Lo único que puedo escuchar ahora son mis sollozos. La almohada ya está húmeda, debido a mis lágrimas.
Alguien llama a mi puerta. En este momento, lo que deseo es que sea Adam.
Me seco las lágrimas con las palmas de mis manos, mientras me levanto de la cama y me dirijo hasta la puerta, para abrir.
Es la persona a la que menos quiero ver: James.
¿Por qué tenía que ser él? Siento que lo odio con todas mis fuerzas. No tengo ánimos de discutir. Pero seguro a eso vino.
-¿Qué es lo que quieres? -puedo distinguir el tono irritado de mi voz.
-Hablar contigo.
-Lo lamento, yo no quiero. -Intento cerrar la puerta, pero él pone su pie para evitarlo- ¡Vete de mi habitación! No quiero estar contigo.
-Tendrás que aguantar. Vives conmigo.
-Hay veces en las que desearía que no fuera así.
-No seas malcriada, Grace.
-¿Malcriada? Y dime, James ¿Cuándo dejarás tú de ser tan amargado?
-Tengo razones para enojarme.
-Claro, claro.
James bufa, luego pasa la mano por su cabello y comienza a dar masaje a su frente, como si le doliera la cabeza o estuviera estresado.
-Escucha, Grace, he venido a hablarte de algo muy importante.
Doy media vuelta, para dirigirme a mi cama. Me siento con las piernas cruzadas. Recargo mi codo en una de ellas y mi barbilla en los nudillos de mis manos.
-¿Y bien? -Enarco una ceja- ¿Qué es eso tan importante?
Cierra la puerta, con una leve patada detrás de él. Se acerca a mí y se pone de frente, pero sin sentarse.
Levanto la mirada, puedo notar su ceño fruncido y con rostro de desaprobación.
-Tan sólo no quiero que te pongas histérica -me advierte.
-Como digas.
Él rodea los ojos.
-Grace, lo tuyo con Adam terminó. No estarás cerca de él jamás.
Mis cejas se alzan, casi podrían llegar al cielo. Mis labios se curvan y dejan escapar una risita divertida.
-Vamos, deja de bromear.
-¿Crees que bromeo?
Me pongo de pie nuevamente y lo miro fijamente. Sé que está bromeando.
-Como si eso fuera posible. Jamás me separaré de Adam.
-Eso es lo que tú crees.
-Muy buena broma, James -río un poco.
-Basta. Estoy hablando muy en serio. No te quiero ver cerca de él, porque lo mataré ¿entendiste?
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Negocios Miserables {Adam Driver}
Hayran KurguGrace Collins es una chica de 19 años que vive con su madre, una mujer alcohólica y drogadicta que la trata a su antojo. Pero todo cambia cuando decide venderla con un hombre llamado James Hiddleston. Él es un delincuente muy adinerado. Después de...