Intersección y presagio

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"¿Vir?" Le llamó Florencia desde su lugar acostada en la cama, escondiendo su cara detrás de El guardián entre el centeno que por curiosidad había empezado a leer luego de que Manuela se lo mencionara hace unos días. "¿Eu?" Virginia respondió sujetando el rizador entre su cabello y deleitándose con cada curva que rebotaba en su hombro frente al espejo. "¿Cuántas percepciones crees que pueda haber de uno mismo?" Con cuidado de no quemarse con el tubo de metal, le dio la espalda al espejo para voltear a verla. Calculando que quizás era broma su pregunta. Pero, no era. "¿De qué hablas, Flor?" La menor dobló la esquina de la página donde se quedó en la lectura y cerró el libro, sentándose sobre la cama y golpeando la portada con sus dedos. "Si cada persona tiene una percepción distinta de ti y hay como 7,000 millones de personas en el mundo, quiere decir que entonces hay 6,999 millones de percepciones de ti más la tuya ¿cómo sabes quién eres realmente? ¿O si eres realmente alguien?" Terminó su perorata echando su cabeza hacia atrás en la almohada dejando que su inexplorada teoría se estancara en su cerebro. "Boluda, ¿qué mierda estás leyendo?" Lanzó el rizador sobre el peinador y se acercó a ella para leer el título del libro que aún sostenía en sus manos, Flor sólo le sonrió y tomó su celular del colchón. "Me lo recomendó Manuela durante la sesión pasada" Virginia hizo un nuevo gesto de extrañamiento, arrugando su frente y entrecerrando los ojos, esperando más explicación de su parte, pero sin recibirla se atrevió a seguir. "¿Manuela la que vino el otro día cuando estabas mal?" Flor asintió, sin dedicarle ni una mirada a su hermana, concentrada en la pantalla de su celular. Virginia resopló derrotada y giro de nuevo hacia el espejo continuando con el rizador. No me está gustando el libro ¿segura que se pone bueno en algún punto? Le mandó el mensaje con una sonrisa en la cara, como si el no estar de acuerdo con Manuela fuera una victoria sin esfuerzo o cruzar la meta sin haber corrido un maratón. Te dije que no tenías que leerlo, lo importante ya te lo había dicho, necia. Virginia notó la sonrisa de Flor desde el espejo y temía preguntar, pero todos parecían saber lo que sucedía menos ella. Al principio había defendido su relación con Lucía, pero ahora se sentía descartada, su hermana ya no recurría a ella como antes. ¿Qué tenía Florencia que provocaba ese tipo de reacción en la gente? Me hice la promesa de terminar lo que empiezo ¿recuerdas? Tiró el celular a un lado y tomó el libro abriéndolo en la página que había señalado con el doblez. "¿Con quién te mensajeas tanto?" El tono retador de Virginia evidenciaba su molestia al no enterarse de nada. "Manu" Justo cuando estaba por revirar, el celular volvió a sonar, aunque esta vez no era Manuela, sino Jazmín. La próxima vez no me dejes salir con ellos, no los soporto. Flor volvió a sonreír ¿cuántas sonrisas tiene el ser humano? ¿Será que algún día se acaban? ¿Y si se acaban cómo elegimos las que usamos y con quiénes las usamos? Los Estrellos fueron forzados por Lucho a ir en busca de su nueva conquista, a causa del reciente engaño de Carla con el barman. Jazmín se había negado por días a acompañarlos, pero esta vez se lo pidieron Javo y Federico que no querían ir solos con Lucho y sus primos. ¿Tan mal está la cosa? Sin esperar por la respuesta de Jazmín, Flor volvió al libro, tratando de concentrarse en las líneas, pero su hermana, su novia y su amiga se habían propuesto impedirlo esa noche. "¿Y qué pasa con esa Manu?" A Flor le seguía pareciendo extraño el tono que utilizaba Virginia para referirse a Manuela, por lo que no sabía cómo debía responderle, afortunadamente no tuvo que hacerlo porque su celular volvió a sonar. "¡Ah bueno, la popular!" Lucho no ha parado de llorar. Flor explotó en una carcajada que asustó a Virginia, estuvo a dos segundos de contestar, pero Jazmín no le dio oportunidad. ¿Tú qué haces? Te extraño. Y otra vez estuvo a dos segundos de contestar, pero ahora Manuela no le dio oportunidad. ¿En qué capítulo vas? ¿Ya llegaste a la parte que te dije? Virginia le gruñó enfadada por tanta interrupción y tornó al rizador. Primero, obviamente, eligió responderle a Jazmín. Leyendo un libro, hablando con Vir y con Manu. Yo también te extraño. ¿Me avisas cuando salgas de ahí para vernos en casa? Y después le contestó a Manuela. Ya, pero no puedo seguir con esto, es tedioso, Manu. ¿De verdad piensas eso de mí? El asunto es que por descuido sistémico ambos mensajes fueron enviados a un único destinatario, Jazmín, sin que Florencia se percatara. Le iba a contar a Virginia acerca de su amistad con Manuela, pero en eso entraron a la habitación sin tocar ni avisar, Carla y Miranda. Tan pronto entraron haciendo un ruidajo con su risa estrepitosa, Miranda se lanzó encima de Florencia en la cama y Carla empezó a dar vueltas con una botella de champagne en la mano. Evidentemente la noche no iba bien para ella y para Lucho. "¡Vístanse, vengo por ustedes, nos vamos!" Miranda se reía de ella, apoyando su cabeza en los muslos de Flor que por cierto seguía con el libro en la mano. "¿De qué hablas, Carla? No vamos a ningún lado" Virginia apagó por fin el rizador y se unió a sus hermanas en la cama, recostándose en protesta. "Si, vamos a ir al bar donde están todos a espiar a Lucho" Espetó, impositiva, como acostumbraba, dando otro trago a la botella y tambaleándose con el sillón. "No, no, no, vulva black eso de espiar no está bueno, Carla" Miranda se sentó al escuchar esto y afirmó, tomando el libro de las manos de Flor y repasando el título. "Cierto, Florencia lo sabe por experiencia. Mejor ponemos una peli y nos quedamos aquí las cuatros, dejamos que ellos se diviertan por su cuenta y nosotras por la nuestra" Aventó el libro a la mesa y volvió a recargar su cabeza en las piernas de Flor. "No, chicas, por favor, necesito ir a ver qué están haciendo, Javo le dijo a Jazmín que irían a buscarle una novia a Lucho" Virginia soltó una risa y negaba con la cabeza. "Carla, no te entiendo, no era que no querías estar con él ¿qué te pasa ahora?" Florencia también se rehusaba a aceptar la invitación de Carla, iniciando unos rulitos en el cabello de Miranda. "Sí, es verdad lo que dice Vir, la otra noche me dijiste que te había cachado con el barman ugh ¿qué te importa si tiene una novia nueva?" Carla caminó hasta ellas y les ofreció la botella, pero ninguna la tomó. "Cuando lo de Manuel te banqué, con tus miles de cagadas con Dani, ahí estuve, con tus idas y vueltas con Ignacio y Javo... bueno, estaba aunque no me vieras... ahora yo les pido ayuda, por favor ¿sí? Sólo vamos un rato y tomamos algo y nos volvemos" Nada mejor para exaltar la culpa Estrella que increpar sobre los errores del pasado. "Argolluda ¿no te parece medio invasivo ir a cagarles la fiesta?" Carla tomó otro trago y se alejó de la cama, dirigiéndose hacia la puerta, sin disposición para escuchar más excusas. "Escuché que Lolita iba a estar ahí" Dijo con cinismo, sabía que si convencía a Virginia, Virginia convencería a Flor y Flor a Miranda. La cadena del dominio voluntario. "¡Ay qué hija de puta!" Virginia se paró de inmediato, chasqueando sus dedos en el aire, apurándolas a levantarse. "¿Qué pasó con tu actitud zen, Virginia?" Gritó Miranda, reincorporándose para ir a su habitación. "Carla tiene razón, ella estuvo ahí para ustedes y ahora les toca. Flor ¿por qué no invitas a Manuela? Me gustaría conocerla" Y ahí estaba de nuevo ese tono que aún no se comprendía. "Sí, Flor, dile a Manu, la vez pasada no terminamos de hablar" Lo contempló un momento y decidió hacerlo, pero no le mandó mensaje, prefirió llamarle y decirle a dónde irían. Manuela gustosa aceptó.

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