8. Conversación.

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Narra Thomas 

Natasha ha adelantado su viaje varios días. Llevaba molestándome para ir ya para Estados Unidos para empezar a ayudar a Cara. Intenté que no fuéramos tan pronto pero ella insistía hasta que me dijo que se iba. Nuestro billete estaba para final de mes, para lo que queda aún semana y media. No tengo ganas de ir pero no me queda otra. 

Me dijo que me avisaría al llegar. Se fue esta mañana y por las horas que han pasado, ya debería estar en la ciudad. 

Doy paseos de un lado al otro de la habitación. Marco su número pero no da señal. Comienzo a preocuparme en cómo habrá llegado. 

La puerta suena y paro de dar vueltas. Voy a abrir y dejo entrar a Paul. 

-¿Qué tal tío?

-Muy bien, ¿has hablado hoy con tu hermana? - Él me niega sentándose en la cama. Se cruza de brazos y me mira.

-No, ¿Por qué?

-Natasha ya debería haber llegado y no me llama.

-Estará con el jet lag, no te preocupes, a parte ahora allí deberá ser temprano, menos de medio día. 

-Sí... Eso puede ser... Llamaré más tarde...

-Vengo a invitarte a tomar unas cervezas con Marc y los otros.

-¿Al bar de siempre?

-Claro, en diez minutos nos vamos - Asiento cuando se levanta y sale de la habitación. 

Llamo a Cara y espero a que me lo coja. 

-¿Thomas? 

-Hola guapa - Sonrío al escuchar la voz de Cara. 

-¿Qué tal estás?

-Muy bien, ¿Por allí todo?

-Perfecto, estoy en el probador de la tienda de vestidos de novia... Las chicas me han acompañado para ver si encuentro alguno que me guste.

-¿Las chicas?

-Sí, Lucci y Nora - Suspiro al escuchar su nombre - Se están portando muy bien conmigo.

-Tú te mereces eso y mas bonita. 

-Oh, que blando te están poniendo por Inglaterra ¿no?

-Qué tonterías estás diciendo - Suelto una carcajada y ella me imita - ¿Y qué tal están?

-Bien... Lucci va muy bien con Ethan y está trabajando entre semana... Eso ya lo sabes ¿No? 

-Sí, algunas cosas me cuenta Ethan, con ella no he hablado prácticamente nada en estos dos años.

-Es entendible...

-No lo niego, pero... en fin, ¿Y Nora?

-Ella está bien, sigue con su vida Thomas, y me alegro mucho por ella, hacía mucho que no me preguntabas.

-Bueno, era sólo una pregunta.

-¿Qué va a pasar cuando vengas?

-¿Qué tiene que pasar? - Espero a que conteste y al no hacerlo vuelvo a hablar - Cara, todo quedó atrás.

-Quedó atrás por el paso del tiempo, es algo normal... Pero bueno, donde hubo fuego...

-Sí entiendo, pero tranquila, que no voy a arruinar tu boda.

-No te estoy diciendo eso Thomas - Río al escucharla quejarse. 

-Te quiero mucho, hablamos más tarde. 

Al colgar cojo una camiseta blanca y me pongo sobre ella una chaqueta de cuero. Bajo rápido y escucho a Marc quejarse de mi tardanza. Al llegar le revuelvo el pelo rojo y salimos los tres. Me monto en el coche y conduzco hacia el bar. 

Al llegar allí nos bajamos a la vez y entramos. La gente nos conoce y se calla al vernos entrar. Los tres sonreímos y nos sentamos al lado de la barra. 

-Hermano ¿Qué harás al llegar a Estados Unidos?

-¿A qué te refieres Marc? - Lo miro dando un sorbo a mi cerveza.

-Ya sabes... Las peleas y eso.

-Hace mucho que no peleo, no me vendría mal planear alguna.

-¿Estás seguro? Aún no estás bien del todo... 

-Claro que sí Paul, estoy ya bien - Muevo un poco las piernas. Aún me duelen un poco al moverlas pero lo peor sin duda es la parte baja de la espalda. Da pinchazos al incorporarme y agacharme. Pero es normal. 

-Moveré los hilos para que tengas alguna - Asiento a Marc mientras saca su móvil. Comienza a mandar mensajes. Paul me mira negando pero ignoro su mirada bebiendo.

-¿Y Nora? - Marc eleva la vista y hace que deje de beber. Dejo la bebida sobre la barra y trago el líquido en mi boca.

-Nora estará ahí y no puedo evitarlo.

-¿Querrás estar con ella?

-¿Por qué todos preguntáis eso maldita sea? - Ruedo los ojos evitando contestar a la pregunta - Bueno, voy a salir fuera a llamar a Mary a ver si sabe algo de Natasha, ya será por la tarde allí - Ellos asienten. Me levanto terminándome la cerveza y salgo. Me enciendo un cigarro mientras marco el número de su casa.

Me apoyo en un banco y espero. El teléfono suena y termina colgándose al no cogerlo nadie. 

Doy una calada y lo intento otra vez. 

Al segundo pitido descuelgan el teléfono.

-Hola Mary - Espero a que hablen desde el otro lado pero solo escucho leves respiraciones - ¿Mary?

-Ahora... - Ella tose y reconozco su voz. Paro de fumar al momento - Ahora te la paso... Está fuera - Su voz suena entrecortada. Mi pierna tiembla mientras escucho sus pasos.

-Nora... 

-Aquí está... - Noto como lo dice más para ella que avisándome a mí.

-Espera, ¿Qué tal has estado?

-Bien... - Sigo escuchando sus pasos y miro hacia el cigarro en mi mano. Aprieto la mandíbula.


Narra Nora

-¿Qué tal has estado? - Su voz suena a través del teléfono mientras intento calmar mis nervios. 

¿Cómo se atreve? ¿Cómo se atreve a interesarse por mí después de dejarme sola?

-Bien - Cierro los ojos saliendo al patio. Busco a Mary pero no la encuentro por ningún lado y comienzo a ponerme más nerviosa.

-Me alegro, de verdad.

-¿Ah sí? - La risa irónica sale de mi boca - No encuentro a Mary, cuando vuelva le diré que has llamado, adios. 

-Espera Nora... Sólo quiero saber un poco de tí.

-No Thomas, no tienes nada que saber de mí, adios - Cuelgo antes de que sus palabras me  puedan hacer sentir peor de lo que ya estoy. No comprendo como una simple palabra suya puede hacerme temblar. Odio ese sentimiento y tengo que superarlo, más ahora que lo tendré que enfrentar en pocos días.

-¿Me llamabas Nora? - Mary junto a Natasha aparecen frente a mi vista.

-¿Dónde estábais?

-Estaba enseñándole a Natasha los alrededores y donde será la boda...

-Ha llamado Thomas - Le tiendo el móvil. 

Cara aparece rápido en el patio y nos mira alterada.

-¿Qué pasa?

-Ethan... 

STAY (BP 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora