el emperador frunció el ceño. "Nunca he confiado demasiado en estos seres".

El potentado no se ofendió. Sabía que al decir "estos seres" se refería a los nativos de Tamriel, no a los Tsaesci de Akavir como él. "Soy de la misma opinión, majestad imperial, pero debemos admitir que odian a los dunmer. Particularmente Ulaqth, después de que el duque de El Duelo arrasase sus tierras".

El emperador concedió que así fuese y el potentado se retiró. Era sorprendente, pensó Reman, pero el potentado parecía de confianza por primera vez. Era alguien a quien convenía tener a favor.


18 de Primera semilla, 2920 Ald Erfoud, Morrowind

"¿Dónde está el ejército imperial?", preguntó Vivec.

"A dos días de marcha", respondió su lugarteniente. "Si marchamos toda la noche, llegaremos a lo alto de Pryai mañana por la mañana. Nuestros espías nos han informado de que el emperador liderará la retaguardia, Storig de Farrun la vanguardia, Naghea de Fluvia el flanco izquierdo y Ulaqth de Lilmoth el flanco derecho".

"Ulaqth", dijo Vivec, con una idea en mente. "¿Podemos confiar en nuestros espías? ¿Quién nos ha informado?"

"Un espía bretón del ejército imperial", dijo el lugarteniente señalando a un joven con el pelo rubio rojizo que dio un paso al frente e hizo una reverencia a Vivec.

La Biblioteca de Tamriel: OBLIVIONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora